Missing Contact

El tesoro del dragón

El nuevo cambio de vendas frescas se envolvía lenta pero firmemente alrededor de su pierna, era una sensación calmante pero a la vez frustrante dos emociones muy contradictorias para sentir al mismo tiempo, calma por dejar de ver las heridas aun en sanación y frustrante por el recuerdo de que no importaba cuantos nuevos cambios tuviera esa pierna no se mejoraba para nada. Su madre dijo que era una persona muy contradictoria y por eso elegía cosas que siempre lo llevaban a meterse en situaciones incomodas, como adorar los cuentos fantásticos y las películas palomeras, pero llegar a quedarse dormido viendo Harry Potter en medio del cine, gustaba hacer voluntariado en el centro juvenil pero cuando le daban reconocimiento se escondía, elegir una carrera que puede implicar hacer viajes a lugares exóticos e inhóspitos, cuando definitivamente tenía la definición de animal casero tatuada en la frente

Su abuela materna la tercera generación nacida en américa siempre se reía de eso diciendo que no sabía si era porque su signo zodiacal era piscis o porque nació en el año del tigre, su nana siempre fue una mujer muy dada a los horóscopos y las predicciones de taza de té, no creía mucho en dioses o esas cosas pero si pensaba que el karma era una fuerza inamovible y que las cosas que nos rodeaban podían influir mucho en nosotros. Por eso nunca le vio sentido a estarse peleando con la gente por cosas que no podían cambiar, la vida les dio las cartas con las que podían jugar y solo aceptarlas es como podían seguir adelante

Su abuelo por otro lado era un estadounidense hecho y derecho, tenía tu típico apellido americano cliché que les dan a los agentes del gobierno en películas de acción los sábados por la tarde y le decía a todos sus amigos que había votado por Obama por segunda vez, a veces siendo tan denso para algunas cosas, dando 10 dólares como recompensa por hacer los quehaceres, pero era una persona cariñosa que amaba su familia y que no dudaría en saltar al fuego para defender lo que era suyo, diría que simplemente era un adolescente que no sabía qué hacer con su vida, siempre con todo el cariño del mundo. No le sorprendía que su madre fuera esta chica vivaz y eléctrica con sueños locos, pero pies bien plantados en la tierra, que llegó a encantar a un hombre cansado de las imposiciones familiares y forjado por la crianza tigre

Por lo que su madre le contó ella y su padres tuvieron la típica historia de amor en la universidad ambos compartían una clase, en este momento no recuerda si era literatura universal o alguna lengua extranjera, papá era una persona súper competitiva siempre con la vista puesta en llegar al primer lugar de la clase, mamá siendo una chica lista pero trabajadora llego a los primeros puestos de su clase por puro esfuerzo propio pero intentaba no volver eso el centro de su vida, fueron rivales luego se juntaron mucho y luego de enamoraron

Los opuestos se atraen como dicen por ahí, nana diría más bien que se complementaban en uno al otro al ser tan diferentes cubrían las carencias del otro, no falta decir que la familia de papá no veía con buenos ojos la relación, ponían muchas trabas y simplemente era gente nefasta con ella, lo único que lograron es no ser invitados a la boda, mamá aún tiene su foto de bodas en un marco sobre su mesita de noche junto a una foto de la graduación de la primaria de Zihao

Siempre le dio una sonrisa orgullosa a pesar de no saber muy bien cómo lidiar con todos los cambios más que estándar de un adolescente durante la mitad de su vida, siempre fue una madre comprensiva, una mujer lo suficientemente estricta y realista como solo una madre soltera criando a una persona bastante "única" en palabras de su abuelo puede ser

-entonces así es la forma adecuada de colocar las vendas para que no corte la circulación de la pierna su alteza-

-lo entiendo doctor muchas gracias-

Zihao salió de sus recuerdos al escuchar la voz del médico regañando a Bai Long, se dieron cuenta demasiado tarde que el príncipe apretó demasiado las vendas en su pierna por evitar pasar mucho tiempo con sus manos sobre las heridas y volverse demasiado incómodo para el joven humano, fue después de la cena que Zihao insistió en que podía ir caminando hasta la habitación y al ponerse de pie cayó al suelo al dar el primer paso fuera del comedor. No hace falta decir que asusto a los dos dragones que corrieron a auxiliarle preocupados por su repentino colapso