my treasure

Capitulo 4

Ruohan no entendía del todo lo que pasaba con su sirena pero podría descifrarlo o simplemente preguntarle pero no esperaba esa respuesta "Quiere...hacerlo ¿aquí?" Fue lo que se pregunto al oír la razón por la que Qiren parecía desanimado y no es que no le agrade la idea, el también quiere hacerlo pero.... ¿Y si alguien los ve? El no estaba dispuesto a dejar que alguien más aparte de él pueda verlo en ese estado

Dejo que la sirena bajara de sus brazos para hacer desaparecer su cola y mostrar un par de piernas, largas, blancas y suaves, Qiren no mostró algo de vergüenza y se paro frente a el dejando ver todo su cuerpo desnudo, Ruohan y camino alrededor de el analizando cada rincón del cuerpo contrario mientras que su mano se deslizaba por la delgada cintura, Qiren se estremeció ante el suave toque dejando escapar un jadeo, fue cuestión de segundos para empezar a sentir como el calor de su cuerpo aumentaba y un dolor punzante se hiciera presente en su entrepierna, Ruohan notó esto y lo abrazo por detrás, sus manos bajaron por el pecho de su amante, rozando ligeramente sus dedos sobre los pequeños botones rosados en su pecho, el aliento cálido y la respiración de Ruohan bajaron por su cuello haciendo que se sonrojara profundamente, dejo salir un gemido cuando sintió los dedos de Ruohan, tomar su miembro el cual comenzaba a ponerse duro, la mano comenzó a moverse lentamente de arriba hacia abajo dando suaves tirones, solo a unos cuantos segundos ya estaba erecto y pudo sentir que el bulto entre las piernas de Ruohan crecía dándole a entender que también estaba en la misma situación, se giro enfrentando a Ruohan, sus cuerpos estaban apegados el uno con el otro, sus respiraciónes era algo agitadas, la pelvis de Qiren rozo el miembro de Ruohan y comenzó a frotarse en este y algunos escalofríos recorrieron su columna vertebral por la sensación

Ruohan aun no era experto en el tema pero ya tenia ciertos conocimientos sobre este, llevo sus dedos a la boca de su amante haciendo que los humedeciera con su saliva, Qiren jugo con su lengua entre los dedos y gimió en protesta al sentir como se alejaban de su boca para llevarlos a su cavidad, aun estaban al aire libre por lo que tuvieron que hacerlo en unos matorrales, Ruohan lo acostó en el suelo mientras que sus dedos comenzaban a embestirlo, la presión que sintió en su entrepierna comenzaba a ser molesta y dolorosa por lo que decidió que era hora de entrar, Qiren se sujeto sobre los hombros contrarios y apretó de estos al sentir como entraba, el par dedos no se compraban en nada con el tamaño y el largo de su miembro, era doloroso y placentero, sus ojos brillaron y un gemido fuerte salió al sentir como aquel "vacío" que sentía desapareció, Ruohan lo sujeto con fuerza de las caderas -Te voy a llenar tanto que no volverás a sentirte vacío- como si se le hubieran formado corazones en los ojos, asintió con emoción, Ruohan empezó con las embestidas fuertes y profundas, tanto que Qiren no podía evitar gemir con fuerza, se sentía demasiado bien, demasiado bueno, comenzaban a salir lágrimas de placer en sus ojos, comenzó a sentir como sus caderas dolían y no pudo evitar sonreír de satisfacción al sentir como el semen de su amante lo llenaba por completo dejando que algunos rastros del mismo se deslizaran sobre sus muslos

Pero aun no acababa, Ruohan le dio la vuelta colocándolo en cuatro piernas, una vez más comenzó a embestirlo con fuerza y profundidad mientras comenzaba a dejar algunos besos sobre su espalda y una ves más fue llenado, cuando por fin ambos se liberaron decidieron volver, Ruohan tuvo que cargarlo ya que sus piernas temblaban por la adrenalina y sus caderas le dolían, también tuvo que cubrirlo con su camisa para evitar que vean su estado

Cuando volvieron al barco, muchos de su tripulación lo miraron asombrados y no, no les asombraba que su capitán tenga gusto por los hombres, les asombraba lo fuerte que debía ser el capitán para dejar al otro en tal estado que no pueda si quiera caminar, algunos no le tomaron mucha importancia y solo siguieron las ordenes del capitán para volver a navegar

Ruohan se llevo a Qiren a su habitación quien estaban apartada del resto y daba una vista impresionante al mar y el hermoso atardecer, Qiren empezó a disfrutar de la vista y Ruohan por tercera vez comenzó a embestirlo, ambos trataban de ser lo más silenciosos pero el placer era incontrolable y el calor de sus cuerpo era inmenso, tenían rastros de sudor y semen por todo el cuerpo...

Desde que empezaron a viajar juntos por los mares la vida era mejor, se dio cuenta de que Ruohan era una bestia insasiable que si por el fuera tendría sexo todo el día todos los días y no podía quejarse, ¿Por que? Porque el también disfrutaba demasiado pero al menos tendrían que controlarse o de lo contrario Ruohan lo dejara por más de una semana en cama

~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~

Ruohan y Qiren ya tenían 10 años juntos, a pesar de que los años pasaron ellos siguieron amándose como un par de adolescentes, eso le recordaba que tenía que volver a la ciudad sin noche por sus "sobrinos" cuando llegaron casi nada había cambiado, las calles seguían tal como las recordaba, sólo esperaba encontrarse con aquellos niños, Ruohan esperaba que se encontraran bien

- ¡¡Tío Wen!!
- ¡¡Tío Wen!!

Un par de voces llamaron a sus espaldas y por el nombre ya suponía de quien se trataba, eran A-Ning y A-Xian, estaban más grandes de lo que recordaba oh y atrás de ellos estaba A-Qing con su típico ceño fruncido el cual desapareció poco a poco y se mostró una sonrisa en sus labios -Cumpliste tu promesa- dijo con una voz suave y Ruohan le despeino el cabello

- Yo nunca rompo mis promesas, por cierto les presento a mi esposo, Lan Qiren, pueden decirle tío Qiren- los más pequeños miraron fascinados y sonrieron

- Mucho gusto, Tío Qiren- Dijo A-Xian mientras sonreía y A-Ning imito sus acciones dando una saludo -Tio Wen, estamos listos para ser parte de tu tripulación-

- Oh, por lo que veo tienes razón, ya tienen la edad suficiente para...

- Yo también me uniré a ustedes- la voz algo temblorosa de A-Qing llamo la atención de los presentes y los mismos sonrieron

- Bien, creo que tendremos nuevos tripulantes

Después de aquel reencuentro, los tres jóvenes adoptaron el apellido Wen, entrenaban algunas técnicas de combate con Zhuliu y aprendieron sobre medicina

Muchos pensarían que solo son una tripulación que se llevan una buena relación de amistad, pero Ruohan veía una familia, tenía un hermoso y amable esposa y tres niños a los cuales empezó a criarlos como sus propios hijos y Zhuliu que más que un amigo era como un hermano, ese era su más grande tesoro

Extra

Wen Wuxian se perdió en los Recesos de las Nubes, Ruohan y Qiren sabían como terminaría esto, dejaron que el joven siga su paseo, quizás y con suerte encuentre una sirena de cola azul

-¿Quien eres tu?- pregunto una voz fría y una par de ojos dorados lo miraba desde un rincón, extrañamente los ojos dorados le recordaron al tío Qiren...