Dos gemelos separados al nacer, vivieron vidas paralelas marcadas por la oscuridad. Su destino los llevó por caminos de dolor, sufrimiento y pérdida, sin conocer su conexión profunda.
La separación inicial desencadenó una cadena de tragedias.
En la...
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Mi vida se desmoronó en un instante cuando la crueldad me arrebató a las personas que más amaba, destruyendo mi mundo de manera implacable. Recuerdo que tenía dieciséis años cuando todo cambió.
El dolor y la ira me consumieron hasta convertirme en un hombre frío y sin escrúpulos. Dejé de lado mis pasiones y mis sueños para ascender en las filas de la organización criminal más poderosa de Corea del Sur.
Me convertí en su líder y me hice un nombre, pero eso no me trajo paz. Cada noche, me despertaba con el recuerdo de mis padres, asesinados de manera brutal. Y cada día, me consumía la sed de venganza, la búsqueda incansable del bastardo que me arrebató todo.
Mi hermanito... nunca pude verlo crecer. Y ese pensamiento me destroza por dentro, me impulsa a seguir adelante y no rendirme. Pero el precio que pagué fue alto. Me perdí a mí mismo en el proceso, y ahora solo queda un hombre consumido por la oscuridad y la venganza.
Con un movimiento deliberado, tracé un corte en la palma de mi mano con el filo de la hoja, lo suficientemente largo y profundo para que la sangre comience a manar. Choi, el lugarteniente de mi padre, recibió el arma cortante sin apartar sus ojos fríos de la multitud que esperaba frente a nosotros.
Esta noche marcaba un punto de inflexión en mi vida. Haría mi juramento frente a la organización, todos ellos estaban satisfechos con el regalo que les había traído: la cabeza del líder de la mafia enemiga.
A partir de este momento, sería el dueño absoluto de sus vidas. Impondría un camino de crueldad y miseria a mis enemigos, me regodearía en su sangre, saciando el vacío que sentía dentro. La sed de venganza y poder me consumía, y estaba listo para hacer cualquier cosa para mantener mi posición.
La multitud esperaba con ansia mi juramento, yo estaba listo para darles un espectáculo que nunca olvidarían. La multitud seguia sumergida en silencio, mientras yo sonreía, sabiendo que mi reinado de terror apenas comienza.
Me pedirán clemencia.
Jeon Jungkook será el nombre que resuene en los confines del mundo, un nombre que evocara temor y terror en aquellos que lo escuchen. Porque soy la "Muerte" que ha emergido de las profundidades del infierno, con una hambre insaciable por almas perdidas.
Y no descansará hasta que posea el último aliento de mis enemigos, hasta que su espíritu se rinda a mi voluntad. La oscuridad se extenderá detrás de mí, y mi nombre se convertiría en sinónimo de miedo y destrucción.
_ ¡Juro lealtad a la organización que me vio nacer y se ha mantenido en pie por muchos años.
Aprieto el puño, sintiendo la tensión en mis músculos y la sangre fresca que comienza a deslizarse por el tatuaje recién hecho en mi hombro derecho, un símbolo de mi nuevo estatus y mi juramento de lealtad a la oscuridad.
_ ¡Juro lealtad a mi familia, prometo hacer de este imperio una dinastía que lleve en el alto el apellido Jeon!.
Aquel que osa profanar mi territorio con su presencia, será aniquilado, aquel que intente lastimar a los míos, será castigado con la muerte. Porque yo, soy la encarnación de la misma muerte, y nadie puede vencerme.
Mi visión es forjar un imperio que trascienda los siglos, una dinastía que sea recordada con temor y respeto. Y para lograrlo, debo comenzar con la destrucción de mi más grande enemigo, el que se atreve a desafiar mi autoridad y cuestionar mi poder.
Kim Taehyung.
Su caída será el primer paso hacia la gloria, y el mundo pronto aprenderá a temblar ante mi nombre.
Vale-vhopekook.
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