MUNDO DE DOLOR

CAPITULO I

                                 "MI DOLOR"
 
Los latidos de mi corazón hacen eco por toda mi cabeza, es como si sintiera que en algún momento este va a salir disparado, me paro unos segundo para poder respirar,
*de verdad necesito ponerme en forma, aunque es comprensible el hecho de que si corro como lo estoy haciendo ahora, termine sin aire; no he dejado de comer en todos estos últimos meses, y no me refiero a comida saludable sino de la bendita comida basura.
Supongo que mi ansiedad no ayuda con el deseo de comerme todo lo que encuentro a mi paso. Esto es deprimente de verdad.
Sintiéndome un poco mejor, empiezo a correr nuevamente, sin darme cuenta las lágrimas han empezado a salir y caen pesadas por mis mejillas..

—¡carajo! Corre Laura, corre!— me motivo a mi misma para llegar antes de que sea demasiado tarde.
*¿Por qué justo ahora tenía que ir a jugar?. Por fin llego, mis ojos se posan en esas puertas transparentes y una fría tristeza se apodera de mi, mientras leo esa maldita palabra, que me pone aún más nerviosa de lo que estoy.. "EMERGENCIAS"

—Laura— la voz de mi madre se quiebra, mientras corre hacia mi para abrazarme y hundir todos esos gritos desesperados en mi cuello y darme uno de esos abrazos que te dejan sin aire, eso me molesta pero no le digo nada, ¿Cómo podría?, Está destrozada, al ver a mi madre así, se me hace un nudo en la garganta....
Encontrando mi voz, le pregunto:

—¿Donde está?—
Ella no puede hablar pero con una mano señala una puerta con el número 03 sobre una placa dorada...

Me apresuro a entrar con la esperanza de verlo ahí sentado sobre la camilla jugueteando con alguna revista. Pero no, mi visión se posa directamente en aquella expresión en la cara de los doctores.....
Una sábana blanca cubre toda la cama y hay una persona bajo ella, solo indica una cosa "murió"...

Sin poder respirar caigo de rodillas al piso, sintiendo punzadas correr a través de mis muslos, pero eso ni se compara al inmenso dolor que estoy sintiendo por dentro, mi corazón no aguanta más y es ahí donde empiezo a gritar y correr hacia la camilla, tiro la sábana y veo su carita, sus ojos cerrados como si solo durmiera; tomo su mano y está fría.
No, no, no llegue tarde.... Maldita sea, no llegue a tiempo, mi abuelo era una de las personas más importantes para mí,¿Cómo pude dejarlo solo? Solo quiero quedarme ahí, a su lado no soltarlo nunca....
Siento las manos de mi madre, sujetarme por ambos brazos hasta sacarme de esa habitación y lucho por quedarme ahí, porque se lo prometí aquella noche de luna nueva..

°°°
—Laura — el recuerdo invade mi mente de inmediato. La voz de mi abuelo era dulce, pero llena de sabiduría. — deja de llorar, estaré bien. Pase lo que pase, siempre estaré para ti, cuando me necesites, cuando te sientas sola, cuando todo se derrumbe, solo mira la luna, porque te enseñe a amarla; y sabrás que yo estaré ahí, a tu lado escuchandote cuando más lo necesites, cuando sientas que ya no puedes más, cuando te sientas rota por dentro solo búscame bajo la luna.—

—Te lo prometo abuelo, estaré contigo siempre... Aún no es tiempo de dejarme sola—

Abuelo, fuiste mi mundo de alegría, de refugio, de esperanza y ahora eres mi mundo de "dolor"....
°°°

Algo suena a mi alrededor, abro los ojos con mucho esfuerzo..... ¿Qué me pasó? ¿Me desmayé?, no puedo creer que me desmayé, siento vergüenza y un dolor oprimiendo mi pecho.
Estoy en una habitación blanca.. tan blanca que me duelen los ojos al mirar, tiene sábanas en un armario pequeño junto a una pared, las grandes ventanas dejan entrar el sol de la mañana; claro estoy en el hospital, pase la noche acá.....

—Al fin has despertado— me doy la vuelta muy rápido para ver quién habló y mi cabeza da un mareo que casi me desplomo al suelo...

—Si te vuelves a desmayar me iré y te dejare acá sola, entiendes?— La persona que habló era un joven alto, buenísimo de hecho, le quedaba chico la palabra guapo, era un ángel en pocas palabras, su cuerpo muy definido, ¡carajo! estaba muy bueno, tenía un ojos negros muy hermosos, con sus grandes pestañas rizadas decorando, su tez blanca muy apetecible y contrastaba con sus bellos labios rojos, su cabello negro cayendo delicadamente por su frente, unos brazos de infarto. ¿Cómo se sentirá un abrazo suyo?.. ¡concéntrate Laura!