CAPÍTULO 3: A LEFTY NO LE IMPORTA NADIE

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En la guardería.

-Guau, que oso más chulo- decía un niño contemplando a Lefty

-¿Y yo?- preguntó Puppet

-¡BUAAAAAAA!- empezó a llorar el niño

-No llores, ¿juegas conmigo?- le dijo Lefty al niño

-¡Vale!- dijo el niño dejando de llorar

-Ya sabes quien es mejor, Puppet- le dijo Lefty

Lefty se fue a jugar con todos los niños y Puppet se quedó solo

-Genial, desde la llegada de Lefty ningún niño está conmigo- dijo Puppet muy triste

-Oye Puppet, ¿juegas conmigo?- le preguntó un niño a Puppet

-¿En serio?- dijo Puppet feliz

-Sí- le dijo el niño

Y ahí, Puppet empezó a jugar con el niño llamado Carlos. Carlos y Puppet se hicieron muy amigos. Todos los días que Carlos iba a la guardería era el único niño que jugaba con Puppet, pero aún así se divertían mucho juntos.

-¿Un niño que juega con Puppet? Eso no puede ser así- dijo Lefty enfadado- Todos jugarán conmigo, hasta Carlos-

Después de un rato, todos los padres se llevaron a sus hijos.

-Los últimos siete días han sido los mejores de mi vida- dijo Puppet sonriendo

-Puppet, ¿cómo es posible que un niño juegue contigo?- le preguntó Lefty

-Pues es posible, ¿qué es, que no te gusta que UNO de CINCUENTA niños juegue conmigo?- le preguntó Puppet

-No, no me gusta. Esos cincuenta niños tienen que jugar conmigo y NO contigo- le dijo Lefty

-¿Y qué vas a hacer?- le retó Puppet

-Tú ya sabes que no me importa matar si consigo lo que quiero- dijo Lefty

-¿No irás a...?- dijo Puppet

-Tienes hasta el próximo día para jugar con Carlos, después de ese día deberás obligarlo a que juegue conmigo o si no, lo mataré- dijo Lefty con un tono amenazante

-¡Es un pobre niño!- gritó Puppet

-Ya, pero la guardería es mía y todos tienen que jugar conmigo, yo pongo las normas- dijo Lefty

-Prométeme que no le harás daño a Carlos- le dijo Puppet asustado

-Si no juega más contigo, prometido- le dijo Lefty

Al día siguiente.

-¡Hola Puppet!- dijo Carlos con una sonrisa

-Ho...hola- dijo Puppet con miedo

-¿Qué te pasa?- le preguntó Carlos

-¿Sabes? Tienes que jugar con Lefty, conmigo no puedes- le dijo Puppet

-¿Por qué?- le preguntó

-Lefty me ha dicho que yo no puedo jugar con nadie, así que juega con él- le dijo Puppet

-O sea, ¿que ya no somos amigos?- dijo Carlos

-No puedo ser más tu amigo- dijo Puppet muy triste

-¡Te odio!- le gritó Carlos y se fue

-¿Por...qué? ¿¡QUÉ HE HECHO YO PARA MERECER ESTO!?- gritó Puppet

Al día siguiente.

-Hola Puppet, ¿hoy no vas a jugar con Carlos?- le preguntó Lefty

-¿Es una broma?- dijo Puppet

-¿Por qué no vas a buscarlo?- preguntó Lefty

-¿Qué has hecho, maldito hijo de perra?- le dijo Puppet

-Descúbrelo tú- dijo Lefty con una sonrisa

Puppet fue por toda la guardería buscando a Carlos por la piscina de bolas, la oficina y las estructuras de juego. Pero dentro de una estructura encontró algo que no quería.

-Ca...Carlos, ¿qué te ha hecho?- dijo Puppet

Puppet vio a Carlos dentro del tobogán sin una pierna, con las tripas por fuera y con los ojos sangrando.

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