Feeling are fatal [Jimin os|NSS]

[Capítulo único]

Jimin sale de su casa apenas escucha el timbre, a sabiendas de que es Taehyung quien ha llegado por él. Sonríe de inmediato al encontrarse con su rostro, pues su mejor amigo luce tan feliz que sospecha que trae una buena noticia. Sobre todo, imagina que lo felicitará por su cumpleaños número 15, pues siempre es él el primero en hacerlo.

―¡Adivina! ―Park lo mira, expectante, sabiendo que realmente no debe de adivinar. ―No, no adivines, ¡ya te digo! ―Se da la vuelta, comenzando a caminar hacia la secundaria mientras el azabache no tarda en seguirle. ―Ya que hoy es el cumpleaños de Hajoon, he conseguido boletos para la película que él deseaba ver, ¡espero que eso le guste! ―Jimin se detiene tras escuchar sus planes. ―Y tengo unos cupones para pasar por su pizzería favorita, ¡así que podré pagarlo sin problemas! ―Gira a verle por sobre su hombro. ―No es que sea tacaño, ¿sí? Pero me gasté mi dinero en ese perfume que le gusta mucho ―Confiesa abochornado.

―¿El cumpleaños de Hajoon? ―El menor asiente. ―¿Es hoy?

―Sí, ¡ya te lo había dicho! ―Continúa caminando, demasiado alegre. ―Así que hoy no vuelvo contigo a casa, ¿sí? Tendré la tarde ocupada

―Ah, vale...

Jimin intenta sonreír, apurando su paso para caminar a la par de él mientras no deja escucharle hablar de su novio. Se recrimina a sí mismo olvidar por completo que Hajoon cumplía años el mismo día que él pero, especialmente, siente deseos de llorar ante lo indiscutible: Taehyung, su mejor amigo desde la infancia, ha olvidado por completo su cumpleaños. Y podría enojarse con él, cuestionárselo, pero no le gusta la idea de pelearse con él, mucho menos tomando en cuenta lo feliz que luce.

El resto de la jornada Hoseok observa con curiosidad como Taehyung parece ir en su propio mundo de ensueño mientras Jimin luce algo decaído. Éste último le pide que guarde silencio respecto a su cumpleaños y eso le sorprende, porque ¿qué razones tendría para callar un día tan especial? Ni siquiera puede concebir que Taehyung realmente haya olvidado su cumpleaños. Sin embargo, aquello queda más que confirmado cuando tras el término de clases el menor se despide rápidamente de ellos para irse corriendo al instituto de su novio.

―¿Estás bien? ―Pregunta Hoseok, caminando hasta él al notar que no tiene apuro en guardar sus pertenencias.

―Lo estoy ―Afirma, dedicándole una breve sonrisa. ―Probablemente su familia me llame más tarde a cenar, ha sido así estos últimos años ―Intenta levantar su ánimo.

Sí, seguramente Taehyung lo recordaría pronto y lo llamaría para invitarlo a su casa como cada año.

―Hmm... ―Hoseok no parece muy convencido, pues desde hace tiempo Taehyung parece tener sólo cabeza para su novio. ―Yo... lo siento, no puedo acompañarte hoy ―Murmura apenado. ―Me toca trabajar

―Está bien, Hobi, sé que es así

Jimin sigue sonriendo, como si nada pasara, lo que dificulta aún más las cosas para Hoseok. Si él no estaba bien, ¿por qué no sólo lo decía? Se acerca a él, envolviéndole con sus brazos afectuosamente, y el menor se queda quieto mientras aquel chico lo abraza.

―Feliz cumpleaños de nuevo, Jiminie ―Lo vuelve a felicitar. ―Gracias por nacer y ser mi amigo ―Se aleja de él, acariciando su cabello con ternura. ―Permanece aquí por muchos años más, ¿de acuerdo? ―Jimin siente, esta vez enseñando una sonrisa más sincera. Hoseok lo suelta para finalmente irse.

Jimin regresa solo a casa. El camino de regreso se vuelve cada vez más silencioso y eso lo hace sentir un poco triste. Taehyung estaba demasiado ocupado en su relación como para pasar tiempo con él y, debido a que Hoseok había conseguido trabajo hace un tiempo, ellos sólo se estaban viendo en la secundaria. Llega a su casa y revisa el refrigerador, buscando algo de comida, mas no encuentra nada. Quizás deba comer algo instantáneo.