𝐖𝐀𝐍𝐍𝐀 𝐁𝐄 𝐘𝐎𝐔𝐑𝐒 ┊ ❛ tal vez solo quiero ser tuya. ❜
en la que una chica que siempre tuvo esa voz dentro de su cabeza, que le decía que no merecía el amor y la amistad, conoce a cierto pelirrojo. y poco sabía que su vida iba a cambiar por...
wanna be yours capítulo veintidós | a través del fuego
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...
TODOS LOS ESTUDIANTES del Gran Comedor los estaban observando. Varios examinadores se acercaron a Harry, que finalmente recuperó la concentración.—No voy a ir. . . No necesito el ala del hospital... no quiero...—
—¡Debes ir a descansar al hospital!—dijo un examinador, tratando de sacar a Harry de su asiento.
—Estoy bien, señor—,balbuceó Harry.—Sólo me quedé dormido... tuve una pesadilla—.
Cylia lo observó atentamente, tratando de averiguar qué había pasado. Ya no podía concentrarse en su examen.
—¡La presión de los exámenes!—,dijo un viejo mago con simpatía.—Suele pasar, joven, quizás un trago de agua refrescante. Si ya terminaste con tu examen, debes ir a descansar—.
— Ya terminé, sí. . . ya terminé. . . Lo haré. . .—
Ella miró a Harry mientras lo empujaban fuera del Gran Comedor. Pero antes de que se fuera le dirigió una mirada, ella sabía que algo iba mal, pero no sabía qué era. Si al menos fueran Ron o Hermione los que estuvieran en su lugar ahora mismo.
Una vez que los alumnos tuvieron permiso para salir del salón, Cylia se abrió paso entre los estudiantes tratando de encontrar a sus otros dos amigos.
—¡Cylia!—,dijo enseguida Hermione, con cara de susto.—¿Qué pasó? ¿Dónde está?—
—Ha vuelto a tener una visión, creo—,respondió Cylia frenéticamente.
— ¿A dónde fue?—preguntó Ron.
—No lo sé, creo que al despacho de McGonagall—.
—Claro que no, la profesora McGonagall no está en Hogwarts. Oí que se quedó paralizada y ahora está en San Mungo—,dijo Hermione.
—¡Qué!—gritaron Cylia y Ron al mismo tiempo.
Los tres corrieron por el pasillo de entrada, abriéndose paso entre los estudiantes, sin prestar atención a sus airadas protestas. Finalmente encontraron a Harry corriendo por la escalera de mármol.
—¡Harry!—,dijo Hermione frenéticamente.—¿Qué pasó? ¿Estás enfermo? ¿Qué has visto?—
—¿Dónde has estado?—,preguntó Ron.
—Venga conmigo—,dijo Harry rápidamente.—Vamos, tengo que contarles algo—.
Harry los llevó a un aula vacía, cerrando la puerta de golpe en cuanto estuvieron todos dentro. Se apoyó en ella, mirando a los tres.
