𝐇𝐨𝐥𝐚, 𝐬𝐨𝐲 𝐀𝐲𝐥𝐞𝐞𝐧 𝐲 𝐞𝐬𝐩𝐞𝐫𝐨 𝐪𝐮𝐞 𝐞𝐬𝐭𝐞 𝐟𝐢𝐜 𝐬𝐞𝐚 𝐝𝐞 𝐭𝐮 𝐚𝐠𝐫𝐚𝐝𝐨.
★ Todo es ficción.
★ No acepto adaptaciones.
★ No soy una escritora profesional por lo que puedo tener faltas ortográficas o problemas con la coheren...
Apenas se abrieron las oxidadas puertas del estrecho elevador salí a paso rápido con la mirada fija hacía el sucio suelo de pavimento, no me quería percatar de lo que estaba haciendo Toji en ese momento, me pareció un tipo muy directo y sincero, así que si hacía algo mal él se iba a burlar sin pensarlo ni una milésima de segundo.
Cuando ya veía el cristal de las anchas puertas, levanté mi cabeza y justo cuando iba a abrir, ví esa manija... como decirlo todos los días estaba muy sucia pero ese día a excepción estaba más asquerosa que todos los días.
1- Extremadamente oxidada 2- Demasiados residuos de comida 3- Se veía pegajoso en algunas partes 4- Un chicle en la parte de la cerradura
Abrí mis ojos como platos pero apenas duras ignoré mi asco, acerqué mi mano pero cuando estaba a pocos centímetros fui corrupta por alguien.
No sabía que eras tan delicada, Fushiguro. - dijo Toji con un tono burlón mientras me apartaba y abría la puerta haciéndome paso con una leve reverencia
Puse los ojos en blanco y salí del edificio sin regalarle ninguna mirada o palabra, escuche un suspiro de parte de él mientras agarraba mi brazo y me pegaba hacía Él.
¡¿Pero que mierda haces?! - dije mientras trataba de soltarme desesperadamente un tono molesto y algo avergonzado.
Agh, deja de moverte ¿no ves que se esta cayendo el cielo? - dijo algo incomodo y tratando de que pare de moverme.
Paré inmediatamente y observe la calle... era cierto estaba lloviendo a trozos parecía que se iba a caer el cielo literalmente.
Puedo ir a mi departamento y agarrar un paraguas, no es necesario que un desconocido me llevé. - dije sin emoción alguna
Mierda, deja de hacerte la difícil, ¿no vez que estoy haciendo un favor por primera vez en mi vida? - habló con un tono más elevado de lo común.
¿Por algo será no?, tu comportamiento grosero, explosivo y directo. Ahora suéltame, no quiero que me lleves. - Por adentro me estaba muriendo de ganas que me lleve, quería conocerlo más, ese tipo me parecía muy misterioso; Pero quería que me ruegue, no quería que él me viera como alguien inferior sino como alguien de su status.
