Cap. 3 No puedo traicionarla

9 3 1
                                    

Emma-Yo me quede atónita con los ojos muy abiertos, estoy en shock, Ale me mira fijamente y la voz de Rayxa me saca del trance en el que estoy-

Rayxa-Vamos Emma yo me he dado cuenta desde el primer momento

Emma-Yo miro a Alec- ¿Enserio? -Las mejillas de Alec se enrojecen es tan tierno-Esque...tu a mi también me gustas

Alec- ¿De verdad? -Mis mejillas también se ponen rojas, Alec se inclina hacia mí, su boca se acerca a la mía, pero yo lo detengo con mi mano en su pecho-

Emma-No podemos

Alec- ¿Por qué? Tú me gustas y yo te gusto-Se vuelve a acercar, pero lo vuelvo a detener-

Emma-No podemos porque le gustas a Alma

Alec- ¿A Alma? -Asiento- Pero a mí me gustas tu

Emma-Lo siento Alec, pero no puedo traicionarla- El se aleja de mi cabizbajo y unos 3 segundos después sale Alma, menos mal que no ha visto ni oído nada, llego a besar a Alec o Alma se llega a enterar de que me gusta y no sabría que hacer, miro a Rayxa suplicando con la mirada y ella con una sonrisa dulce niega con la cabeza, aclarando que no va a decir nada, le respondo

con otra sonrisa duce, me bebo la tercera cerveza muy rápido para intentar olvidar lo que acaba de pasar y entro al bar para pedir la cuarta, necesito sacarme a Alec de la cabeza. Cuando estoy en la barra esperando a que me atiendan, Alguien me asusta por detrás, es Alec- ¿Qué haces?

Alec-Tranquila solo era una broma, vengo a pedir, como tú-Le sonrío-

Emma- ¿Quieres otra cerveza?

Alec-Si porfavor-Pedimos nuestras bebidas y salimos, Alma sigue mirándome igual de sería creo que sospecha algo, después de unos minutos me siento muy incomoda con la mirada de Alma asique informo-

Emma-Bueno chicos voy al baño, nada más entrar al bar suelto un largo suspiro todo esto es demasiado incomodo, aún lo fue mas cuando llegue a la puerta, estaba a punto de entrar cuando noto unas manos en mi cintura que me dan la vuelta, y sin casi darme cuenta derrepente estaba dentro del baño sentada encima del lavamanos con unos labios pegados a los míos, cuando quise darme cuenta estaba besando a Alec.

Adicta a tiDonde viven las historias. Descúbrelo ahora