Después de haber pasado un año de mierda, con la persona que más me lastimó, lo conocí a él.

En su bonita cara se le marcaba una sonrisa y en sus ojos veía mi reflejo. Ahí estaba él, admirando cada parte de mi, observando mis pequeños detalles que yo misma no dejaba ver. Y ahí estaba yo, viendo sus largas pestañas que podían atraparme con un parpadeo, viendo su gruesas cejas y deseando siempre ver aquel rostro.

Gilbert me hacía sentir única, de alguna manera que aún no comprendía, me hacía sentir especial y eso era realmente bueno.

Era realmente bueno.

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⏰ Última actualización: Mar 17, 2022 ⏰

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Lindos recuerdos de un corazón enamoradoDonde viven las historias. Descúbrelo ahora