❝No olvides que siempre hay una oportunidad para hacer las
cosas mejor.❞──¡¡MARÍA!!
Exaltado, Shadow abrió sus ojos y se alzó de su cama de golpe, el frío sudor corriendo por su frente de manera desenfrenada. Le tomó tiempo darse cuenta que simplemente era una pesadilla. La misma pesadilla que lo tenía atormentado por las noches.
El erizo colocó una mano sobre su pecho para revisar el pulso de su corazón: se encontraba agitado, muy agitado. Cerró sus ojos e hizo varios ejercicios de relajación que había practicado en varias ocasiones: inhala, exhala, inhala, exhala... En cuanto su respiración se suavizó, dirigió su atención a su lado izquierdo para observar a su esposa, la cual aún se encontraba dormida a su lado.
Con solo verla le fue suficiente para darse cuenta que todo estaba bien, que él estaba bien, y nada malo había sucedido. Así que dio un pequeño bostezo y acarició la mejilla de la mujer.
Ahora, su misión era ir a comer algunos granos de café en la cocina para controlar la ansiedad, y tal vez volver a trabajar con su papeleo: cortesía de G.U.N.
Shadow vagamente se alzó de la cama y salió del cuarto silenciosamente con la intención de dejar a su mujer sumida en sus sueños. Al bajar por las escaleras, fue directamente en busca de la bolsa de granos entre los cabinetes y afortunadamente encontró uno facilmente entre dos cajas de cereales. Sacó uno y masticó el grano sólido, sintiendo el sabor amargo expandir por su lengua.
Su mente divagó por aquella pesadilla. «¿Por qué siempre tengo que recordarla de esa manera...?», pensó desanimado, guardando los granos en su lugar correspondiente. ¿Era acaso la única memoria de ella?
No, claro que no. Tenía varios recuerdos lindos con ella, tan lindos que incluso le ganaban a cualquier gema preciosa. Ella era la más preciosa de todas.
Justo cuando iba a ir a su oficina, la luz de la cocina se encendió, captando la atención del erizo.
Una [animal] se encontraba cruzada de brazos, y si no fuera por la mesa que los separaba, ya hubiera ido ella a ahorcarlo.
──¿Qué son estas horas para estar despierto, Shadow?
El erizo bajó su mirada desanimado, dando a entender su respuesta con su lenguaje corporal. [Nombre] suavizó su mirada al notar aquello, dejando caer sus brazos a su lado.
──¿La misma pesadilla? ──Shadow sólo asintió.
La [animal] suspiró y se acercó a su esposo, pasando sus manos sobre las mejillas de su piel morena.
──Estás cansado, he notado eso ──Mencionó la chica, mirando discretamente el escritorio de la sala lleno de papeles y carpetas.
Shadow achicó sus ojos y acarició su mano, desviando la mirada apresurado.
──Sólo es...trabajo extra, es todo.
──¿Qué tal si te tomas el dia libre? ──Sugirió con una sonrisa calmante──. Has trabajado duro para mantener este hogar.
(T/N) sujetó sus manos y lo guió hacia la sala, apuntando con su mirada el sillón.
──Siéntate.
Shadow hizo caso omiso y se tiró, dejando caer todo su peso en el asiento. Dejó caer sus parpados cansados, confiando en las palabras de su esposa.
──Calentaré la pizza de ayer. ¿Cuántos pedazos quieres? ──Habló la fémina desde la cocina.
Shadow seguía descansando tranquilamente en el sillón.
──Sólo tres.
Un rato después y la casa se inundó del salado aroma de la pizza de pepperoni, captando la atención del estómago del erizo. [Nombre] llegó a la sala con un plato llenó de pizza recién calentada y la dejó en el escritorio, haciendo de lado los varios papeles en él.
──Ten amor. Veamos una pelicula, ¿te parece? ──Sugirió la [animal] mientras agarraba el control remoto.
Shadow asintió y su esposa se dispuso a buscar un canal que mostrara una película interesante.
Dejó puesto el canal con una película de acción y romance. La chica se acurrucó a lado de su esposo, quien masticaba lentamente de su pizza.
[Nombre] descansó su cabeza sobre el hombro del contrario, mirándolo con ojos soñadores.
──¿Te gusta?
Shadow sonrió ligeramente y pasó un brazo sobre su hombro.
──Sí, te lo agradezco.
Se miraron entre sí por un momento, sus ojos llenos de pasión; aún estando casados por 16 años, ese amor entre ellos aún no había esfumado.
Shadow dejó su plato en el escritorio, ignorando la película. Era sólo sonido de fondo, pues lo que ahora cautivó su interés era su esposa. ¿Cómo podía concentrarse en la película si el verdadero arte estaba frente a sus ojos?
Pasó su mano sobre su barbilla, obligándola a mirarle los ojos. [Nombre] se ruborizó tiernamente y sonrió ante esa acción diminuta; lo que más amaba de su esposo eran sus bellos ojos rojizos, tan intensos y llenos de pasión.
Ambos se acercaron lentamente, sus narizes rozando unidas hasta que juntaron sus labios en un tierno beso lleno de amor. Shadow pasó su mano por su cuello para profundizar el beso, mientras que la [animal] sujetaba sus mejillas con cariño.
Minutos después se separaron, juntando sus frentes en muestra de cariño. [Nombre] abrió sus ojos y rió ligeramente.
──Sabes a pizza; me gusta.
Shadow se sonrojó y sonrió enamorado. Amaba ese lado extraño de su esposa.
La chica acarició su mejilla, brindando otro beso a su nariz.
──Te amo, y no te preocupes; yo siempre estaré ahí cuando lo necesites.
La tensión de sus hombros se esfumó por completo, y Shadow miró con ojos enternecidos a su pareja.
──Lo sé.
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[749 palabras]
《Editado: [908 palabras]》
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𝙋𝙄𝙕𝙕𝘼╰┈➤ 𝙎𝙃𝘼𝘿𝙊𝙒
FanfictionShadow volvió a tener una pesadilla, ¿y qué mejor que animarlo con su comida favorita?