Tu eres mi arte Kim [TAEKOOK]

01

La vida ante nuestros ojos es la que importa...

Kim estaba pensantivo mientras estaba sentado en un banco pequeño, descalzo, en su lugar preferido, aquel chico de piel canela con perfil unico, cabello suave dorado y largo. Ahí estaba en su salón donde nadie más importaba que su arte y él, para sus ojos eso importaba nada más, últimamente no a tenido inspiración para su arte diario que le ayuda a plasmar y olvidar sus frustaciones, las línes, pintura, el arte es lo que más ama en su vida.

Llevaba una hora y media con el pincel en la mano mientras observaba el líenzo concentrado, decidio levantarse mientras solto un pequeño suspiro cerrando sus finos ojos, camino suavemente, estresado pero con calma, a Kim no lo entendían por sus sentimientos, a los artistas los tienen juzgados como locos por como miran las cosas, para Kim los artistas son almas libres

Decidido puso su disco favorito, eran los años 60, en su hogar se escuchaba "Fly me to the moon..." la melodía entrando a sus oídos mientras su imaginación fluía, tenía una copa en su mano con vino mientras bailaba lentamente, disfrutando la compañía de él mismo, era casí noche, mañana tenía que ir a su trabajo nuevo, un vendedor en una tíenda de arte, aunque fuera de algo que lo apacionara no le gustaba mucho, ya que él quiere que sus obras sean mostradas ante el mundo, sus padres habían fallecido tal solo cuando el tenía 14 años, ante un choque automolistico, sus padres ese día iban emocionados a visitar la casa de un artista muy famoso que ahora en ese momento su hogar se abrío como un museo.

Al siguiente día Kim abrió los ojos con la cara algo inchada por tomar algo de vino en la noche, no entendía porque le sucedía eso pero igual tomaba vino, se sento en su comoda cama de sabanas color blanco mientras se tallaba su rostro

- "No quisiera ir pero necesito dinero.." - Diciendose a el mismo con voz ronca y despacio

Se levanto poniendose unas sandalías y caminando hacía la ducha meintras se quitaba su camisa color blanco y boxer, al entrar a la ducha y sentir el agua recorrer su cuerpo agacho su cabeza con los ojos cerrados y imaginandose a él con una compañía que amara mientras la pintaba a aquella persona, Kim no era sociable por tener diferentes pensamientos a las demas personas, siempre que trataba de mantener platica con alguien termina más bien como una discusion en vez de una conversación, un simple ejemplo es cuando una chica se le acercaba a coquetearle se le hacía vulgar como se le acercaban con un escote y labial rojo y sonriendo, ha Kim le asqueaba esa manera de querer "conocer" a alguien.

Salio de la ducha y se vistio con un pantalon de vistir, una camisa blanca y un saco, hacía frio pero eso no le iba a quitar su gusto por verse bien, se puso sus zapatos y cepillo su cabello, termino por ponerse una bufanda y agarrar sus llaves, salío en camino hacía su nuevo empleo.

En el lugar era elegante, materiales de dibujo, pintura, baile, música, etc, entro a la tienda y miro a su compañero de trabajo y le sonrío
Kim le devolvió la sonrisa cuando se detenía en el estante de pinturas, en eso llego un joven con piel de porcelana y cabello ondulado color negro con un lunar bajo sus labios rosados por el frío tal vez y su nariz, con ojos grandes y brillantes, un abrigo color negro y pantalones negros y guantes, parecía perdido lo cual le llamo la atencion  a Kim después de todo ese era su trabajo, así que se le acerco

- "Buenos días ¿Buscas algo en particular?"

- "Hola buenos días, si de echo busco lienzos pequeños pero parecen que solo hay grandes"

Kim le pareció tierno y solto una pequeña sonrisa, el chico parecía no saber de esta area

- "Dejame ayudarte"

Kim camino hacía los lienzos de varios tamaños mientras este chico lo seguía, le entrego uno y el chico se relajo y se lo agradeció, él le quería enseñar pinturas y le empezo a explicarle, texturas, para que pudieran ayudar.

- "Parece que sabes de esto, te quiero preguntar algo"

-"Si claro dime"

-"¿Das clases de pintura?

Kim nunca lo había pensado aunque no sonaba mal idea y ganaría más dinero.

-"Nunca he dado pero no suena mala idea"

- "¿Crees que podrías darme clases de pintura, apenaz estoy comenzando y quisiera aprender"

-"Claro, dejame anotarte mi dirección, pero primero dime tu nombre" - ambos soltaron unas pequeñas risas

-"Me llamo Jungkook, Jeon Jungkook"

El chico se fue con la nota, el día paso normal y era de noche al fin había salido de el trabajo, camino a su hogar le gusto ese día aunque no le agradara tanto su empleo ya que le agrado la compañía de aquel chico, estaba tranquilo que decidio llegando a casa entrar a su salón y pintar mientras toma copaz de vino.

Espero les guste mi comienzo de la historia, a Taehyung lo haré referente de como soy yo.

Muchas gracias señoritas y caballeros.