||¡𝐘𝐚𝐧𝐝𝐞𝐫𝐞 𝐆𝐥𝐚𝐦𝐫𝐨𝐜𝐤!𝐅𝐫𝐞𝐝𝐝𝐲 𝐱 𝐋𝐞𝐜𝐭𝐨𝐫𝐚||

˗ˏˋ ۣۣ፝ۜ͜͡ஓீ 𝐂𝐚𝐩í𝐭𝐮𝐥𝐨 1

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─── ... ─── Ella pestañeó.

Recibió un largo silencio como respuesta.

Frente de la fémina se alzaba el mismísimo célebre oso tan clamado por los menores, era muy grande a diferencia de ella e intimidaba con facilidad. Robusto y de espalda fornida. [T/n] lo había visto por televisión y desde la distancia, pero este tipo de cercanía que poseían ambos provocaba una inesperada impresión, se sentía tan chiquita. En verdad.

La sombra del robot la tapaba por completo. Ni hablar de que apenas alcanzaba a llegarle hasta la placa pélvica. Él era enorme.

─── ¿Freddy? ─── Llamó su atención una vez más. Ahora se moría de vergüenza por haber sido ignorada de aquella manera ¡Quiero decir! Tal vez no tuvo que ser tan directa, quizá la mente del animatrónico tardaba en procesar pedidos u órdenes y tenía que ir despacito.

Temiendo que aquel no la haya entendido bien, repitió: ─── No es mi intención interrumpir, pero se precisa tu placa de testeo antes de acceder al Show. No temas, ¡Mira! Estoy legalizada a pedirtelo ─── Esta vez fue más cautelosa, quería evitar cualquier altercado y el silencio ajeno la ponía nerviosa.

La muchacha tomó la tarjeta que colgaba en medio de sus pechos, alzandola al aire y aproximándola un poco al rostro de Freddy. Éste pareció reaccionar ante los movimientos femeninos, acercando sus gruesos dedos metálicos a la credencial y tironeando de ella.

Quería leer los datos de aquella hembra.

[T/n] tuvo que ponerse de puntitas, le había jalado el cordón que rodeaba su cuello al elevarlo tanto y la hirió un poco. Freddy soltó de tal apenas resguardó toda la información que exponía el objeto.

─── ¡Super estrella [T/n]! Muchas gracias por haber acudido a mis necesidades. Te lo entregaré en un momento, sin embargo necesitaré de tu ayuda para removerla con éxito. Necesitarás reemplazarla en cuanto logres extraerla por una nueva, te brindaré la que poseo ─── ¿Cómo es eso? ¿QUÉ?

Se hizo para un costado y movió sus orejas de arriba a abajo mientras sonreía en grande insinuandole el paso a su camerino. [T/n] entró ansiosa, si antes estaba nerviosa entonces ahora mucho más ¿¡Cómo que debía hacer este tipo de mantenimiento!? Ella no sabía ni ocho cuartos del tema ¿¡Y SI ESTROPEABA ALGO!?

¿Qué debía hacer? No había tiempo como para buscar algún operario afuera.

"¡Todo va estar bien! Le pediré que me guíe".

Pensó la mujer y de repente sintió una enorme mano posarse sobre su hombro y cuello. Ella se estremeció. El metal estaba muy frío ¡Pero esa no era la única cuestión! La palma del robot era tan gigante que alcanzaba a rodearle toda su garganta y nuca.