Love to death [Chanlix]

III

_patroncito - le decía Changbin-
mejor vámonos , dónde usted quiere ir

_ Y a dónde se supone que quiero ir yo , bruto - contestaba Chan , de mal humor - si lo que yo quiero es un imposible

_ no es imposible - contestaba changbin - mi tío es el guardián del cementerio , dele su propinita y ya verá , él le dejara hacer toditito lo que usted quiera .

_ Eres un enfermo - contestaba Chan ...

Pero sí , talvez lo mejor era acabar con esta locura de una buena vez . Abrir el nicho y ver la realidad , no la fantasía . Ver ese cadáver pútrido , repleto de gusanos , en lugar de la dulce visión que sus sueños le sugerían .

Por tanto , una noche una vez acordaba la suma y hecho el trato , con el mayor sigilo y cuidado , Cristopher Chan fue introducido en el cementerio .

Esa noche no logró exactamente lo que deseaba . El tío de changbin consintió en su visita , pero no en la profanación de la tumba . Todo lo contrario , aunque amaba el dinero , temía a la ley , y en el día hubiese sido más que evidente la destrucción de aquella lápida . En esa parte del pabellón todos conocían dónde estaba depositado el cuerpo de aquel jovencito australiano . La profanación no hubiese pasado desapercibida .

Seo changbin logró que su tío permitiera esas macabras visitas nocturnas a cambio de una suma generosa . En su lugar de dilapidar su dinero en el puerto , ahora Chan lo gastaba en su visitar a su fúnebre amado , con la que "conversaba" durante largas horas , de los más variados temas . Llevaba , esas veces , botellas de vino , tabaco , opio , un mechero de metal que expedía una llama poderosa , flores , libros , e incluso una vez pudo introducir a un guitarrista para que efectuara una serenata . Changbin y su tío preferían dejarlo hacer y se refugiaban en la choza de este último , que se encontraba en medio del cementerio . Allí bebían y jugaban cartas , a la luz de un lamparín y, de cuando en cuando , changbin salía de aquella choza , recorría el cementerio e inspeccionaba a su patrón . Otras veces , se olvidaba de vigilarlo . Y Chan no parecía necesitar de nada más . Parecía ser feliz con todo ello .

El creía escucharlo , pero no lo veía . En ocasiones , en las madrugadas frías , percibía su silueta en alguna sombra proyectada en una pared . O creía escuchar algo más que el gotear irritable del agua rebalsando un jarrón con rosas . Chan trataba de agudizar sus sentidos , para encontrar en la futilidad de los sucesos cotidianos una "señal."

¡Es tan terrible esperar! Para nosotros , el estar solos en una enorme casa o departamento , totalmente a oscuras , representa algo perturbador . Imaginense entonces el estar casi a la intemperie , en la mayor oscuridad . Uno termina viendo cosas , no necesariamente por que existan , sino por qué uno las quiere ver . Eso deseo de ver se extendió también hacia la vida diurna , hacia la calle y también hacia sus habitaciones . Los cortinajes , mecidos por el viento , traspasados por las sombras y luces de la calle , eran imposibles de soportar . El menor crujido de un mueble o el goteo de algún caño , alimentaba su imaginación . Las sombras de las ramas de los árboles , y los aullidos de los perros callejeros , el staccato de sus propios pasos en el pavimento , el crujir de las maderas o el ruido casi imperceptible cuando caminaba sobre la tierra apisonada , todo ello para Chan era portavoz de alguien , y ese alguien no podía ser otra persona sino el .

Binano•(ㅅ)•