Capitulo #50

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JungKookie iba caminando de manera despreocupada por los pasillos de la escuela, y si alguien lo viera podría jurar que hasta saltaba de lo tranquilo y animado que iba al baño. Es cierto que tenía que recorrer casi media escuela para ir al mismo y realizar su casi nueva rutina de belleza adoptada. Si JungKookie siempre se iba al baño antes de entrar a clases para peinarse y aplicarse uno que otro producto de belleza que su madre le había explicado cómo usar, como el lápiz de labios el delineador de color café claro, la sombra de ojos.

Si lo piensas es un poco absurdo cruzar casi toda la escuela solo para maquillarte pero Jungkook lo prefería así, siempre buscaba los lugares más recónditos para no toparse con cierta pelinegra dueña de sus pesadillas, su novio Tae se había propuesto como voluntario para acompañarlo y que se sintiera más seguro, pero esta era una rutina que hacia él solito y no quería que su novio estuviera presente, más que todo porque lo ponía nervioso que lo viera de manera constante como se aplicaba estos productos, además se había quedado muy animado molestando y jugando con cierto chico de cabellera rubia que recién había regresado a la escuela, así que no lo quería molestar. Por lo que solo tomo a Minki para que Tae no lo botara por accidente, le dio un beso en la mejilla y salió al baño.

Minki es el nombre del huevo que le tocaba cuidar a Taehyung.

Y estaba orgulloso de ser el que le pusiera nombre aquel huevo, Taehyung se lo pregunto y él le propuso aquel nombre que extrañamente la pelinegra acepto para ponerle al proyecto, aunque Jungkook sospechaba que su novio no le comento que él había elegido el nombre del proyecto, lo prefería así para no ganarse más el odio de aquella chica.

Con cuidado, entrando al baño del 5 piso al otro extremo de su salón de clases Jungkook dejo sobre la encimera el huevito metido en el estuche donde guardaba sus cosméticos para tener las manos libres y poder aplicárselo. Tomo en sus manos la barra de lápiz labial comenzó a aplicarse de manera uniforme en sus labios, cuando de pronto.

El sonido de la puerta del baño cerrándose lo distrajo, rogo al universo entero que no fuera la persona que imaginaba la que entraba al baño, por favor no.

Pero sus suplicas no fueron escuchadas.

-Vaya, me sorprende que cada vez más te parezcas a las ratas de alcantarilla que corren de manera apresurada para que no las pise-Dijo Jennie mientras cerraba la puerta del baño y se acercaba al menor que se había quedado petrificado.

-Sigues huyendo de mi rata de alcantarilla-Dijo Jennie mientras le quitaba el lápiz de labios al menor que había puesto menor resistencia- Sabes me sigue extrañando que aun sigas vivo.

La chica comenzó a aplicarse el labial por sus pomposos labios haciendo muecas al espejo para verificar como se veía en él.

-Hablo que ya perdiste a tu papá que te abandono por ser un horrible retrasado y ahora tu mamá se fue también y te dejo abandonado como pobre cucaracha-Dijo Jennie burlándose del menor.

-No-Contesto Jungkook en un susurro mientras bajaba sus rostros y miraba a sus pies por vergüenza y por miedo.

-No.... me vas a decir que no te abandono, entonces dime cuantas veces has hablado con ella desde que se fue, o cuantas veces te ha escrito-Jennie dio en el blanco.

Los ojitos de Kook comenzaron a cristalizarse por las palabras de la pelinegra y es que tenía toda la razón, su mamá no había hablado con él desde que se fue, él había intentado llamarla o mandarle mensajes sin tener respuesta ¿Se olvido del? ¿Es cierto que se alejó para dejarlo solo porque ya se aburrió del?

Kook intentaba no pensar aquello, intentaba ser positivo y dejar aquellos pensamientos lejos de su mente, pero el dolor en su pechito le decía otra cosa, esa constante voz en su cabeza le repetía algo distinto.

Mikrokosmo (Sowoozoo #1)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora