3. Represión

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Tengo miedo, tengo mucho miedo. Estoy escondida detrás de un mueble, no podrían verme, no sin que miraran con especial cuidado. No puedo tranquilizarme, todo paso tan rápido, los perros ladrando, la voz que se acercaba esa voz, después llego el caos, los gritos de mis padres, el brillo de un hacha a la luz de la luna, la sangre toda la sangre y el terror.

No sé cómo logre escapar, corrí y me escondí, no puedo escuchar nada, todo esta tan silencioso ¡OH POR DIOS! ¡MIS PADRES! ¿Qué hare ahora? ¿Sera seguro salir? Todo me abrumo, comienzo a llorar y temblar, me rodeo con los brazos como si eso detuviera el temblor. Debo calmarme, me encontrara si me escucha.

Hay pasos fuera de la casa, la puerta se abre más pasos y un grito, los pasos se vuelven más rápidos y de pronto está corriendo, sigue gritando, un nombre, la voz está llamando a alguien. Llego hasta donde yo estoy.

- ¿Mary? – dijo la voz desesperadamente. Era mi hermana, se suponía que vendría de visita, lo había olvidado.

No logro contestar, estoy demasiado afectada, pero mi llanto es lo suficientemente fuerte para que pueda encontrarme, se arrodillo y me abrazo, al verme cubierta de sangre me checo pero la sangre no era mía.

- ¿Qué paso? ¿Quién hizo esto? – al notar que no podía responderle se puso de pie. – Tranquila, llamare a la policía.

Mi hermana se alejó, se dirigía a donde estaba el teléfono, salí de detrás del mueble a gatas, aun temblando me puse de pie y lentamente fui donde estaban mis padres, sus cuerpos estaban tan destrozados y el hacha estaba en el suelo. Me acerque aún más, sabiendo que una mejor visión no me ayudaría a tranquilizarme, me agache e intente tomar el hacha, toque un poco el filo y me corte en la palma de la mano. La sangre no fue lo único que fluyo con rapidez, también algunos recuerdos que el miedo había reprimido, mis padres huyendo y yo levantando el hacha contra ellos. Al fondo escuche a mi hermana tratando de comunicarse con la policía, la voz volvió No puedes permitirlo, tenía que hacer algo, Ella lo arruinara todo, tome el hacha con firmeza y camine hasta donde estaba mi hermana.

Un golpe y todo termino Bueno, ahora escóndete pequeña, llora y espera.

Cuentos sobre mi monstruosa humanidadDonde viven las historias. Descúbrelo ahora