Nadie como El

Capitulo 6

--¡AAAAAAAAH!-- Grito Abril para que los policías que no habían terminado de poner la cinta la prestarán atención.

--¿Qué te pasa?-- Grito uno de los polis.

--¡HE PERDIDO MI CHIGUAGAAA!-- Decía Ab fingiendo llorar.

De inmediato los polis se pusieron a buscar al perro invisible, era increíble lo tontos o buenas personas que eran estos policías.

Yo me di mucha prisa, lo lógico sería que me hubiera caído, pero no paso.

Me enderece para que el sensor de las puertas mecánicas me notasen, se abrieron y justo cuando me iba a volver a agachar, lo vi, no, a ✨el✨ no.

Si no a 💔el💔... a Estefan.

Fui dando pasos pequeños mientras miraba casi al techo, el...el...

Estaba colgando.

Tenía una cuerda alrededor de su cuello, y esta se enganchaba a las bigas del techo.

Estaba completamente morado, y su expresión era de dolor, tenia 2 cuchillos clavados en el estómago y uno en el pulmón derecho, se le salían las tripas, el hígado, parte de un pulmón y de los riñones, todo.

Era... repulsivo.

Unos polis intentaban bajarlo, pero sólo consiguieron tocarlo haciendo que partes de sus entrañas se cayeron al blanco y brillante suelo del centro comercial haciendo que se escuchara un estrepitoso ruido.

Hay mismo reaccione, y vomite, en el suelo, con esas imágenes en mi cabeza tan parecidas a las de ayer.

Detrás de mi, estaba Abril vomitando de igual manera. En ese momento para mi, todo fue a cámara lenta.

Un policía que si que conocíamos nos vio y fue a sacarnos corriendo, los 6 o 7 polis de fuera entraron, alarmados, Abril solo lloraba y a veces se quedaba quieta para poder vomitar.

Yo.. Yo no sabia como reaccionar.

Uno de mis mejores amigos estaba colgando mientras se desangraba en el techo del centro comercial, ayer no fue conmigo al cine por qué se suicidó... ¿Pero, por qué?

Ya mi amiga y yo estábamos subidas en el coche del policía, ella con las manos en la cabeza y las piernas subidas en el asiento, mientras yo miraba por la ventana. Pero no veía lo de la calle solo me pasaban por la cabeza imágenes con Estefan, las veces que fui a hacer un maratón a su casa de Harry Potter, las veces que nos metimos en líos, o cuando dos señores nos persiguieron toda una manzana porque le tiramos huevos a su ventana por no querernos darnos chuches en Halloween. Esas veces que me abrazaba a el cuando íbamos a ver una peli de miedo en el cine, las miradas que me dedicaba cuando metía un gol en el fútbol...

—Emily...-- escuche en un susurro, era Abril que señalaba a mi casa, yo solo le dije adiós y salí del coche tan rápido como pude para encerrarme en mi habitación.

No sabía que hacer no sabía cómo reaccionar y estaba ahí de pie mirando la cama donde Estefan y yo nos reíamos o saltábamos mientras bailábamos o jugábamos.

Empezaron a correrme un montón de lágrimas por la cara.

Me cabreé.

Era tan injusto que eso le pasará, o que el hiciera eso, pero ¿porque? ¿Porque tenía que hacerse eso?

Me acerqué a la la lampara de la mesa de noche, fue un regalo de la psicóloga de mi madre, era muy bonita, era de estas típicas viejas, beis, pero con frases motivadoras y consoladoras.

"La mejor forma de predecir el futuro es creandolo"

"Se la mejor versión de ti mismo"

"Siempre da lo mejor de ti y lo mejor vendrá"