NOMUNATRIX [NomuDeku]

NOMUNATRIX

La emboscada a la guarida de Nomus es un éxito.

La morada solo cuenta con cinco supervisores humanos para vigilar y estudiar a las criaturas humanoides. Cuando Deku y su equipo arremeten en el lugar, el número se vuelve cero con rapidez al incapacitar a todos. No obstante, existe un asunto que los toma por sorpresa.

A diferencia del resto de Nomus, que todavía están en espera de instrucciones y que no llegan a defenderse, se encuentran con una criatura que sí opone resistencia a ser inmovilizado, aunque no lo hace por mucho tiempo. Deku llega para ver el fin de su oposición bajo las manos del par de héroes que lo encontraron. Y es extraño, por decir lo menos, ya que reconoce a este Nomu a pesar de todos los años transcurridos entre el ataque a U.S.J y este mismo día, siendo ya un pro-héroe.

El Nomu sigue sin parecer dócil.

—¿Qué demonios? —Kacchan dice, asomándose a la habitación que resguarda a la criatura tras sus puertas—. ¿Esta mierda se ocultó aquí todo este tiempo?

—Así parece.

Deku siente una punzada de aprensión cuando nota que el Nomu no le quita los ojos de encima, ya de rodillas en el suelo y con las manos sujetas a su espalda. Está inesperadamente tranquilo, vigilante incluso, a diferencia de hace solo un instante.

No baja la guardia.

—Dynamight... o cualquiera de ustedes —dice para todos en el lugar, siguiendo a su instinto—, ¿tienen un bozal al alcance?

Al parecer no es así, ya que escucha a Kacchan gritar que traigan uno en el pasillo detrás de él, pero Deku en ningún momento deja de concentrarse en el monstruo, cuya atención tan determinada en su propia persona comienza a volverse intrigante. En su tiempo, se enteró de la huída de este Nomu de la prisión junto a otros cientos de villanos, pero no supo de su paradero hasta este momento, aquí, en una instalación dedicada a la vigilancia y perfeccionamiento de Nomus.

De pronto, se ve inundado de dudas. ¿Sería posible que esta criatura ya tuviera capacidad de hablar?, ¿de razonar más allá de recibir simples instrucciones, como hizo hace tantos años? ¿De sentir algo más que la ira, un deseo de mutilar o aniquilar a quien fuera su objetivo? No lo sabe, pero el nivel de atención que le está confiriendo, sin querer huir del lugar o de soltarse de sus amarres, es algo desconcertante. Aún así, ninguna duda se resuelve con sólo pensar en ella.

—¿Creen que pueda comunicarse con nosotros? —Deku deja la pregunta en el aire, mientras por fin recibe el bozal de un oficial que aparece con Kacchan.

—Así que crees que algo cambió mientras estuvo aquí —comenta este, siempre en conexión con sus pensamientos, ahora que trabajan como un dúo.

Deku le asiente, por lo que su compañero se dirige al Nomu sin otro pensamiento, con una que otra pregunta de rutina, pero no recibe ninguna respuesta más allá de una mirada de reojo. Kacchan frunce el ceño y bufa.

—Parece un poco más atento que antes, aunque sigue siendo una mierda espeluznante.

Deku no puede estar más de acuerdo a pesar de seguir intrigado. El oficial aleatorio que se ha mantenido en silencio, les informa que no están preparados para manejar esta sorpresa. Tardarán un poco más de tiempo en traer lo necesario para el traslado de este Nomu, ya que es más grande y mucho más fuerte que el resto. Por supuesto, Kacchan está furioso por la falta de previsión. Por su parte, los héroes que no hubieran logrado aprehender al Nomu de no haber aparecido Deku, comienzan a temblar junto al monstruo ante la perspectiva de quedarse más tiempo, -ya fuera junto al Nomu que casi se les escapa o bajo la mirada de su compañero-.

Entonces, la siguiente decisión llega a él con rapidez y resignación.

—Yo lo vigilaré, pueden ir a preparar todo allá afuera.