Tienes mi cabeza dando vueltas, y mi corazón latiendo tan rápido que ya no lo siento.
Cierro los ojos y te imagino ahí, solo tu y yo detrás del cerrojo de una puerta en un baño público.
Solo quiero un beso no pienses tan mal de mi, escondo mis manos detrás de mi, y te veo acercarte como si pudieras leer mi mente.
Se me escapa un suspiro y mis ojos solo pueden mirarte, me quedo hipnotizada por tus labios y es allí cuando noto.
Estás mordiendo tu labio inferior, tal vez sea la señal de que tú también quieres ese beso y también viste que está es la oportunidad perfecta, tal vez no es el sitio más romántico pero es una oportunidad...
Por una milésima de segundo mis ojos se encuentran con los tuyos y tú mirada está nublada, me siento como un platillo gourmet del mejor restaurante del mundo a punto de ser devorado...
Te detienes a pocos centímetros de mi, tu exhalas y yo respiro tu aire, siento como mi cuerpo empieza a temblar. Te tengo tan cerca que simplemente mis manos sin hacerme caso toman tu rostro, te miro una vez más buscando algún rastro de disconformidad pero eres tú quien cierra ese espacio entre tu boca y la mía.
Comienzo a sentir la energía de mil anguilas, aun asi no me muevo, tu boca es muy dulce, puedo vivir aquí si me lo permites. Pienso dentro de mi.
No sé cuánto tiempo ha pasado. Pero me encanta la sensación, inevitable sentir calor. Comienzan a tocar la puerta y a pedir que la desbloqueen.
Al parecer alguien muy inoportuno tiene una emergencia. En contra de mi voluntad me separó y grito "un segundo".
Mis manos bajan buscando sentir tu corazón en el pecho y podría jurar que se sincronizo con el mío van muy rápido pero aún así al mismo ritmo.
Te robó un último beso. Muy rápido pues ya debemos salir, nos sentamos en nuestra mesa te veo a ti mirando la nada y tocando tus labios y yo me doy cuenta que no he dejado de mirarte, tomo tu mano y es allí que tu mirada se encuentra con la mía. Me regalas una sonrisa, una que me hace suspirar. Miro el reloj y ya voy retrasada no me quiero ir pero debo hacerlo.
Te despido con un abrazo. Y con ganas de darte otro o tal vez mil besos más. Pero me reprimo, te veo partir.
Si tan solo supieras lo feliz que me haces, desde que llegaste solo el pensar en ti me hace feliz. Tu me haces sentir bien, jamás me había sentido bien con la compañía de alguien pero tú tienes ese algo que me encanta. Antes podía estar entre una multitud de personas y aún así sentirme sola. Ahora solo con tenerte cerca así sea a un mensaje de distancia siento tu presencia. Cómo diría Arjona me acompañas a estar sola...
Parpadeo un par de veces y lo que pensé que estaba imaginando en realidad había pasado, mi cabeza sigue dando vueltas. No sé cómo llegué a dónde estoy sentada, intento concentrarme pero no puedo. Al parecer en ese beso te llevaste algo más que mi alma pues no entiendo ni lo que me están diciendo. Yo sigo hipnotizada, recordando mil veces mas lo que acaba de pasar...
PD. Estaba publicado antes y decidí volverlo a subir... Espero les guste
