Arrogante

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Yo: ¡lo siento! –Dije mientras tomaba una servilleta y lo limpiaba- fue de casua… –no termine de hablar-

Alce mi rostro y mire a sus ojos, a pesar de llevar unas gafas de sol, se podían notar aquellos ojos rasgados.

Mi cabeza dolía y pasaban aquellas imágenes de mi infancia; no estaba segura si era el, pero al notar que su pecho latía fuertemente, pruebas no me faltaban.


Yo: fue de casualidad –dije seria- debo irme –susurre-

No lo pensé dos veces y salí corriendo de la cafetería, pero mi miedo aumento cuando senti que el chico corría tras de mi…

Chico: ¡ESPERA! ¡ESPERA! ¡ESPERA CHIQUITA!

Al escuchar aquella palabra pare en seco, -¿chiquita?-

Yo llevaba mucha ventaja, pues él aún seguía corriendo para tratar de alcanzarme; el dolor de cabeza era más fuerte, así que pare un taxi y fui donde Yun unnie. Por suerte ella no tenía ninguna cita en ese momento, así que podía contarle todo lo que paso.


-Narra Kevin-

Chica: ¡lo siento! –Dijo mientras tomaba una servilleta y limpiaba suavemente mi rostro- fue de casua… –elle alzo su rostro y nuestras miradas hicieron contacto; aquellos ojos color miel hacían que mi corazón latiera con fuerza y un dolor de cabeza me hiciera recordar aquel hermoso momento que pase en la infancia-


-Flashback-

Mi madre había ido a hacer las compras de la semana, así que fui a pasear al parque; al llegar el parque estaba prácticamente vacío, no había niños y los adultos no cruzaban el parque. Camine a la zona de juegos y note a una niña, era muy distinta a las chicas de aquí, era alta y tenía un rostro hermoso, era una chiquita que con verla ya sientes admiración hacia ella.

Yo: Hola –dije acercándome lentamente- ¿cómo te llamas?

Chiquita: Hola –dijo sonriendo, pero analizando delicadamente mi aspecto- soy Nicole  y tú, ¿cómo te llamas?

Yo: me llamo Woo Sung Hyun –dije deletreando cada silaba para que ella entendiera- pero dime Kevin –sonreí, ella hablaba muy gracioso, quería saber su edad- ¡ahh! tengo 11 años –vi que se asombró un poco, no quería asustarla- tu, chiquita, ¿cuántos años tienes? – Ella se quedó callada un momento, así que sonreí para que confiara en mí-

Niko: tengo 5 años –dijo mostrándome sus 5 dedos, yo reí-  tú no eres de aquí, ¿verdad?

Yo: -sonreí, sabía que se refería por mis ojos- Soy de aquí –dije sonriendo- pero mi mamá es coreana –ella me miraba muy atenta- ¿tú eres de aquí?  ¿De San Francisco?

No soy su noona I - IIDonde viven las historias. Descúbrelo ahora