uno

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Era un día como cualquier otro, el cielo de un color azul claro, el aire era cálido y el clima no era ni tan caliente ni tan frío.

Ahí estaba Jisung abriendo la puerta color blanca de su dulce casa encontrándose con las casas vecinas,ese lindo jardín que tenía en el patio delantero de su hogar,las flores color amarillas,blancas y rosas que transmitían una fragancia dulce junto con tranquilidad.

El chico bajó la mirada encontrándose una carta color café claro con un ramito de flores violetas pegado a él sobre arriba del tapete frente a su puerta.

Se inclinó para tomar entre sus manos aquel detalle que ha estado recibiendo a diario desde hace 3 años aproximadamente,le da mucha curiosidad saber quién es la persona que hace tal cosa solo para él y eso lo hace sentir tan especial pero a la vez su cuerpo se llenaba de miedo de solo pensar que su esposo podría enterarse sobre esto.

Jisung le tenía tanto miedo a su esposo,al carácter y a la forma de hablar de éste pero no podía separarse de él pues a pesar de todo lo amaba como a nadie en este mundo,era el amor de su vida.

El chico se adentró a su hogar yendo hacia la sala para sentarse en uno de los sofás dejando la carta junto al pequeño ramo al lado,se levantó y fue rápidamente a la habitación que compartía con su pareja,se agachó para sacar una caja de madera que tenía escondida debajo de la cama,la tomó entre sus manos y regresó a la sala colocándola sobre la mesa de centro, agarró la carta dándole vuelta y al final abrirla para encontrarse con una hoja del mismo color que el sobre y con puños de letras las cuales le hacían sentir muy bien que además le regresaron la felicidad que no tenía hace tiempo (desde que se casó para ser exactos) recargó su espalda en el respaldo del sofá,cruzó sus piernas y se dispuso a leer aquellas palabras

~ La vida tiene cosas mágicas,los atardeceres,el cielo,el mar,la música y algunas personas... cómo tú, personas que le entregan felicidad al mundo con tan solo existir y tú le entregas mucha felicidad a mi vida~

Sus mejillas se tornaron de un color carmesí al leer aquellas lindas palabras escritas en ese papel,sonrío y dió un beso a la carta para después volver a ponerla en el sobre, abrió la pequeña caja de madera dejando ver todas las cartas que ha recibido durante estos años, tomó con delicadeza esa nueva carta, la puso dentro de la caja para luego cerrarla y llevarla a donde siempre la escondía,debajo de la cama.

Limpió el polvo de su ropa dirigiéndose a la cocina para preparar el almuerzo pues su esposo estaba por salir de su trabajo y tenía que tener todo listo para cuando este llegue. Al terminar de preparar la comida la guardó en el refrigerador y se fué a tomar un baño para relajarse, llenó la tina con agua tibia,hecho unos cuantos pétalos de rosa y burbujas,fue por su ropa dejándola en el mueble para después comenzar a quitar su ropa quedando completamente desnudo,se acercó a la tina adentrando se en ella sintiendo un escalofríos recorrer su cuerpo, entró por completo al agua y se relajó cerrando sus ojos.

Ramito de violetasDonde viven las historias. Descúbrelo ahora