"Naruto" El Samurai Sin Nombre

capítulo 5

Anko parte 2/2

-sujeta bien las pinzas -ordeno un hombre con vendas en las manos, tes negra y una especie de casco echo con paja.

-¡Si!

Golpeteos de un marro contra el metal es lo que se escuchaba en el lugar, momentos después la barra de metal que sostenía Naruto con las pinzas fue remojado en un tanque de agua seguido regreso al horno de fundición para repetir el mismo proceso una y otra vez.

De la mañana ala atardecer así fue, después del medio día por fin termino salió del lugar, sudado, cansado, por fin se quitó las vendas que lo protegían del calor, no se dió cuenta cuando el hombre salió seguido de el.

-como siempre.

-eh? Ah, si.

-tu parte -extendiendo una bolsa con unas cuantas monedas.

-gracias.

Hace ya meses que comenzó a trabajar, Anko se iba por días, semanas, incluso uno o dos meses, normalmente le dejaba algo de dinero para que pudiera pasar por ese tiempo con el estómago lleno. No obstante, en diversas ocasiones el dinero no era suficiente por más que lo rindiera, en algún punto solo no bastaba, ya sea por los puestos a los que su madre le avia dicho que fuera subían cada vez más su precio al menos hacía el, la otra razón es por qué simplemente tardaba más de lo normal, una o dos semanas más de lo previsto.

Recuerda la primera vez que pasó eso, ella no solía viajar y rara vez dejaba la aldea, incluso en esos casos ella siembre regresaba antes del anochecer, un día, ella solo solo se fue.
Fue como a sus cinco años, antes de que su madre fuera reemplazada por un demonio que le robó la cara.

Pero en otro lugar.

Anko solía descansar plácidamente después de sus misiones, sentarse en su sillón con un plato de dangos y una botella de sake mientras veía la televisión era lo mejor, era...lo mejor.
Hace cuánto que no hacía eso? Desde que Naruto llegó a su vida no volvió a salir de la aldea, el primer año le dieron un capacidad por maternidad para que pudiera convivir con el bebé, acostumbrarse el uno al otro, fue horrible.

No poder apartarse de ese pequeño ser, no poder salir como antes por las noches, dejar de beber para estás en condiciones para cuidar del bebé, carajo, incluso dejo de verse con sus amigos, al menos kurenai todavía la visitaba y ayudaba de vez en cuando, como carajos logró vivir de esa manera?.

El segundo año por fin pude regresar a hacer misiones de nuevo, eran misiones ocasionales y dentro de la aldea pero asta eso era mejor que nada, en esas ocasiones dejaba a Naruto con alguna niñera o con Kurenai si estaba libre, me preguntó en muchas ocasiones como seria si no hubiera abierto el pico ese día en la reunión, como sería? Tal vez yo sería alguien más alegre o estaría casado con Obito? Naruto estaría creciendo con una familia completa o creería en un orfanato? Sea como sea eso ya no importa.

El tercer año por fin regrese al campo ninja como antes, fui movida al cubículo de interrogación, me encantaba poder desahogarme con unos criminales cuando tenía un mal día, regresar a ver a mis compañeros y amigos ¡Ja ja! De verdad en ese año fue uno muy bueno, incluso naruto demostraba tener pre-determinación al ser ninja como yo.

Esa sensación, ser admirada, ser una referencia de un gran ninja ante esos pequeño eh inocentes ojos llenos de esperanza, amor y admiración es...era......