- Capitulo 1 -

319 39 19
                                    


Existen personas que ocultamos sentimientos, algunas otras que ocultan emociones y secretos solo con el fin de evitar que los demás lo noten, somos personas que buscamos esconder un sentimiento para permanecer con un ego alto, para evitar el rechazo social, somos personas que simplemente quieren convencerse de que ese sentimiento no está allí. Al final del día, son simples sentimientos, pero, qué pasa con las personas que realmente ocultan algo porque temen a ello? Tal y como, un trauma, una infancia de mierda, un recuerdo que nos lastima día con día, que es lo qué pasa con esas personas?, realmente pueden convencerse a sí mismas que ese trauma no está allí? pueden olvidarse tan fácil de ese recuerdo?, es una pregunta difícil de responder, a menos que seas quien esconde ese trauma.

Alguna vez escuchaste el "La infancia es la etapa más importante en la vida"?, bueno, ahora podría darte una larga explicación de él porque esto es cierto, pero solo hace falta decir una palabra, palabra que describe a todo ser humano, sin importar su raza, círculo social, edad o sexualidad, es una palabra que sin importar quien seas, te va a definir, es una característica que todo humano posee; algunos de manera más notoria y otros, apenas se les nota. Pero esta ahi, está marcando su existencia, recordándote diariamente o una vez al año que existe.

Debilidad, habrás escuchado acerca de ella. Un sentimiento que se genera desde una edad temprana, en donde todo parece un juego pero con el paso del tiempo ya no lo es. Ahora puedo decirte lo débil que eres, puedo decirte que probablemente te afecte el comentario de esa chica que conociste hace 5 minutos en la fila de Walmart, o tal vez no te importe un carajo lo que esta diga, sin embargo, sin importar quien seas, ese comentario de "Como puedes ponerte eso? te vez mal" en cualquier momento pasará por tu cabeza, pero, no te preocupes, es algo que todo ser humano en esta tierra siente. Todos tuvimos infancia, una muy bonita, o una muy horrible, y con esto, puedo decirte que eres en lo que te convirtió tu yo de 7 años.

Y ese sentimiento de debilidad ahora nos lleva al principio de la historia, donde podría poner una aburrida y compleja introducción sobre el mundo que alguna vez existió, sobre él como los polos opuestos se atraen o sobre él como la debilidad se hace presente día con día. Pero voy a saltarme esa parte, de cualquier forma, se irá desarrollando sola en el transcurso de la misma. Nos lleva al presente, nuestro hoy y ahora, donde un par de chicos gritaban desesperados anhelando que alguien ayudara a su amigo, quien estaba siendo golpeado por Lee Minho, un chico de veintitrés años con cabello castaño, relativamente alto y con una mirada escalofriante, cómo se mencionó, se encontraba apuñalando a un chico por haberlo retado.

No era la primera vez que estaba en esta posición, de hecho, Minho solía estar en peleas callejeras todo el tiempo, después de todo, era gracioso ver él como esos estupidos se arrepentían de haberse metido con el, era divertido hasta que algún estupido decidía llamar a la policia por lo que este tenía que huir. Ahí estaba Minho, caminando por la calle esperando que nadie se atravesara por su camino, no quería pelear una vez más y después salir huyendo.

Y tan solo a unas calles de ahí, se encontraba Han Jisung, un chico medianamente bajo, con cabello claro y mejillas de ardilla, quien estaba caminando por las calles disfrutando de un buen momento con sus mejores amigos, quienes reían a carcajadas debido a que uno de ellos se había caído.

Estaban teniendo un buen momento, entre risas, carcajadas y uno que otro golpe suave, realmente estaban en un buen momento, Bangchan, el mayor del grupo le dio un suave empujón a Jeongin; el menor del grupo, quien sin darse cuenta empujó a un chico que venía caminando hacia la dirección contraria a ellos, haciendo que se golpeara, era un chico alto y bastante atractivo, quien sostenía un cigarrillo en su mano izquierda. El grupo de amigos paro de reírse ante el incidente y solo se miraban uno al otro esperando que alguno dijera algo.

— Lo siento mucho. — Dijo el menor haciendo una leve reverencia.

— Idiota, crees que tus disculpas solucionarán esto?. — Dijo el más alto señalando su chaqueta de cuero rasgada.

El grupo de amigos se tensó al darse cuenta que la chaqueta del contrario estaba rasgada, y peor aún, este no parecía de buen carácter.

— Te estoy hablando, idiota. — Dijo el castaño con un tono bastante fuerte, esperaba que el menor respondiera pero este solo se mantenía callado y con la cabeza abajo.

— Lo siento mucho. — Volvió a repetir el menor esperando que el contrario lo dejara de mirar, su mirada era escalofriante.

— Agh, enserio eres un idiota, no aras más que disculparte?, no necesito tus miserables disculpas. — Dijo el castaño acercándose lentamente a el menor, quien solo daba leves pasos hacia atrás esperando que en cualquier momento el puño del contrario se posara en su cara.

— No queremos problemas. — Dijo el chico con mejillas de ardilla esperando que el contrario se alejara de su amigo.

— Te pagare. — Dijo el antes mencionado para intentar solucionar el problema.

— Si, te pagaré, lo juro. — Dijo el menor muerto de miedo, puesto que el castaño no tenía un buen carácter.

— Entonces, cuanto me darás?, tendré que comprar una nueva por culpa de el imbecil de tu amigo. — Dijo el castaño mirando fijamente al chico con mejillas de ardilla.

— Bueno, ahora no tengo el dinero suficiente, pero, puedo dejarte mi reloj como garantía de que te pagaré. — Dijo Jisung anhelando que este aceptara.

El castaño miró el reloj y se dio cuenta que este era bastante caro, podía vender este y comprar treinta chaquetas nuevas.

— Está bien. — Dijo el alto mientras Jisung se quitaba su reloj, un accesorio que por cierto era muy preciado para el.

— Toma, por favor cuídalo bien, te pagaré pronto. — Dijo Jisung riendo leve mientras daba pequeños pasos indicando que se iba.

— Oye ardilla!. — Dijo el alto alzando un poco la voz a lo que el contrario giró un poco la cabeza.

— Como piensas contactarme?, o a caso me buscaras por toda la ciudad?. — Dijo el castaño con una leve risa.

— Oh, es cierto, puedes darme tu número?. — Dijo Jisung mientras regresaba un poco y le entregaba su teléfono al contrario, un tanto apenado.

— Envíame un mensaje cuando tengas el dinero, te regresare tu reloj tan preciado, ardillita. — Dijo el alto mientras se alejaba riendo levemente.

— Ey! Cual es tu nombre?. — Dijo Jisung gritando un poco ya que el contrario se había alejado.

— Minho!. — Respondió el castaño girando levemente la cabeza mientras seguía alejándose.

 — Respondió el castaño girando levemente la cabeza mientras seguía alejándose

¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.
Astronomy - [Minsung]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora