Prólogo

4 1 0
                                    

Marlena una chica italiana de 19 años iba caminando tranquilamente por el metro de París.
Lo siguiente mejor que lo cuente ella.

Marlena

A ver cómo lo cuento.
Yo estaba caminando tranquila por el andén del metro cuando de repente ¡¡PUM!! Me choqué con alguien, levanté la mirada y vi a un chico de mi edad más o menos, llevaba capucha y cascos, se me quedó mirando mal y aún por encima de no pedir perdón, no me ayudó a levantarme, simplemente se fue caminando.
De verdad como odio a los franceses.
Bueno no voy a contar lo que estuve haciendo, estuve en un curso de modelaje, comí, dormí e hice turismo por la ciudad (muy bonita por cierto)
Pero bua, vais a flipar con lo que pasó en el vuelo de vuelta a Italia.
Estaba tranqui en el avión leyendo un libro, más o menos a la mitad del vuelo  empecé a sentir que alguien me daba patadas en el asientos, al principio lo dejé pasar porque pensé que era un niño pequeño que se aburría, pero la curiosidad me mató y cuando miré para atrás me cagué hasta en saturno, era ese Francés inútil que se había chocado conmigo.
-¡Para!- dije bajo pero lo suficiente alto para que él me escuchara.
-¿Tú otra vez? Para de tocarme los huevos y cállate niñata- me respondió sin apenas mirarme a los ojos.

Y así nos conocimos...

EngreídoDonde viven las historias. Descúbrelo ahora