適應 ◗ Hamstercito ❞⠀( ✓ )

OO5 : Mimos y calor

─¿Hyung?

La vocecita se escuchó como un susurró, Seungmin bostezo. Sus piecitos descalzo se estremecía al frío piso, mantenía solamente una camisa grande cubriendo su cuerpo.

Había descansado una tarde completa, amaba dormir, sentirse envuelto en cobijas que tenían el aroma del Alfa, se sentía protegido y en casa. Era como tener abrazado a Hyunjin las 24/7 era la maravilla del mundo, sentir su respiración acariciar su cuello al momento de acostarse, esa risa de él hacía que inconscientemente sus orejitas se movieran ansiosas al tan magnífico sonido.

Hermoso. Todo de Hyunjin era hermoso.

La suave y tersa piel como algodón, acurrucarse en Hyunjin era como estar rodeado de mantas calentitas, sentirse tranquilo con un simple abrazo. Los lunares eran como dibujos en una hoja, chiquitos y tiernos... Seungmin lo confirmaba. Esa risa, los gestos, su amor...

<Acendrado> pensó Seungmin. Uno de sus pasatiempos favoritos era leer, teniendo una biblioteca en casa, no pensó encontrarse con un libro que daba a conocer nuevas palabras. Encontrado "Acendrado" la curiosidad le ganó, y al leer el significado, inmediatamente su mente trajo a Hyunjin...

Él era puro, aún así todo mundo temiera de una mirada, Seungmin no. Veía la humildad desbordando de su corazón, tan caballeroso y dulce. "No soy perfecto" decía Hyunjin ante los halagos tímidos del Omega, pero... ¿Por qué a sus ojos el Alfa era la única maravilla del mundo? Seungmin quería que Hyunjin lo comprendiera.

Sentía e imaginaba un lindo futuro con él.

Al llegar a la cocina, Seungmin apreció con un tierno carmesí a un Hyunjin de espaldas preparando el almuerzo. Usaba unos simples pantalones deportivos, descalzo y dejando expuesto su tersa piel. Lo abrazó por detrás, olfateo el dulce aroma de panqueques, juro sentir el sabor en su paladar.

─Hyunjinnie.

─Bebé... Buen día. ─poniendo los últimos panqueques en el plato, apagó la estufa y girarse a mirar al reciente dormilón─ ¿Descansaste bien? ¿Mh?

Seungmin asintió inmediatamente, besando el descubierto pecho del moreno. Sus bracitos envolvían en grandeza al Alfa.

─ ¿A qué hora despertaste? Quería tenerte a mi lado, durmiendo Hyung.

─Hace unas horas─habló, pellizcando esas suaves mejillas de su parejita. Seungmin cerró sus ojos, dejándose llevar ante las caricias... ─ No quise despertarte, te veías muy cómodo durmiendo.

─ Soñé algo muy lindo, Hyung. ─Seungmin sintió a su corazón latir de forma veloz, sonriendo inconscientemente al sueño que tuvo.

Una curiosidad despertó en Hyunjin, viendo maravillado el bermellón en la piel del Omega.

─ A ver, cuéntame ─atrajo a Seungmin a su pecho, envolviendo su larga cola y acariciar esas orejitas casi ocultas en la azabache cabellera.

Seungmin era un chico tan tierno sin intentar algo. Hyunjin se enamoró más día a día.

─ Teníamos nuestros mini-JinJin y mini-Minnie correteando por toda la casa, Hyung ─riéndose avergonzado. Seungmin lo abrazo más fuerte. Incluso podía sentir su corazón latir a la par de Hwang a sus palabras─ Sus nombres eran... Eran muy bonitos y tiernos.

Una belleza de imagen cruzó unos largos minutos por la mente de Hyunjin, quedándose encantado de poder ver en un futuro, quizá, a Seungmin con sus hijos. Cuidarlo, mimarlo, besarlo... Consentirlo si estuviera en cinta. Todas las noches, tocar la zona de su pancita e imaginar la llegada de un bebé... Un lindo bebé león o una linda bebé hamstersita. Cualquiera de los dos sonaba estupendo. Magnífico. Hermoso.