Recuerdame

Capitulo 1

     Hospital de Seoul - situado en la época después de la guerra

Gaeul: ¿Qué le ha pasado? ¡Díme que le ha pasado a mi nampyeon! ¡¿Por qué no contestas?!

Woobin: Gaeul, fuimos emboscados; y ya sabes cómo es Yi Jeon de sobreprotector en nuestro grupo tenemos asignados dos novatos, que pese a que tienen un futuro prometedor, aún están verdes...

Gaeul: ¿Y cómo es que en una expedición peligrosa había, no uno, sino dos novatos?- Soltó interrumpiéndole.

Woobin: Porque no era peligrosa; era una expedición de reconocimiento del terreno como te comentaba hace un momento el Sr. Yong, nuestro Jefe los mando ahí pero no sabíamos que tendríamos problemas... uno de los novatos está siendo acorralado, en eso Yi Jeon se interpuso...bueno para salvarle la vida, quedó inconsciente estuve con él hasta que me convocaron de urgencia para explicar lo sucedido, aún no ha despertado, los médicos se mostraron preocupados, pero no creen que peligre su vida.- Dijo, entonces apareció el médico.

Doctor Jihoo: Voy a serles franco, Sra. Chu, su marido, está en coma... afecto directo a la zona de la consciencia del cerebro es casi milagroso que siga vivo, lo que intento decirle, Señora es que al ser esta zona de la consciencia, puede ser que cuando despierte, si llega a hacerlo, tal vez no sea el mismo.

Woobin: ¿A qué se refiere?- Preguntó.

Jihoo: A que puede que no despierte y si lo hace tal vez no distinga la realidad de sus sueños, o que no recuerde partes de su vida pasada o presente o incluso puede que tenga alucinaciones siento no poder ser más optimista, pero deben ser conscientes de la realidad.

Tanto Gaeul como Woobin quedaron callados interiorizando la noticia que acababan de recibir; ella apretó los puños y la mandíbula y se atrevió a preguntar:

Gaeul: ¿Puedo ver ya a mi marido, Doctor?

Jihoo: Por supuesto, pasen, pero tengan cuidado, el estado del Sr. So sigue siendo muy delicado.- Con un gesto de saludo, el medico se marchó.

Ella inspiró con fuerza y entró en la habitación... y deseó no haberlo hecho la imagen de su esposo lleno de tubos, donde suponía que habría algún tipo de ungüento para el impacto del maleficio, lo paralizó se veía tan frágil que estuvo a punto de echarse a llorar ahí mismo, miró hacia el techo, como buscando valor, acabó de cruzar la puerta y la cerró tras de sí. Se acercó lentamente a la cama, cogió una mano del pelinegro entre las suyas sintiendo la tibieza del muchacho, se llevó la mano a los labios y le dio un suave beso.

Gaeul: Eres un idiota, Oppa.- Hablaba con la voz quebrada.- ¿Cómo se te ocurre hacerte el héroe? ¿Acaso no tuviste suficiente en la guerra? Tenías que salvar a esos novatos ¿Verdad? Porque claro, por que pensar en tus hijos no te importo, en lo que iban a sufrir sin el consentidor de su padre o en mí, en lo sola que me iba a quedar, que te llevo a pensar en todo el mundo antes que en ti mismo ¿Qué se supone que voy hacer sin ti si no despiertas?

Gaeul se sentó en el borde de la cama mientras le acariciaba el flequillo con una mano, con la otra seguía sujetando la mano de su esposo.

Gaeul: Por favor, Yi Jeon tienes que despertarte ¿Quieres acaso perderte como crece la pequeña Eun so? ¿O como nuestro Kim Bum aprende a jugar al fútbol como le vas a enseñar?... ¿Y no eras tú el que quería que tuviésemos otro bebé? Pues tienes que despertarte, porque yo sola no puedo.

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Pese a los cuidados de la madre de Yi Jeon, Gaeul y los médicos, el estado de Yi Jeon continuó igual durante la semana entera, en los que su esposa no se movió de la habitación de su marido, donde estaba todo su familia, amigos y la mitad de sus compañeros de curso de Shin Hwa, después de unos días.

Yin Jeon comenzó a dar signos de cambio; empezó a moverse en sueños, apretó su mano con la de su esposa y dio la sensación de que recuperaba la consciencia. Finalmente, cuando la familia de Yi Jeon se había marchado a cenar y solo quedaba Gaeul en la habitación, fue ahí cuando el pelinegro abrió los ojos.

Yi Jeon: ¿Gaeul?.- Su voz sonaba rasgada y con un tono extrañado su esposa al escuchar la voz levantó la cabeza y al comprobar que había despertado salió corriendo a llamar a los médicos.

Cuando volvió a entrar a la habitación fue directo a la cama diciendo: 

Gaeul: Me has dado un susto de muerte, Oppa.- Se sentó en el borde y acercó su mano derecha a la cara para acariciarle, pero cuando su mano estaba a punto de tocar la cara de su amado, este lo atrapó por la muñeca.

Yi Jeon: ¿Pero, Qué...?

Fue ahí donde su familia y los doctores entraron para ver a Yi Jeon.

Continuara...