Clawen - One shots

Un mal día

          Claire Dearing bajó de su coche totalmente frustrada pegando un portazo. Llevaba un día horrible. Aquel día había tenido programadas tres reuniones con distintos inversores que habían tenido que ser retrasadas por problemas con el ordenador central de comunicaciones del parque. Aquel cacharro había decidido averiarse a primera hora de la mañana y los técnicos habían tardado horas en arreglarlo provocando un gran retraso en las reuniones y, por tanto, en todas sus actividades programadas. Retraso que había tenido que solventar olvidando su descanso para almorzar. Para colmo, había tenido que lidiar con Masrani y sus excentricidades durante tres horas por conferencia y con un nuevo pasante que la había abrasado y echado a perder su chaqueta con la ayuda de un café caliente.

          Cuando Claire creía que podría relajarse y aislarse del mundo en su despacho terminando algunos informes resultó que los problemas de su día no habían acabado. Debía terminar un informe de resultados para una reunión con InGen para el siguiente día a primera hora, pero no podía porque cierto entrenador de raptores había decidido no enviar un sólo informe desde hacía más de un mes.

          Había llamado al teléfono de Owen una veintena de veces, sin ningún resultado distinto al contestador de voz, cuando aceptó que si quería aquellos informes tendría que ir a buscarlos ella misma. Y allí estaba, cansada y frustrada, con un recinto para velocirraptores frente a ella.

          Al bajar del coche vio a Barry hablando con uno de los chicos que trabajaban en el recinto y fue directamente hacia ellos.

          - Barry, ¿dónde está Owen? .- preguntó a bocajarro.

          - Está en la pasarela, entrenando con las chicas.- dijo observándola sorprendido.

          Claire no contestó, directamente dio media vuelta y se encaminó a las escaleras que daban a la pasarela.

          - Jefa, no creo que sea buena idea que suba. A Owen no le gusta que haya gente en la pasarela mientras entrenan. Las chicas se distraen con facilidad y hoy no están teniendo un buen día.- dijo Barry siguiéndola.

          La mujer se paró en secó en el primer peldaño de la escalera y se giró para mirar a Barry.

          - Primero y ante todo Barry, hoy precisamente no es el momento oportuno para que nadie me diga lo que es tener un mal día. Y segundo, todo lo que pueda opinar Owen puedes contárselo a quien le importe.

          Claire no dio oportunidad de respuesta alguna pues se giró y subió sin más en busca de aquel hombre que si no tenía cuidado acabaría siendo empujado aquel mismo día a la jaula de sus raptores por una pelirroja cabreada.

          Owen estaba concentrado en el nuevo ejercicio que estaban probando. Desde luego las raptores estaban teniendo un día bastante agitado y le estaba costando que obedecieran las órdenes más sencillas pero en aquel momento parecían estar avanzando por fin. Lo parecía claro, porque en aquel momento Blue giró la cabeza observando algo y con un graznido alertó a sus hermanas haciendo que todas cambiaran la atención de él al otro lado de la pasarela.

          Cuando vio a Claire allí, echando a perder el trabajo que después de horas estaba a punto de conseguir, estuvo a punto de gritarle que se largara, pero al mirarla durante más de dos segundos cambió de idea. Tenía el pelo ligeramente revuelto y las mangas de su camisa estaban remangadas hasta sus codos. Owen ya la había observado más de lo que le gustaría y podía distinguir con un solo vistazo si había tenido o no un buen día y, claramente, aquel día no lo había tenido. También había aprendido que si no estaba de buen humor era mejor no cruzarse en su camino. Por si fuera poco, conforme se iba acercando a él podía ver la furia en su mirada, una furia que estaba seguro iba dirigida a él.