capitulo 2, aburrimiento

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Era una noche despejada y obscura, el viento silvaba sin dar descanzo a quien se pusiera en frente, susurrando suavemente como una madre calmando a su hijo.

Una noche hermosa. Una lluvia de estrellas remataba aquel escenario, burlandose de todo y todos.

"No existen palabras para describir esto, verdad blue planet-san"

El pensamiento salio inconcientemente, se pregunto si aquel gran amigo estaria con el, en este mundo. Que diria al presenciar tal espectaculo? Estaba seguro que lo disfrutaria. Saborearia cada momento, cada segundo de la vista

-Si tan solo estuvieras aqui...-

Pero no lo estaba ni lo estaria, nunca veria esto, nunca deleitaria sus ojos con el escenario, jamas experimentaria la fresca ventisca que sentia ahora, era imposible que oliera el jugoso aroma de la primavera

Nunca..... pero aun con eso, le consolaba un poco pensar que sus ojos podian transportar aunque sea un poco de ese dulce espectaculo natural

-Cuantos años... han pasado-

Aquella voz, proveniente de un ser esqueletico, la representacion de la muerte que portaba una tunica arrancada del velo de la noche y un sin fin de tesoros y artefactos que lo hacian ver como lo que era

Aquel ser de gran poder pregunto a un paisaje que se llevo su pregunta y lamentos lejos de el, acompañandolo en lo que necesitara y pudiera

-89 años, momonga-san-

Una voz que no debia estar hay se presento respondiendo a su pregunta, una que sin importar los milenios, el avatar de la muerte reconoceria en cualquier parte del basto cosmos

-PERORON....chino-san-

Tan pronto como vino se fue, dejando al overlord cernido en las alturas de la tierra con un sentimiento agridulce

Soledad, era un sentimiento recurrente en su corazon, mas en ese momento mientras bajaba del gran cielo negro. Lo tenia todo: poder, prestigio, riquesas, comida en abundancia, un reino fuerte y sano creciendo sin conocer fin

Cualquiera en su posicion estaria satisfecho, no le cabia duda que cualquier especie estaria bien

Pero el no, Ainz al tener todo al alcance de su mano donde cualquier deseo que el quisiera era hecho, se sintio aburrido y muy solitario. Que sentido tiene dirigir si no tenia un igual? Nisiquiera un rey podia tratarlo como tal, no habia enemigos por descubrir ni para destruir, no mas desconocimiento para el sobre lo abundante que tenia el mundo, no mas peligros para el ni sus seres queridos

Al final termino su cometido, un mundo feliz, sin guerras, sin hurto ni discriminacion de ningun tipo y lo mas importante..

Sus hijos, los hijos de sus mas grandes amigos, aquellos que consideraba familia ya estaban asalvo.

Llegando al suelo finalmente comenzo a caminar sin rumbo. No habia lugar no descubierto por sus aventureros, no almenos en las cercanias del reino hechicero

Despues de la reflexion de arriba y contemplando lo sucedido en los ultimos años despues de la semi-conquista mundial en su mente, vino un sentimiento casi tan fuerte como la nolstalgia, tristesa y soledad

El aburrimiento, uno tan fuerte como el mas aun con todo su papeleo esperandolo, sin nada que hacer como destruir un pais, intimidar un enemigo, matar un gran mounstruo, explorar lo inexplorado. Nada de nada

Mientras pensaba que otra excusa ponerle a albedo para no ir a hacer su trabajo como rey llego a una parada melancolica. Villa carne estaba frente a sus orbes rojos

'Mi primer punto donde me mostre al mundo'

Aunque pasaron 89 años desde ese momento, aun lo recordaba vividamente, recordaba como mato a aquel soldado para rescatar a unas campesinas para despues masacrar a aquellos que amenazaban al pueblo

overlord: el devorador de mundos Donde viven las historias. Descúbrelo ahora