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—V, la pelea será hoy antes de la media noche —Taehyung escuchaba como Dawn le daba las indicaciones —

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—V, la pelea será hoy antes de la media noche —Taehyung escuchaba como Dawn le daba las indicaciones —. Es contra Jay, el realmente estuvo jodiendo toda una semana para que te emparejáramos con él, tu sabes si qui...—No te preocupes, ahí estaré —Una pelea entre Jay y V era totalmente dispareja en pesos, pero en ese mundo no había reglas que seguir—. Esperare la dirección —Termino la llamada y se tiro sin delicadeza en el sillón a un lado de su mejor amigo.—¿Otra pelea? —Jimin aparto su vista de la pantalla donde se mostraba una coreografía. Taehyung solo asintió y recostó su cabeza sobre el hombro de su amigo y cerró los ojos—. ¿Estás cansado?Taehyung apenas había dormido, ya que después de la pelea de la noche anterior había decidido ir a festejar con sus amigos y tuvo que levantarse para ir a trabajar con Namjoon y era eso o morir a manos de este último por faltar aun cuando se lo advirtió.—Namjoon no me quiso dar el día libre —Taehyung se quejó con un puchero en los labios pero que rápidamente se convirtió en una mueca de dolor.—Te dije que no fueras a beber porque tenías citas el día de hoy —Dijo Namjoon después de haberle dado un golpe en la nuca y prosiguió con su caminata hasta la recepción donde habían llegado clientes.—Llego mi cita, ¿vendrás a la pelea de hoy? —Pregunto Taehyung mientras se levantaba para acomodar lo que necesitaría para trabajar.—Hoy no podre —Taehyung conocía a su amigo y sabía que ocultaba algo así que volteo a mirarlo esperando una respuesta—. Te diré, pero no se lo digas a Jungkook —Jimin se arrodillo en el sofá y se inclinó hacia Taehyung quien se había inclinado también hacia Jimin—. Tengo una audición mañana así que tengo que practicar.Taehyung miro a su amigo y le regalo una sonrisa antes de darle un gran abrazo —. ¿Por qué no me habías dicho?, ¿Dónde será?—¿Qué estaban secreteando ustedes y por qué no me has dicho a mí? —Jimin y Taehyung miraron hacia el dueño de esa voz.—No tengo por qué contarte todos mis secretos —Jimin volteo sus ojos ante su hermano interrumpiendo como siempre.—Pero somos hermanos, los hermanos no se guardan secretos —Jungkook lloriqueaba mientras se acercaba a Jimin y lo ahogaba en un abrazo.—Pues nosotros no, ahora aléjate encimoso —Jimin pudo zafarse de aquel abrazo y empezó a recoger sus cosas—. Tengo que irme y lo siento por no poder ir a tu pelea hoy Tae.Taehyung se acercó abrazar a su amigo —No te preocupes, eso no están importante como tu cita de mañana.—¿Cita?, ¿Cómo que cita? —Jungkook tomo la cara de Jimin y lo hizo mirarlo—. ¿Con quién vas a una cita Park Jimin?, no recuerdo que me hayas pedido permisoUn golpe en el abdomen basto para que Jimin quedara libre—¿Acaso quieres que te recuerde que soy mayor que tú? Taehyung se rio de aquella relación de hermanos y seguiría disfrutando de aquello, pero Namjoon le hablaba—Tengo que irme, pero mándame los datos más tarde y mañana paso a recogerte para que no vayas en autobús.—¿Podrías hacer eso?, ¿No terminaras cansado con tu pelea?Taehyung negó —Sabes que no terminare ni con un golpe, aparte mañana tengo el día libre, podría llevarte y recogerte —Taehyung acaricio con cariño el cabello de su mejor amigo y le dio un último abrazo antes de irse o Namjoon lo mataría.—Entonces te mando la hora más tarde y suerte! —Se despidió Jimin mientras iba hacia la puerta del local—. Adiós Namjoon hyung.El sonrojo en las mejillas de Jimin no paso por desapercibido del hermano sobreprotector que tenía.—¿Por qué Jimin se sonroja cada vez que le habla a Nam hyung? —un Jungkook con mueca de confusión y a un sosteniendo su abdomen adolorido hizo esa pregunta mientras miraba la puerta por donde salió su hermano.Taehyung se rio de aquello y solo por diversión echó más leña a la pequeña llama que estaba dentro de aquella cabeza de Jungkook—Por qué Jimin está enamorado de Nam hyung. Taehyung no espero para mirar la cara que habría echo su amigo, pero podría imaginársela por la intensa mirada que sentía en su espalda que se intensificaba con su risa.—¡NAM HYUNG! —Ese grito por parte de Jungkook hizo que Taehyung no pudiera reprimir una carcajada. Seguro luego lo regañarían a él por meterle ideas a Jungkook, a un que no lo eran.—Disculpa la tardanza, tu diseño es una serpiente en el cuello, ¿cierto? —la chica que era hoy su clienta asintió—. Muy bien, entonces comencemos. La noche anteriorMin Yoongi, el gran empresario, el lobo como todos lo conocían. Esa persona que a primera vista sentías que debías bajar la mirada, aquel a quien, si te atrevías de tener los huevos de desafiarlo era una derrota segura sin empezar el juego, porque así lo veía Min Yoongi, unos juegos inútiles que no merecían ni el poco tiempo que le tomaba ganarlos y es por eso que, a esa hora, su humor era una total mierda. Aquellos empresarios que reían como estúpidos no merecían mas de su tiempo.—Señor Min, ¿Qué le está pareciendo la cena? —Un empresario en el cual Min ni se había tomado el tiempo para recordar su nombre, se acercó con una gran sonrisa que a Min solo le recordaba a la de un pervertido. Min ni siquiera se molestó en mirarlo más de lo debido y estaba a punto de levantarse de su lugar para acabar toda esa mierda de falsedad, pero fue interrumpido por otro empresario, quien era el que tenía más poder entre toda esa basura. —Señor Min, le parece si antes que se retire hablamos rápidamente de la propuesta en general —Aquel vejestorio le dio una sonrisa igual de falsa pero que parecía tener más practica en aquel mundo—. Me asegure que mi secretaria le enviara por correo los archivos y sé que es una persona muy ocupada, pero si accedió a esta reunión me hace suponer que tuvimos la suerte y el honor que nos diera de su tiempo.Min Yoongi podía admitir que aquel hombre, era el mejor que había visto en cuanto a labia se trataba. —Sí, mi secretario me dio la basura de documentos que envió, realmente sentí lastima por las hojas desperdiciadas —la cara de aquel hombre franqueo un poco antes de recomponerse, pero Min Yoongi lo había notado, El Lobo vio la debilidad.—¿Hay algún descontento con la fusión? —El tono de voz de aquel hombre era tranquilo pero sus ojos mostraban toda la desesperación que sentía al saber que su propuesta estaba al borde del precipicio—. La empresa Min es la que saldría más beneficiada y claro que usted seria el director, aparte de...—Hey, chico —Min interrumpió el estúpido discurso de aquel hombre y llamo a un mesero que se encontraba recogiendo los platos de otra mesa—. Pagare la cena de hoy, tómenlo como compensación por no aceptar la propuesta de mierda, a un que no debería por desperdiciar mi tiempo con ustedes—El chico al que había llamado se acercó con rapidez y Min le entrego su tarjeta—. Cobra la cuenta de esta mesa.El chico asintió y se fue mientras Min Yoongi regresaba su mirada hacia aquellos vejestorios que creían que solo por la diferencia de edad ellos eran mejores y más calificados, pero Min Yoongi no había necesitado vivir más de sus 30 años para llegar a donde estaba y ser el mejor de Corea.—La empresa Min saldría ganando por mucho a la de usted, pero hay dos simples leyes que existen en ella, la primera es que el único dueño soy yo —Min Yoongi podía ver como las caras que antes rebosaban de felicidad ahora eran totalmente aterrorizadas y decaídas. Se levantó finalmente de la silla donde había desperdiciado unas hora de su vida —. Y la segunda, es que no hago trato con ratas, le recomiendo que afine más sus técnicas si quiere esconder los actos ilícitos que planeaba realizar con la fusión. Min Yoongi se retiró de aquel lugar sintiendo como su humor se calmaba al ver la lluvia frente a él, mientras que otras personas sufrían o maldecían cuando aquellas gotas caían del cielo, Min era parte de las personas que lo disfrutaban y se sentían acobijados por ellas. La tranquilidad de Yoongi se vio interrumpida cuando el mesero al que le había entregado su tarjeta se paró a su lado con la respiración agitada.—Señor, casi olvida su tarjeta —aquel chico rubio tenía sus mejillas sonrojadas por el frio y tal vez la pequeña corrida que dio para alcanzarlo, pero ahora con la mirada fijamente en él por parte de aquel atractivo empresario, su sonrojo se intensificaba.—Eres lindo —El gran Min no podía evitar estudiar los rostros y cuerpos de la persona ya que en eso se basaba su trabajo. Vio como los ojos de aquel chico se agrandaban un poco por la sorpresa de escuchar aquellas palabras—. ¿No te interesa ser modelo?El chico salió de su pequeño trance y negó con la cabeza —No, no es el sueño que persigo. Aquella elección de palabras llamo la atención de Min, pero antes de que pudieran seguir hablando, su coche fue estacionado frente a él. —Podrías intentarlo, no pierdes nada, pasado mañana habrá audiciones —Le tendió una tarjeta que el chico tomo por auto reflejo y parecía a punto de decir algo, pero no pudo porque el señor Min ya se encontraba caminando hacia la puerta del conductor sin impórtale mojarse con aquella lluvia aun cuando el chico encargado de llevar y traer los autos le ofrecía un paraguas. El señor Min se vio interrumpido nuevamente antes de subir a su auto por aquel chico, quien llevaba el paraguas para evitar mojar su uniforme.—Le agradezco mucho la oportunidad, pero siento que es mejor devolverle la tarjeta, realmente no estoy interesado, prefiero seguir luchando por mi sueño—le tendió la tarjeta de presentación que antes se le había sido entregada por Min.—¿Cuál es tu nombre? —Min cerró la puerta de su coche y espero la respuesta debajo de aquel paragua que compartía el chico con él.A un que parecía dudar a un así respondió con confianza —Jimin, Park Jimin.—¿Cuál es el gran sueño que persigues, Park Jimin? —La ambición como la de aquel chico no se encontraba en donde sea, así que le daba curiosidad.—Llegare a ser el bailarín más reconocido de Corea —Y fue aquella gran determinación que hizo que se le presentara una gran oportunidad a Park Jimin.—Ven pasado mañana a la empresa, tal vez no leíste la tarjeta de presentación —Min abrió nuevamente la puerta de su coche y entro —. Estoy seguro que te veré ese día, tienes poco para prepararte, pero si tu ambición es tan grande, estoy seguro que no será un problema. Mucha suerte Jimin.La puerta fue cerrada y el auto del Lobo se perdió en las calles de aquella ciudad, mientras un aturdido Jimin veía con sorpresa la tarjeta de presentación y el nombre escrito en ella. La gran empresa Min de donde salían los mejores modelos, cantantes y sobre todo bailarines.

Destino -TaeGi/YoonTaeDonde viven las historias. Descúbrelo ahora