Harry y Tay

Capitulo 4

Harry POV

Enero

La conozco hace casi un año, me ha abierto su corazón. Seguramente debe estar pensando lo mismo que yo. Sé que nos tenemos que separar, no vamos a poder llevar una relación a distancia y mucho menos a escondidas. La gente dice que cuando se quiere todo se puede. Y créanme que en este caso no hay 2 personas en el mundo que quieran que algo funcione más de lo que nosotros queremos que esto funcione.

No solo lo queríamos, lo necesitábamos. Pero la vida no es como la pintan. Cuando algo no se da, simplemente no se da, y es mejor dejarlo ir. Y a pesar de que la idea no me resulta para nada agradable, era el momento.

Pero no sin antes disfrutar de su cariño una vez más.

 Mire sus ojos azules atigrados que incluso en la obscuridad de la noche brillaban cuando me veían. Y sentí su cuerpo bajo mis brazos, la forma en la que ella se aferraba a mí para no caerse, mientras soltaba una risita mirándome de vuelta. Subí corriendo hacia mi dormitorio. Esta noche no se iba sin antes hacerle el amor.

Taylor POV

Enero

Siempre hacia lo mismo. Me miraba con la seguridad de saber que era exactamente lo que estaba pensando. Como si adivinara que es lo que quiero, o siento. Pero esta vez estaba el pequeño detalle de que no podía estar en lo correcto, puesto que ni yo misma estaba segura de que es lo que quería.

Si, sentir su cuerpo otra vez sonaba agradable, y sabía que esta probablemente sería la última oportunidad de sentir sus brazos sujetándome, de sentir su boca sobre mi piel. Pero también sabía que nos teníamos que separar. Y justamente esas 2 ideas se encontraban, chocaban y me hacían perder la razón por un segundo.

Me apreté hacia el para no caerme, abrazándome de su cuello y en un instante entramos en su habitación. Estaba completamente a obscuras y en silencio, excepto por la luz de la luna que entraba por la ventana a la derecha, y por el sonido de la lluvia que no paraba desde que llegue a su casa.

Caí en su cama mientras Harry daba un paso atrás mirándome con ojos llenos de deseo, inmediatamente se sacó la camiseta la puso lejos, acto seguido se acostó sobre mí, apoyándose con sus brazos, sin perderme de vista, besándome con furia en los labios, besándome desde el hueco detrás de mí oreja, pasando por todo el cuello y quedándose en la mitad de mi pecho, donde levanto esos hermosos ojos verdes como esperando mi aprobación. Asentí con mi cabeza e inmediatamente llevo una de sus manos hasta mis senos, mientras retornaba hacia mis labios y me besaba con un poco menos de intensidad pero con la respiración aun entrecortada.

‘’Taylor, te quiero. Por favor tómalo en cuenta, pase lo que pase de ahora adelante. Jamás te mentí, es solo que todo esto es muy…’’

‘’muy difícil, lo se’’

Me lleve una mano hacia mi frente en señal de confusión. Nos íbamos a separar de nuevo. ¿Qué estábamos haciendo? Este era precisamente el motivo por el que quería esperar. No estaba bien.

En ese momento Harry se dirigió de nuevo hacia mi cuello, besándome lentamente hacia abajo, distrayéndome de todo lo que tenía en mente ese momento, pasando por mi pecho, donde mantenía su mano izquierda, siguiendo por mi estómago y acariciándome la espalda con su mano libre, mientras yo me arqueaba para facilitar su toque. El aprovecho la oportunidad y me levanto la blusa besándome a su paso el ombligo y liberando sus 2 manos para podérmela sacar más fácilmente. Me senté en la cama y el hizo lo mismo frente a mí, y mirándome profundamente, se deshizo de la prenda de vestir.

Sin saber que estaba haciendo, sin pensar en las consecuencias, dirigí mi mano hacia su pantalón, desabrochando el primer botón de sus jeans obscuros, y pasando mi mano suavemente por su entrepierna. Ciertamente quería esperar, pero siendo sincera, esta no era la primera vez que lo hacía con un chico, y también tenía mis movidas. Harry cerró sus ojos, suspiro y apenas si sonrió antes de abrirlos de nuevo y darme esa mirada llena de deseo que lo hacía ver tan sexy, y acentuaba sus rasgos masculinos. Me empujo de los hombros hacia la cama de nuevo y procedió a abrir el primer botón de mis jeans, sacándolos con rapidez, no sin antes acariciarme toda la pierna hasta mis tobillos, llegando a mis zapatos y lanzándolos lejos.