Parte única

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Semi-AU

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Pehyan caminaba con las manos metidas entre sus pantalones bombachos negros que hacían juego horrible con su camisa color turquesa estilo pescador. 

Había ido a buscar a Pahchin a su casa para dar una vuelta en sus motocicletas como en los viejos tiempo, pero cuando el mayordomo abrió la puerta, sus planes se echaron para atrás cuando le informó que el joven Haruki no tenía mucho de haber salido. 

 Pehyan no lo habría tomado mal, sino fuera porque Pahchin tenían ya un mes comportándose raro y aun no le decía que era.  

Y cuando lo veía, parecía estar mas idiota de lo usual. Sin contar que se ruborizada y suspiraba de la nada.

—Demonios, que pasa con Pah — refunfuño. Odiaba no saber. 

Fue cuando dos coletas captaron su atención. Una sonrisa involuntaria se asomó en su rostro sin darse cuenta y caminó con prisa hacia aquel local.  Una menuda y bonita muchacha de cabello negro se encontraba observando accesorias femeninos.

—¡YASUDA!

La chica se sobresaltó.  Sin duda podría reconocer esa voz donde fuese. 

Sus mejillas se ruborizaron y miro hacia aun lado. 

—Hayashi-kun.

Desde que culminaron la preparatoria hace como dos meses, era la primera vez que lo veía. 

—¡Tiempo sin vernos! — seguía hablando en voz alta el chico. No pasó mucho Pehyan pensó en algo. — ¡Yasuda, eres una chica!

Yasuda le miró ofendida.

—¿Enserio? 

Pehyan se ruborizó, era tonto, pero sabia que aquello no había sido muy amable de su parte.

—Lo que quiero decir es que, como eres una chica, tu sabrás que sucede con Pahchin. — Y entonces la tomo de la muñeca. — Te invito de almorzar hamburgués y papas fritas si me ayudas. 

Yasuda alzó una ceja confundida.  Ignorando voluntariamente el cosquilleo de sentir la piel de Hayashi tocar su muñeca. 

— ¿Hayashida-kun? 

.

.

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—¿Por qué eres tan tonto? —gruñe Yasuda pasando una mano por su rostro. Exhala un suspiró y toma del plato una papa frita para señalar a Pehyan y luego comerla. —Es obvio. Hayashida-kun debe estar enamorado. 

Ryohei casi se atraganto con una papa frita.

—¡Pah enamorado!— chilló y Yasuda se disculpo con la mirada cuando algunos comensales le miraron con mala cara. —¡Eso es imposible!

—¡Baja la voz, siempre tan ruidoso!— le pidió en un susurro amenazante, luego se relajó y junto sus manos sobre la mesa mientras alzaba una ceja. — ¿Por qué imposible? Hayashida-kun esta en la edad.

—¿En la edad? — Pehyan le miró como si estuviera hablando en español o ingles.

Yasuda inspiró, tomando fuerza.

—Si, en la edad. Ya sabes,  tener mente y corazón para fijarse en chicas. O chicos. — Yasuda ladeo la cabeza. — Aunque he de decir, que me parece ha sido un poco tarde. Digo, se supone el amor juvenil comienza a mas tardar en la secundaria. —luego rió entre dientes. —Aunque no me debería extrañar, ustedes parecían amar más repartir puñetazos y andar como vándalos en aquellas motocicletas. 

Pehyan frotó su mente. 

—Pah enamorado. No puedo créelo. 

—Pues créelo.  — Yasuda le hizo seña para que mirara detrás de él.

Cuando Ryohei miró por sobre su hombro, siente como sus ojos se abren de par en par y su boca casi que llegó a tocar el suelo. 

Su mejor amigo había ingresado al local tomado de la mano con una bonita chica. Bonita chica que Hayashi no tardo en reconocer.

 —¡Yumi Mori!

Yasuda se golpeo el rostro cuando el tonto volvió a gritar.

Pah miró hacia Peh y sus mejillas se ruborizaron con violencia. 

Yumi Mori solo parpadeo confundida. 

***

 —Así que estás saliendo con Yumi Mori  — habló Pehyan, apoyado de la pared afuera del local de hamburguesa que ambos habían descubierto y pasado buenos momento en aquellos tiempos con la 3ra división de la Toman.  

 —Si, bueno, no reencontramos hace un mes en el taller que me obligaron a realizar mis padres sobre administración, y... no sé, simplemente surgió. — Pahchin miró hacia Yumi, quien hablaba con Yasuda sobre que sabe qué.  — Aun trato de acostumbrarme, sabes que soy estúpido, pero creo lo estoy haciendo bien. 

Y Pehyan lo miró curioso, como los ojos azabache de su amigo brillaron mientras observaba a su amiga de la infancia.   

Una sonrisa se apodero de sus labios tras comprobar que Pahchin era feliz.  

Lo tomo de los hombros y froto sus nudillos en su cabeza.

—Entonces si estás en la edad. 

—¿En la edad? — Pahchin le miró confundido.

—No sé, algo así me dijo Yasuda.   — Pehyan se encogió de hombros. — En si, lo que entendía es que significa que te has enamorado. 

Pahchin desvió la mirada con vergüenza, pero no lo negó.

—Si.

Pehyan rió entre dientes. 

***

Ryohei alzó su mano para despedir a Pah y Yumi.  Yasuda a su lado hizo lo mismo.  Luego ellos caminaron en dirección contraria para dejar a los tórtolos seguir con su cita. 

—Bueno, por lo menos descubrí que le sucedía a Pah.

Yasuda le miró.

—A pesar de todo, siempre me pareciste buen amigo.  — Pehyan le miró impresionado. Era la primera vez que la chica lo alagaba con algo. Aunque finalizando la preparatorio casi dejaron sus riñas y se podría decir que hasta iniciaron una amistad, pero mas de eso no paso. — Siempre ibas hasta el final cuando se trataba de Hayashida-kun, o Mitsuya-kun.

El corazón de Pehyan latió tan fuerte que pensó se le saldría de su pecho.

Y se preguntó, con mucha dificultad, si algo como eso le pasaba a Pahchin cuando estaba con Yumi.  

Se detuvo de golpe, haciendo que Yasuda se detuviera por igual confundida.  

—¿Hayashi-kun?

—Yasuda... —tartamudeo —. Yasuda... 

Yasuda ladeo la cabeza, no comprendiendo nada.  

—¿Sí?

Entonces Pehyan la miro tan intensamente que Yasuda tragó con fuerza. 

—Creo que yo también estoy en la edad.

Yasuda parpadeo varias veces antes de echarse a reír.  

Era sin duda la primera vez que Pehyan la escuchaba reírse debido a él.  Algo cálido se acentuó en su pecho y pensó, mientras la observaba aun reírse, que un sonido tan burbujeante como ese, no le desagradaría escucharlo siempre a su lado. 

¿Era eso empezar a enamorarse de una chica?

Pehyan entonces pensó que no sería tan malo.

No. Mientras fuera Yasuda.

Eso creía. 

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Nos vemos! ♥

La edad |  Pehyan & PahchinDonde viven las historias. Descúbrelo ahora