1. Luna llena

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Base de la garra negra
Ubicación: desconocida

- Los Renard Burkhardt son una familia de sucios mestizos, absolutamente todos ellos son hijos de lo prohibido.

Un hombre de vestimenta formal hablaba mientras caminaba en el gran escenario, todos lo escuchaban atentamente y no perdían de vista la pantalla con fotos de los mencionados.

- Empezando por el patriarca, Sean Renard, hijo de una Hexenbiest y un maldito humano, luego tenemos a Nick Burkhardt, su esposo y un asqueroso grimm.

Las imágenes cambiaban conforme los iba nombrando.

- los hijos mayores Kelly y Alexander dos Grimm como sus padres biológicos.

- Luego está Stiles Renard Burkhardt, el es verdaderamente valioso, hijo de un grimm y una bruja, eso lo hace realmente poderoso... Y peligroso para los nuestros.

- Después están los famosos trillizos,hijos de la fallecida Anna Valerious y de un hombre lobo, Marcus y Jughead son licántropos igual que su padre mientras que Elizabeth es una bruja, muy parecida a Anna, esperemos que no acabe como su madre - agregó con falsa tristeza.

- y por último la bella Diana, hija biológica de Sean, fruto de su primer matrimonio ella es la primer híbrido entre Hexenbiest y humano, 3/4 Hexenbiest, 1/4 humano... Simplemente fascinante.

- Como podrán ver ellos representan una amenaza para los wesen, su sangre está mezclada con la de aquellos que nos han escondido y esclavizados durante miles y miles de años, por eso hermanos míos los invito a qué encuentren a todos los integrantes de está familia, ya los separamos por lo que atraparlos será sencillo- volteo hacia la multitud que se encontraba impaciente por sus ordenes- Pueden hacerles lo que quieran pero de Stiles me encargo yo.
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Desde hace días tenía una sensación molesta, sentía que algo lo quemaba desde adentro y no lo dejaba en paz.

Habían pasado dos meses desde aquel ataque a su familia y cada vez se convencía más de que ninguno a parte de ellos había logrado escapar y aunque eso lo destrozaba debía mantenerse fuerte, las amenazas no iban a desaparecer y no era fácil ocultarle un hombre lobo a una manadas de hombres lobo.

- Stiles, estaré bien ya hemos hecho esto muchas veces - Jughead intentaba tranquilizarlo.

- Esas veces estaba toda nuestra familia y no teníamos que ocultarte de una manada entera.

El más joven se acercó al mayor para abrazarlo en un intento de reconfortarlo.

Esa noche habría luna llena y eso pondrá al límite los poderes del hombre lobo que a pesar de que era uno de nacimiento y por ende conocía bien a su lobo, en caso de perder el control podría desconocer a los suyos.

- La cerradura está lista ¿Trajiste todo? - pregunta serio

- Si Sti - se burla de su hermano mayor antes de agarrar sus manos - ¿Tienes las balas de plata?

El rostro de Stiles se contrae y aprieta las manos de su hermano, esperaba nunca utilizar esas malditas balas.

- No son necesarias - respondió

- Si pierdo el control...

- Jughead Renard Burkhart no voy a utilizar esas cosas en ti porque no vas a perder nada - sentenció antes de caminar hacia la puerta - Nos vemos al amanecer, voy a estar vigilando los alrededores.

El menor soltó un suspiro al escuchar los pasos de su hermano alejarse. Stiles tenía razón antes estaba su familia cuando llegaba la luna llena, con Marcus se pasaba el tiempo mientras Elizabeth esperaba al otro lado de la puerta, se preguntaba si ellos también estarían bien está noche.

A todos les esperaba una noche muy larga.
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- No Scott, estoy bien solo estamos un poco cansados fue unas semana dura.

- Vamos amigo no se la pueden pasar encerrados además se va a juntar toda la manada - respondió su amigo a través de la llamada - Incluso va a estar Derek

Stiles no pudo evitar sonrojarse ante la mención del moreno, era cierto que sentía atracción hacia el pero aún así era su hermano el que lo necesitaba esa noche.

- otro día será ahora estoy un poco cansado, no veremos luego - escucho a su amigo despedirse y colgó la llamada.

Suspiro cansado pensando en que está era la primera vez que iba a hacer esto solo, camino hasta la puerta del sótano. Tomo su ballesta y se sentó frente a la puerta, por lo general cuando era luna llena toda su familia se la pasaba en el pasillo esperando a que todo pasara, ahora era el quién tenía que esperar.
Empezó a repasar todo mentalmente, se aseguro de que los hechizos de silencio estuvieran puestos junto con todas las protecciones, no podía cometer ningún error cuando tenía una manada de hombres lobo cerca, si descubrían al licántropo no sabía podrían reaccionar.

Miro su reloj, era el momento, la luna estaría en su punto más alto y comenzaría la transformación. Justo como lo predijo pudo escuchar el ruido provenir desde el interior, los gritos de dolor de su hermano y como la piel se desprendía, una transformación involuntaria era mil veces peor que las otras.
Se empezaron a escuchar los golpes del lobo por toda la habitación, los aullidos aturden sus oídos mientras hacían retumbar los cuadros en la pared.

Por un momento el ruido se hizo insoportable hasta que todo quedó en silencio. El pánico invadió su cuerpo, rápidamente se levantó con la ballesta y fue por las llaves de los seguros.
Ahora maldecía el tener que poner tantos, sus manos temblaban mientras los iba desbloqueando, para cuando termino con el último empujó la puerta con todas sus fuerzas, sintió como se helaba su sangre mientras el terror invadía su cuerpo.

Todo en la habitación estaba destrozado, incluida las puertas de metal dan al exterior.

- oh mierda...- susurro al darse cuenta que su hermano había escapado.

Tenida que darse prisa, debía encontrarlo antes de que la manada lo hiciera.

El principe mestizo (Sterek)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora