.MI REALIDAD.

PARTE 3

29 de diciembre del 2021.

—Yo a ella la amo, y quisiera que me dejaras ser su novio —la voz de Carlos se escuchó en la cocina, me acerque un poco y lo vi hablando con Javier— todo quedará en familia

—Es mi hermana pequeña, tiene apenas 16 años y tú te cargas casi 21, tú no buscas una novia créeme lo sé, y a ella no, te lo dije

¿Están hablando de mi?

—Yo a ella la amo, no sé cómo, pero en tan poco tiempo ella se hizo querer, me enamoré de ella, déjame ser su novio prometo que la cuidaré, lo juro, no dejaré que nada la lastime

Pero que mierda esta diciendo.

—Es mi hermana

—Y por eso mismo déjame ser su novio, haz que ella acepte, la cuidaré y no dejaré que hable de ella ni nada, lo prometo.

—La llamaré, y le preguntaré, si ella se niega te irás de aquí hoy mismo

—No puedes hacer eso.

¿Qué?

—Eso o nada, decide

—Esta bien, llámala

—¡Jen! ¡Jen! ¡Jen! —llamó mi hermano.

—¿Sí? —respondí, caminé a paso lento como si recién hubiera despertado— ¿qué sucede?

—Necesito que me hagas un favor —pidió mi hermano

—¿Qué favor?

—Quiero que me contestes con la verdad a esta pregunta

—Claro

—¿A ti te gustaría ser la novia de Carlos?

No respondí al instante, me lo pensé, aquel chico había sido el único que ha estado para mi estos días como nunca nadie lo ha estado, a sido la única muestra de cariño y atención  que he tenido hasta ahora.

—Sí

Jamás pensé que tomar aquella decisión me traería problemas, muchos problemas.

30 de diciembre del 2021.

La pasé de lo más bien ese día, salí a comer con mi hermano, mi cuñada y Carlos, este día había sido único, jamás lo olvidaría, mañana ya es fin de año y por primera vez la pasaremos felices, mamá ya está mucho mejor que antes ya esta mas animada y se alimenta mejor y eso me alegra muchísimo, al menos algo nos esta yendo bien. Este 31 de diciembre será un día estupendo que jamás lo olvidaré.

Y tan así, de rápido como llegó la felicidad se fue.

Y tal cuál lo dije, el 31 de diciembre jamás lo olvidaré.

31 de diciembre del 2021.

Por ser 31 mamá y yo levantamos algo tarde, no sé, pero queríamos dormir bien aquel día.

Nos levantamos casi al medio día, mi cuñada me pidió que la acompañara a comprar ropa para esta noche, según Javier nos sacaría esta noche a una fiesta que celebraban y me llevaría, le pidió permiso a mamá y ella dijo que si pero que me cuidara.

—¿Qué quieres que te compre? Javier me dio dinero para comprarte una ropa para hoy en la noche —preguntó de pronto Dulce

—Oh, me parece bien ese que está ahí —señalé un conjunto de shorts y una mini blusa con chaqueta

—No, eso se ve muy, no sé, mejor usa algo que te valla bien con tu cuerpo

—Pero a mi me gusta ese —susurré para mi misma, mientras era jalada por Dulce hacia un conjunto de mini falda bastante corta con una mini blusilla igual de corta.