La pequeña melena rizada se paseaba por la casa con su gorra blanca y azul hacia atrás, su camisa de manga corta y pantalones de los mismos arrastrándose por el suelo"¡Papiiiiii!" Gritó el niño. Corriendo hasta la cocina y tirando del pantalón de su padre.
"Ey ey ey." Dijo Harry, cogiendo a su hijo en brazos, Louis apareciendo por detrás con una sonrisa. "Alex, ¿Te has lavado las manos?"
El niño clavó sus iris en Louis mientras un pequeño puchero aprecia en sus labios. Harry besando su frente mientras lo dejaba en la silla de la cocina.
Louis le quitó la gorra mientras se la ponía el mismo. Harry negando mientras dejaba un suave beso en sus labios.
"Iugh. Qué asco." Protestó el niño. Louis rió mientras le daba un beso a su hijo.
"¿Al final viene Florence a comer?" Preguntó Louis.
Harry solamente asintió mientras echaba la comida a la sartén, removiendo la verdura con la otra mano.
"Papi Harry y papá Louis, ¿Viene mama Flo a comer?" Preguntó el niño de ojos saltones. Mirando a Louis, quien este le volvía a poner la gorra hacia atrás a su hijo.
Hace dos años que Harry y Louis acabaron con la escuela de baile, decidiendo volver a casa con sus amigos.
A Harry en su último año de baile su rodilla le había estado dando demasiados problemas, decidiendo por él mismo darse un descanso del baile.
Hizo el último esfuerzo el último año. Miles de ojeadores querían a Harry, lo querían para hacerle su bailarín, para llevarlo alrededor del mundo, pero al final Harry lo que quería era llegar al cuarto y acurrucarse con Louis.
Cuando acabaron ambos, cogieron el primer vuelo de vuelta a casa, siendo recibidos por sus amigos y por lágrimas.
La relación de Harry y Louis no había hecho más que mejorar. Pasaron malas épocas, la madre de Harry había enfermado a finales del segundo año y a principios del cuarto había fallecido. Louis estuvo ahí en todo momento.
Harry decidió quedarse la casa de su madre, la casa donde su madre había formado su familia, solo que esta vez sería Harry quien la formaría, reformándola, pintando la paredes y dejando un cuarto libre para un futuro.
Louis estuvo en todo momento con él. Nunca le soltó la mano, se la apretaba durante el sexo, la besaba cuando cocinaban y la cogía cuando caminaban por la calle.
Fue una noche cuando Harry volvía de trabajar (había conseguido ser profesor de baile en un colegio público, donde Louis también trabaja como profesor de música), cuando nada mas entrar vio pétalos por el suelo.
Sonrió mientras llamaba a Louis, el cual no contestaba. Dejó su bolsa en el perchero de la entrada, junto a su chaqueta y siguió el rastro hasta el porche de la casa.
Louis estaba ahí, con un ramo de girasoles, de seis girasoles, vestido de traje y una sonrisa en sus labios.
Ese día Louis le pidió a Harry que se casara con él y todo el vecindario escuchó la respuesta de Harry. Quien también se había encargado de hacer gritar a Louis en la cama como recompensa.
Dos años después de que se hubieran casado fue cuando hablaron con Florence.
"¿Queréis que lleve a vuestro hijo durante nueve meses?" Preguntó Florence, algo sorprendida.
"Eres la única persona en la que confiamos y obviamente tendrías contacto con el niño, al fin y al cabo si aceptas serás tú quien lo lleve. Pagaremos todo nosotros y haremos todo el papeleo nosotros." Louis hizo una pausa, acariciando la mano de Harry cuando este dejó un breve te quiero encima de la palma de su mano. "Antes de firmar nada te lo enseñaríamos a ti, obviamente."
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Tempting, asshole and irresistibly beautiful (Larry Stylinson)
FanfictionLouis acarició su nariz en el cuello del menor, empujando su cadera hacia la de él, su entrepierna creando fricción con la suya. "Sigo odiandote" Suspiró. Su aliento chocando con los labios del chico de enfrente. "Eres... despiadado y una persona de...