Me la paso nadando en mis pensamientos, una que otra vez me ahogo en ellos. Soy un mar de lágrimas, mar en el que nadie desea nadar, mis aguas son turbias, difíciles de andar, uno que otro navegante se extravía o se rinde en ellas.
Me gustaría pensar que hay un faro que me ilumina en las noches obscuras y difíciles, pero sólo está este mar de lágrimas.
Me gustaría pensar que soy tan admirable que no se atreven a nadar en mis olas, pero la verdad es que hay mares más lindos y tranquilos de atravesar, mares por los que vale la pena nadar.
Sé que me miran, sé que lo hacen, sé que me analizan, que me clasifican, también sé que lo último que se dice es que no vale la pena malgastar noches de navegación aquí, porque aquí es en donde nadie quiere estar.
Sigo en mi mar de lágrimas, intento disfrutar de la soledad, intento irradiar en ella, pero ésta me supera.
¿Seré yo por siempre un mar de lágrimas en el que nadie se quiere adentrar? ¿O tal vez soy yo que a nadie dejo navegar?
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Atípico de lo típico
PoetryNo soy de escribir historias, más bien soy de escritos, tal vez algún día explote mi creatividad en aquel campo, pero por los momentos me quedaré dentro de mi zona de confort. Página tras página encontrarán diversos escritos sin relación alguna entr...