Rubelangel *Trío* en Argentina [One Shot Lemon Hard]

One Shot. Rubelangel *Trío* en Argentina. Lemon.

Bueno, tanto rubelangel por el barrio me hicieron dar ganas de moooaarrr rubelangel. Quede *.* con el directo de clubmediafest donde Rubius y Mangel "jugaban" con su guardaespaldas. Y bueeno, eso me dio ideas! Así que, espero que lo disfruten.

Comenten que les parecio <3 Verán que he cambiado la forma de escribir, más argentina y sucia juejue

Estrellita para moar! ^.^

*CyversiX*

Desde que conocieron al hombre que los escoltaba, "La Masa", les callo bien. El tipo muy buena onda con ellos y los protegió de aquella multitud de desesperados fans al llegar al país. Los chicos estaban asombrados por la pasión de la gente para con ellos, se dieron cuenta que no podrían hacer de la suya libremente, de manera que le preguntan a La masa si podría ser su guarda espaldas personal toda la estadía en el país. El de seguridad accede contento, pues los chicos le caían muy bien, realmente se divertían los tres a lo largo del día, yendo de aquí para allá a entrevistas.

Habían estado tomando fernet por la tarde noche, y estado despiertos por casi 2 días, los chicos ya estaban cansados y querían llegar a su habitación. De camino al hotel, luego de la lucha por entrar a través de sus fans, lograron entrar a salvo.

"Lo hemos logrado" Dice el rubio con un largo suspiro. "Otra vez" Contesta Mangel con una sonrisa cansada pero todavía exaltado del día. "Oye, graciah por todo hoy, ereh una delicia de persona. No quieres subir con nosotros a tomar algo anteh de ir a dormih?" El de seguridad le sonríe ante sus palabras "delicia de persona" que eso se interpretaría de otra forma en su país. El grandote asiente su cabeza y se dirigen al ascensor. En el ascensor los tres miraban a la puerta, Rubius acerca un poco su rostro al de Mangel y mirándose a los ojos, se sonríen.

Entran a la habitación que compartían, con dos camas, baño y una heladera/bar. Rubius se sienta casi recostado en una cama y enciende la televisión mientras Mangel saca de la heladerita 3 latas de cerveza y se las pasa a cada uno.

Charlan un rato largo sobre ellos, introduciéndolo un poco a lo que es el mundo de youtube y esas cosas, luego el Rubius le pregunta sobre su trabajo en la lucha libre. Los chicos entusiasmado cómo el grandote les demostraba movimientos mientras contaba de sus peleas. Rubius les hace jugar como que Mangel es un fan loco por él y hacen como que el grandote lo separa con movimientos extraños, dejándole sin movimiento alguno, riendo todos de la situación en plan juguetones. Rubius se pone frente al de seguridad y le toca sus musculosos brazos, mordiéndose el labio de abajo, lo mira a Mangel "Madre mía". Se remanga su remera, exhibiendo sus bíceps y comparándolos con los del grandote y ríen. Los tres estaban muy cerca uno del otro. Un silencio cargado se sentía. El de seguridad podía ver la mirada embobada del rubio, comiéndolo con la vista, recorriendo su pecho y abdomen, de arriba a bajo. Mientras podía ver una mirada similar en la de Mangel, observándolo al rubio. Ya sabía de lo que esto se trataba, y si no, de todas maneras lo podía intentar, estos chicos eran muy cariñosos entre ellos y para con él, si no era lo que él pensaba, les iba a tener que poner en su lugar.

El grandote toma el resto de su lata y la deja a un costado. Se gira de nuevo frente al rubio, acercándose con un movimiento lento, como el de un gato asechando y lo mira a los ojos, como advirtiéndole... Rubius traga grueso ante la mirada penetrante del grandote y siente como de a poco, éste levanta su remera. El rubio baja su mirada al espacio que había entre sus dos cuerpos, nota que este tipo es enorme, súper dominante, más Mangel a su lado, viendo todo, lo ponía súper cachondo. Levanta sus brazos para que su remera sea removida, y enseguida siente cómo con sus dedos toca sus pezones, rozándolos con sus ásperas yemas, apretando y jalando un poco, haciéndolo gemir en placer. Acerca sus manos al abdomen del grandote, tocando todos sus músculos mientras éste desabrocha su pantalón. Rubius hace lo mismo con los de él y siente que le baja su cabeza a su entrepierna, entendiendo la directa, Rubius se arrodilla frente a él. Con una mano sube la remera, exponiendo su firme abdomen, tocado cada vez más abajo, metiendo su mano dentro de los boxers apretados para sacar fuera la pija enorme del tipo. Rubius lo toca experimental, observándola, mientras pensaba si eso cabría en su boca... y en su culo. El pensamiento lo hace estremecerse y abre la boca bien grande, metiendo la cabeza dentro, chupándola, para luego metérsela más adentro. La resbala afuera para tomar más aire y acomodarse mejor y se la vuelve a meter, deteniéndose en el camino para respirar con todo eso adentro, y luego baja más, metiéndosela bastante dentro. Se atraganta e intenta sacarla fuera, pero el grandote mantenía su mano firme en su cabeza. Mangel los observaba mientras bebía su cerveza. Mientras Rubius le daba una buena mamada al grandote, Mangel deja su vacía lata de lado y se acerca a él, se arrodilla detrás, mientras baja sus pantalones junto con sus boxers. Acomoda las piernas del rubio mas abiertas y le abre el culo con sus manos, masajeándolas y acerca su lengua a su entrada. Pega una larga lamida desde los huevos hasta su espalda baja, para seguir lamiendo la entrada; haciendo pequeños círculos, humedeciendo y relajando el agujero. Se separa y mete un dedo dentro sin mucha dificultad, haciéndole gemir al rubio con la pija en su boca. Mete enseguida otro, los mete y los saca a un ritmo rápido, no teniendo mucha paciencia en ver que sólo le da placer al tipo, si bien lo ponía mucho, le daba un poco de cosa no obtener nada de esto, aunque ya haba acordado con el rubio de esta movida. De manera que tenía que ser él el primero en metérsela por el culo a su chico. El grandote se sienta al borde de la cama, arrastrándolo al rubio con él. Mangel saca sus dedos, agarra una botellita de lubricante de su mesa y se desabrocha su pantalón. Saca su pija afuera, se lubrica, masturbándose un poco mientras se acercaba al culo del rubio. Lo agarra de la cadera y roza su cabeza en la entrada, metiéndola de a poco. Rubius resbala la pija fuera de su boca, se gira para verlo a Mangel y le gime. Mangel relame sus labios ante la vista del rubio con los labios húmedos e hinchados, mientras masturbaba la pija del grandote. No paso mucho tiempo hasta que aquél lo tomo de nuevo por el cabello, y con la otra se agarraba su propia pija para rozarla por los labios del rubio, por sus mejillas, para meterla en su boca bien profundo, la saca y vuelve a refregarle la pija en la boca. El rubio sacaba su lengua fuera mientras se dejaba jugar por aquél. "AHhhh! ahh.." Mangel se la había metido hasta el fondo en un movimiento rápido. Enseguida el rubio es cayado por la pija del gradote. Rubius se sentía flotar, sentía un placer abrumador, siendo cojido por la boca y por el culo a la vez, por un enorme y atractivo hombre y su amado Mangel. Aunque su pija todavía no había sido tocada, podía sentir que caían gotas de presemen de él. Mangel lo cojía fuerte y rápido, y el grandote no se quedaba atrás, forzándolo a que le entre toda esa monstruosa pija -le encantaba. Luego de un rato cojiendolo salvajemente, cambian de posiciones. Mangel resbala su pija fuera y mira al grandote, éste asiente sutilmente y se aleja de la boca del rubio. Rubius se queda mirando al suelo, respirando agitado, siente sus piernas temblar un poco y alza su vista a Mangel, quien se acomodaba frente, donde antes estaba el grandote, y lo ve a éste sacar un preservativo de su bolsillo, para luego ponérselo. Rubius traga grueso, un poco asustado, muerde su labio inferior y siente como Mangel hace apoyar su frente a su pierna, mientras él acaricia su cabello y espalda, relajándolo. "AHHHhhhhh!" grita a todo pulmón -Qué mas da? Si estaban en un hotel. El grandote sólo había metido la cabeza, de a poco la iba metiendo más, dejándolo al rubio acostumbrarse. Aquél respiraba pesadamente, tratando de tomar aire y soltarlo lentamente para relajarse más rápido. Cuando ya estaba todo adentro, a Rubius le caigan gotas de sudor de la cara, y no podía sentir su culo. Mangel lo toma del mentón y lo acerca a su pija, el rubio sin reproches la toma dentro y comienza a succionarlo. Mientras el grandote retiraba su pija afuera, para volverla a meter lentamente, Rubius gruñía mientras le chupaba la pija a Mangel, haciéndolo gemir fuerte al morocho. El grandote va tomando un ritmo cada vez más rápido, mientras acariciaba toda la espalda y el culo del rubio con sus fuertes manos. Una fuerte embestida golpea su próstata con una increíble precisión, haciendo que el rubio resbale la pija fuera, gritando en placer mientras sus piernas temblaban incontrolablemente. Aquél lo vuelve a embestir en el mismo lugar, una y otra vez, no dejándolo al rubio hacer otra cosa más que gritar fuerte en placer, éste sentía cómo las gotas que caían de él ya no eran precisamente presemen, sino como que sentía que eyaculaba varias veces de a poquito con cada embestida, algo que nunca antes había experimentado. Mangel veía como éste tipo lo estaba poniendo a su chico y no eran celos, sino placer, placer de verlo en éxtasis a su chico. Mangel lo toma del mentón de nuevo para verlo con una expresión increíble, sabía que estaba acabando, su ceño fruncido, sus ojos cerrados y de su boca abierta caían hilos de saliva. El grandote lo agarra de las caderas y lo embiste fuerte y rápido, acercándose a su propio orgasmo. Mangel sin querer quedarse atrás, mete su pija en la boca del rubio y lo toma de la nuca, llevándole el ritmo que él quería. Rubius siente que no termina de acabar más y se estremece violentamente, sollozando un poco con la boca llena. Sigue chupándola, haciendo su mejor esfuerzo, queriendo que Mangel llegue al orgasmo también. El grandote llega a su orgasmo con una fuerte embestida que hace que toda la pija de Mangel esté dentro de la boca del rubio, éste se atraganta, presionando su garganta, haciéndole gritar en placer al morocho, quien aprovecha para cojerle la cara mientras el rubio le comía la pija entera sin quejas. Esto hizo que pronto Mangel acabara con un largo gemido, derramando todo su semen en la garganta del rubio. Rubius se aparta para poder respirar, todavía con el cuerpo tembloroso, baja su cadera, sentándose en el suelo, mientras reposaba su rostro en la pierna de Mangel.

"Madre mía, no puedo más" dice el rubio, quien levanta la vista al grandote para luego mirarlo a Mangel, sonriéndose entre ellos. "Gracias chicos, realmente me divierto con ustedes. Ahora los voy a dejar descansar, ah, espero no haberte lastimado mucho Rubius..." El de seguridad dice mientras acomoda sus ropas. "Tranquilo, me ha gustado mucho. Aunque esta será la primera y ultima vez, sabes?" "Si, claro, no quiero pelearme con tu novio, es un buen chico. Bueno, me voy! Descasen, nos veremos mañana". "Adiós, que descanses tu también".

Mangel acaricia la mejilla del rubio, que estaba con los ojos cerrados, totalmente agotado. Lo levanta y lo deja en la cama, apaga el velador y se gira para verle. "Viste que estuvo bueno?" "Yo no dije que no, sólo que no sabría bien que hacer, o si me sentiría celoso, pero el tío se comporto súper bien, ni te ha besado, eso me gusto, supo su lugar" El rubio ríe con las pocas fuerzas que le quedaban y lo besa en los labios. "Gracias Mangel. Yo sólo amo a Mahe, a mi Mahe." "Y yo a ti, descansa ahora." Se vuelven a dar un beso y los chicos durmieron merecidamente, casi un día entero.