Nota 1

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La obra en el teatro Majestic fue un éxito, después nos vinieron tantas nuevas ofertas que apenas teníamos tiempo para ir a comer juntos a un lugar público, cada vez el rostro de todos nosotros era más conocido, tenía el respeto e importancia que un productor de la gran elite tenia, me sentía como en las nubes y la energía de seguir dando espectáculos por todo el país me llenaba tanto que haba veces en que de la felicidad lloraba.

Hay veces que, en el hotel, en la madrugada cuando todo estas quieto y silencioso, es en esas horas en que aun escucho sus gruñidos.

Sus garras marcar los muebles y su actitud incontrolable de enojo hace que tire y destruya las cosas.

Despierto aterrado, sudo con exceso y debo cambiar mi camisa al menos 3 veces en una noche, a veces la señorita crowley va a traerme un té caliente y espera a que me quede dormido, convenciéndome que no hay nada, que él está lejos, que él está en la cárcel.

Es una persona muy peligrosa y así espero que se quede, hasta siempre si es posible.

Pero aún no se va ese miedo, que pueda en la noche estar observándome.

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