El destino de nosotros. 'TRADUCCION'

5. VÍNCULO DEL ALMA

Otro día irritante.

Jiang Cheng tenía muchos de esos: cuando sus discípulos no hacían nada bien, cuando el entrenamiento parecía ir completamente mal e incluso el tiempo era pésimo. Desde que se levantó sintió mucho calor, un calor increíble. La simple idea de viajar a Lanling era su esperanza para mejorar un poco ese día. Después de todo, la Torre Koi estaba más al norte que Yunmeng, lo que significaba que debería tener una temperatura más fresca.

Incluso durante el día.

¿Qué tan equivocado estaba Jiang Cheng?

El calor parecía sólo empeorar, mucho más... Pero no importaba mientras ladraba órdenes a algunos sirvientes en la Torre Koi. Jiang Cheng no estaba allí sólo por el tiempo, sino que había recibido una carta de su hermana, a la que intentaba visitar todos los meses al menos una vez desde que se quedó embarazada. No siempre era posible ni fácil, pero Jiang Cheng lo hacía posible porque sus instintos le volvían loco.

Yanli era de la familia, incluso estando lejos y casada con otra familia, era parte de su manada. Y siempre lo sería, lo que aparentemente no era ni siquiera una discusión que tuviera que tener con sus instintos. Estaban con él, Yanli y su hijo debían ser protegidos, no sólo por su nueva manada... Jiang Cheng estaría condenado si dejaba todo en manos de los Jins. El pavo real podría haberse ganado su respeto, pero su padre seguía siendo... Lejos de eso.

Un hombre repugnante.

Tenía uno de los peores olores alfa que Jiang Cheng captaba en el aire, y estaba por toda la Torre Koi, lo que no hacía más que agriar su estado de ánimo mientras le conducían por muchos pasillos y edificios en sus visitas.

La Torre Koi era magnífica, con sus fabulosos edificios y demasiados sirvientes, también muchos discípulos y familias de las ramas. No habían sufrido el daño que tuvo Muelle del Loto, ni siquiera la mitad, ya que Jin Guangshan había permanecido neutral durante demasiado tiempo... La mayoría de las peleas ocurrían tan lejos de su territorio... al menos al principio.

Todos los pensamientos agrios abandonaron la cabeza de Jiang Cheng, en el momento en que vio a su hermana acercarse a él, tan redonda con su vientre de seis meses de embarazo... Tan hermosa, sonriéndole con fuerza.

__¡A-Cheng! Estoy tan feliz de verte!

Ver a su hermana feliz y sana era una de las mayores alegrías de su vida. Jiang Cheng podía sentir cómo su corazón se hinchaba dentro de su pecho mientras caminaba hacia ella. Se detuvo antes de llegar a ella, pero Yanli lo atrajo hacia sus brazos con más fuerza de la esperada, trató de no apretarla demasiado. Su vientre era duro y su olor tan dulce... Tan mezclado con el de Jin Zixuan.

Seguía siendo extraño oler su olor cambiado, pero no le molestaba.

Tal vez fuera porque tuvo tiempo de adaptarse al cambio de olor de su hermana después de su marca de apareamiento, hasta el momento en que se quedó embarazada y su olor cambió un poco más. Pero seguía teniendo ese olor familiar, familiar de una manera que sólo Yanli y Wei Wuxian eran... Aunque el olor de Pavo Real también había cambiado ligeramente, tomando un poco de Yanli en él, lo que también impidió que Jiang Cheng lo viera como un alfa amenazante.

__¿Cómo has estado? __Preguntó Jiang Cheng cuando se apartó, sonriéndole. Una cosa era cierta, Yanli nunca había estado más hermosa - o más feliz. Pero no era el único que comprobaba a su hermano, ella también lo escudriñaba.

__Estoy perfecta. __Tomó su mano entre las suyas, aferrándose a sus dedos como cuando eran niños, pero puso su palma sobre su redonda barriga. __Ha dado muchas patadas.

Jiang Cheng se sorprendió, sintiendo el movimiento bajo sus dedos. Apenas estaba allí, pero podía sentirlo, y no pudo evitar que la sonrisa apareciera en su rostro. Ese niño sería difícil , creía él... Pero su hermana era tan feliz, y sería una madre tan estupenda, que ni siquiera la naturaleza malcriada de Jin Zixuan sería capaz de arruinar a su hijo.