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Estaba caminando hacia la tienda de Fez, ¿Por qué? Pues llevaba dos días encerrada con un bajón de la hostia y estaba aburrida, asi que iba a comprar algo de hierva, hasta que me encontré a Rue en el camino. ¿Esta mujer no estaba en rehabilitación?

– ¡RueRue! – le grité a la de rizos.

Ella se paró en seco y se giró atrás con cara de susto. Cuando se dio cuenta de que era yo corrí hacia ella y me abrió los brazos para tirarme a ella y abrazarla

– ¿Qué hay Bibi? – dijo Rue

– ¿Cómo que qué hay? ¿Tú sabes el susto que nos diste a todos mamarracha? Me alegro de que estés viva – dije volviendola a abrazar.

– Bueno a lo mejor estoy muerta y estás viendo un fantasma con mi cara. – dijo sarcástica

– Ya empezamos, tu sarcasmo indica que estás bien– dije riéndome

– Vivita y coleando.

– Te he echado mucho de menos por aquí guapa.

– Y yo a ti Babi, echaba de menos ver esa cara de mierda que me llevas.

– Eres tontisima, y dime, ¿A dónde vas? – dije mientras comenzábamos a caminar.

–A donde Fez

– Bro, literalmente acabas de salir de esa mierda y ¿ya vas a pillar drogas? – dije algo triste

– Solo quiero despejarme un rato, además, si tu no te metes con mis drogas yo no me meto con las tuyas, que fijo que vas al mismo sitio que yo – me contestó.

– Pues también es verdad, pero ten cuidado porfi. Si te da otro chungo al menos invita zorra.

– Tomo nota –dijo riéndose

Seguimos caminando cinco minutos hablando de cosas tribiales y poniéndonos un poco al día hasta que llegamos a la tienda.
Fez estaba sentado afuera fumando viendonos llegar.

– Mi pelado favorito, hola – dije contenta mientras chocabamos los puños.

– ¿Qué hay chicas? Se te echaba de menos por aqui Bibi – nos saludó

– Ya, lo siento, tuve una crisis existencial y he estado varios días sin salir de casa. Bueno, yo voy a entrar donde Ash, aquí os dejo

Entré a la tienda y fui directa hasta la nevera. Una vez dentro vi al mini pelado con tatuajes.

– Ey – saludé, Ash solo me miro con su habitual cara de culo y movió la cabeza en forma de saludo.

– Tan encantador como siempre, ¿me das cinco gramos de hierva?

Mientras cogía lo mío me dediqué a intentar sacar tema de conversación y observarle, es precioso joder.

– Y ¿qué tal has estado Ash? – dije sonriéndole.

– Bien, estos dos días sin ti por aquí rondando han sido muy tranquilos. – contestó mirándome – Toma, 25 pavos.

– Me dueles mini pelado. – dije dandole el dinero haciendome la dolida.

– Que no me llames así – me gritó mientras salía por la puerta. Yo solo me dediqué a sacarle el dedo.

Una vez cerré la nevera me apoyé en esta pensando en esa mini conversación. Hace tiempo que me atrae Ashtray, algo ilógico porque nunca hemos hablado mucho y normalmente son todo movidas entre nosotros. Creo que desde el primer día que vine aqui con Rue a pillar droga quede flechada por este tipo y su cara de mala leche. Siempre he deseado llevarme más con él y poder conocerle, pero él no se deja y yo no sé como sacarle más tema de conversación. En cambio con Fez fue todo más natural y rápido, es una persona muy amable para ser narco y desde el minuto uno ya me tuvo en su tienda dándole el coñazo, aunque sé que para él no soy una molestia, es más, somos como hermanos.

𝘊𝘖𝘍𝘍𝘌𝘌 - 𝘼𝙨𝙝𝙩𝙧𝙖𝙮Donde viven las historias. Descúbrelo ahora