My Lovely Xiao

01♡

Una mañana mas, nada fuera de lo normal. El sonido de un despertador me aturdia hasta que me digne a levantarme "Aah...¡Que horror! no me quiero levantar." Esas palabras pasaron por mi cabeza hasta que escuché a mi hermana Lumine llamándome.

"¡Venti que vengas a desayunar! ¡Llevo 10 minutos llamandote,flojo!"

"Si,si...Ya voy Lumine"

...

"Hasta que te dignas a levantarte Venti."

"Aja, si...Lumine ¿y Aether?" Pregunte sobre mi otro hermano.

"Ah, el salio hace rato con su novio"

No le preste mucha atención a esta frase, hasta que empeze a formularámás.

"Espera ¡¿NOVIO?!"

Dije exaltado respondiendo a lo último que mi hermana había dicho.

"Si, ¿no sabias?" Dijo mi hermana.

"¡Por supuesto que no sabia! !¿porque no me dijo?!" Respondi haciendo puchero.

"Yo que se, ahora come Venti, que tienes que ir a la universidad."

"¡La universidad! ¡Se me olvido por completo! Agh."

Deje mi plato de comida sobre la mesa y corrí hacia mi habitación para arreglarme y salir lo más rápido posible, creo que Lumine se enojo porque no comí, pero bueno.

De camino hacia la universidad me cruze con Aether, mi hermano.

"¡Aether! ¿que haces aquí? ¿¡Y aparte porque no me dijiste que tenias novio!?

"Venti- eeh...¡Te explico luego! ¡Ahora ve a clases!"

Después de esto, que me extraño bastante realmente comenze con mis clases del día, en el tiempo libre me choque con un chico, bajo, de pelo verdozo y ojos color ámbar, me pareció el chico más lindo que había visto.

"¡Ouch! Mhm...Lo lamento." Dije acariciándome la rodilla por el golpe que me di al caer.

El chico con el que choque no dijo nada, solo me miró y me extendió su mano para ayudarme.

"Mm...Gracias."

"¿Estas bien?"

Escuche una voz profunda que me preguntaba y mire, era el chico.

"Si, no te preocupes solo es un golpe."

Aquel chico agarro mi mano y me llevó a sentarme.

"Estas sangrando."

"Mm...Si, pero estoy bien."

"Déjame ayudarte."

Aquel chico se agacho estando delante de mi pierna, me puso un algodón con algo como para desinfectar creo, y luego me puso una bandera.

"Ya esta, ya estas mejor, así no se te infectara."

Me sonroje ante estas palabras de aquel chico.

"Ah, si, gracias."

"No hay de que."