Perfecto

Prólogo

Era tarde y caminaba distraída por el parque lineal, mis amigas iban mucho por delante de mi platicando del servicio hoy, teníamos que ir a por las compras de la semana al súper así que habíamos decidido ir apenas saliéramos del hospital.

Me seguí enfocando en escuchar a Harry Styles cantando Golden mientras ellas platicaban por delante, hasta que ellas me hablaron y tuve que correr para alcanzarlas, pero en medio de esto pase a traer a un chico o quizá él a mí por el hecho de que solo yo caí.

Cosas que siempre pasan por ser distraída:
Caerte
Chocar con la gente
Que se te caiga el celular
Chocar con la gente ¿Ya lo había dicho? Pues es más seguido de lo que parece.

El chico en cuestión me ayudó a levantarme y juro que me embobe al verle bien. Alto, piel blanca, por su camisa pude notar que es alguien a quien le gusta ejercitarse, cabello castaño y ruloso, y lo que más me llamo la atención, sus ojos, unos bellos ojos color almendra.

-Vaya, ¿estás bien? Ese debió ser un gran golpe -dijo con voz gruesa, y ahí me perdí, él no debe ser de este mundo, tanta perfección no puede existir junta.

-No te preocupes, estoy bien, ¿Tu estás bien? Lo lamento mucho, venía distraída y mis amigas... Mierda, mis amigas, he chicas espérenme -y así salí corriendo del precioso chico que quizá nunca en mi vida vuelva a ver.

Llegué casi a la esquina del camino y ahí me esperaban Beth y Sam. Les conté del chico con el que acaba de chocar y no me lo podían creer, la verdad es que si no me hubiera pasado a mi ni siquiera lo creería. Íbamos a seguir el camino y cruzar la calle cuando escuché un claxon sonar y...

Ring, ring, ring. Sonó mi alarma. Estúpido sueño realista, maldije a mis adentros. Había vuelto a soñar con él en esta semana por cuarta vez. Lo rara de mi sueño es que yo realmente no conozco a nadie con la descripción del chico como para que mi mente lo creará basado en una persona, simplemente apareció.

Desactive la alarma de mi celular y a duras penas me levanté de la cama. Me pare al baño para iniciar mi día y alistarme para el hospital. Hacía apenas dos meses que me había mudado acá con dos amigas porque estaríamos un año en el servicio social, era divertido tener compañía y ser un equipo también en el hospital.

Me bañé y cambie mi ropa interior, cepille mi cabello corto y eche un poco de crema corporal y desodorante. Tomé el uniforme blanco planchado en la percha y un par de tines para vestirme e ir con mis amigas al hospital, una vez lista salí de mi habitación y camine hasta la cocina a prepararme un café.

Sin café no sería un día bueno en el servicio así que la mejor forma de iniciar el día es tomando mi taza del día. Prepare el café cargado para no tener problemas de sueño y tome una pieza de pan de la bolsa para desayunar en lo que Sam y Beth estaban listas. Termine rápido de desayunar y ellas estaban listas, ellas tenían su rutina al revés de la mía, primero desayunar y después arreglarse. Salimos con nuestros respectivos bolsos y llaves del departamento y nos encaminamos al hospital que estaba a 5 cuadras de nuestro lugar.

-Volví a soñar con él -dije para callar el silencio (¿me entendieron? Callar el silencio, ja, ya bueno Arleth, basta de divagar)

-¿De nuevo? -dijo Beth.

-Esta es la ¿qué? ¿cuarta vez en la semana? No jodas -dijo Sam.

-Es en serio chicas, volvió a aparecer en mis sueños, esta vez íbamos en el parque lineal al centro, y chocabamos...

Ellas solo se encogieron de hombros y dimos por terminado el tema. Si bien era cierto que no era la primera vez que lo soñaba podía ser solo una casualidad el soñarlo. Joder, pero es que también podía ser que lo conoceré en un futuro como Octubre a Kyros*, o algo así. ¿Qué tal y si soy mitad bruja y estoy viendo mi futuro? Basta Arleth, divagas demasiado.

Llegamos rápido al hospital y nos dirigimos al checador para huellar nuestra entrada. Hoy iría nuevamente a urgencias y mis amigas a sus servicios respectivos en Alojamiento y Preventiva. ¿Qué no he dicho a qué voy al hospital? Ja, bueno, que distraída andamos hoy, soy Pasante de Enfermería, la pasantía es necesaria para la liberación de la Universidad y poder tener título y cédula y ejercer como tal la profesión de enfermería.

Soy una chica muy distraída, me gusta mucho estar activa porque sino me duermo, siempre estoy hablando o en su defecto pensando así que no se preocupen si se marean, es difícil hasta para mí seguirme el hilo en mis chocoaventuras. Soy una pitufina (mido 1,56, soy muy enana, he ahí porque hasta yo me burló de mí), tengo mi cabello corto como las enfermeras lo traen, soy una tabla y ahora ya les ahorre la explicación de mi aspecto, lo que creo que llama más la atención de mi aspecto son mis ojos, grandes, redondos y oscuros, y muy bizcosos*, osea mi estrabismo ayuda a que los pueda mover de lado a lado y hacer reír a los bebés con mi defecto.

Me presenté con la enfermera Laura y comencé mi día presentándome con los pacientes y tomando sus signos, y ahí se fue un día normal en mi servicio...

O eso fue hasta que llegó el Doctor Hernández al servicio con los que serían los nuevos Internos en el hospital.

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Hasta aquí dejo el prólogo, espero que sea de su agrado

*Personajes de Sideral, de Somniara (disponible en Wattpad)

Bizco: [mirada, ojo] Que está desviado de la dirección normal.