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Aveces tenemos que ver el otro lado de la moneda para entender.... No todo es como se cuenta y siempre el qué gana la batalla es quien escribe la historia. Azael miraba a su jefe irse dejando ahí al pobre señor Gator qué sangraba. Incluso el pensaba que no podía ser tan hijo de puta ese hombre, sin embargo aun tenia un poco de humanidad. Saco un celular y marco a la policía diciendo que había visto como querían matar a un hombre y que lo habían metido al cementerio. Le dieron la afirmativa qué irían y colgó saliendo Rápidamente del lugar para ver que su jefe ya se había ido.

Todavía recordaba por que había echo eso... Aun sabia por que estaba por parte de ese hombre... Aquello lo mantenía en ese bando. El sabia de propia cuenta que Gator era horrible, no se merecía ni un poco de cariño por parte de él.

Azael: {ojalá mueras desangrado.....ni siquiera debí llamar una patrulla ....}

Azael subió a su auto para comenzar a manejar. Las calles estaban vacías y había comenzado a lloviznar. Se detuvo cuando el semáforo se puso en rojo y saco de la guantera un bote de pastilla controladas. Saco una y la tomo. Vio la hora en la pantalla de su carro
Eran las 7:15 PM suspiro pesadamente, había tomado sus antidepresivos una hora antes de lo debido. Pero ver a ese hombre le había dejado muy mal sabor de boca.

Para el el señor Gator era peor que escoria. El semáforo se puso nuevamente en verde y arranco para después de unos minutos llegar a la empresa. Aun era temprano pero ya no había nadie importante pues estaban ocupados con lo de Montgomery y seguramente pronto con lo de el señor Gator. Avanzó asta el elevador subiendo asta el último piso. Salio de este y camino sin prisas asta la oficina de Gator. Entro y vio a su hijo, sonrió al ver que si había echo lo que le pidió.

Chip: lo logre padre, copie todo en este disco. Ya podemos irnos.

Azael: primero limpia todo.

Chip: use guantes. Y ya limpie, vámonos

Azael tomo el disco y salió junto con su hijo. Sin embargo el decidió quédarse en su oficina un poco más y simplemente dejo a su hijo qué sé fuera en el auto el tomaría un taxi. Entro a su oficina y se sentó en su lugar. Tomo un poco de whisky, quería convencerce de que todavía podía con lo que le pedía su jefe pero simplemente seguía siempre cuestionando se si estaba haciendo lo correcto. Comenzó a recordar las palabras que siempre le decía su jefe y padre adoptivo... "No existen blancos y negros, solo son grises, Azael nadie es bueno ni malo así que nunca tengas culpa de lo que haces".

Azael: si solo fuera tan fácil....

Ya habían pasado años y ahora que por fin estaba dando frutos su venganza ya había calmado un poco de su odio, pensó que viendo sufrir a ese infeliz estaría bien pero a pesar de todo no se había sentido mejor en lo más mínimo. Tomo de nuevo más alcohol recordando su pasado.

Padres abusivos. Su madre fue una mujer bastante dura en toda su infancia y su padre el. Bueno el era ausente. Azael caminaba en su oficina pensativo de si realmente seguir el plan, si lo asía sería igual de mierda qué el señor Gator, estaba seguro que una vez echo no había vuelta atrás. Su oficina quedo sola cuando salio de esta, regreso a la oficina de Gator y miro todo. Cada foto, cada lugar, asta que encontró la foto de la "feliz familia".

Azael: si tan solo no hubieras echo las cosas mal..... Si soy así es por tu culpa... Mi madre no era culpable... Ella... Ella no se hubiera suicidado....

Azael llevo sus manos a su cabello haciéndolo para atrás, se rindió y salió del lugar. Entro al elevador mientras veía su reflejo en las paredes de este, estaba dudando seriamente la decicion de su padre adoptivo y aunque quisiera negarlo aun le causaba cierta preocupación el señor Gator. Tiempo después bajo del elevador, ya no había nadie, caminaba tranquilamente por el lugar asta el elevador del estacionamiento y una vez llego a este su celular sonó fuertemente.

𝓛𝓾𝓷𝓪 𝓭𝓮 𝓸𝓻𝓸 ☾Donde viven las historias. Descúbrelo ahora