Danmachi: Bell, el último portador

Cap 1: "Primer Día en Orario"

<Entrada/Salida> - Lugar/Tiempo.
Estado - Estado (xD).
<Prometheus> - Magia.
Inicio/Fin de FlashBack - Lo que dice ahí.
------- - Salto de tiempo.
=========== - Nota/Estado completo.
"Rabbit Foot" - Apodo de aventurero.

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- Abuelo no... ¡Abuelo!

Todo el panorama estaba cubierto de fuego, sangre desparramada por todo lado, el aroma a muerte y cuerpo siendo calcinados.

Era una jodida pesadilla y en medio de todo esto se encontraba un niño de cabello blanco, sus ojos llorosos solo observaban el cuerpo inerte de su abuelo, su única figura paterna, lo último que le quedaba después de la muerte de su tía hace un poco más de un año.

- Bell... No llores por mí muerte... Recuerda que te amo... Sé el héroe que siempre anhelaste ser. - Palabras que no sonaban más que simples susurros audibles para el pequeño, pero que tenían un enorme peso en este mismo.

El anciano por última vez le sonrió a su querido nieto y cerró los ojos para dejar el plano terrenal.

Un enorme pilar de luz comenzó a generarse y el niño se vió obligado a cerrar sus ojos fuertemente.

- ¡Jajaja! ¡Por fin pudimos deshacernos del estúpido de Zeus! Maten al niño, que no quede testigo. - Fueron las palabras de una persona tapada con una túnica, sus súbditos decidieron terminar finalmente con el trabajo que iniciaron hace ya una hora atrás.

"¡Hasta aquí llegaste niño! ¡Por Tanatos-sama!"

Esas palabras se podían oír de los hombres, los cuales ahora estaban a pocos metros del niño, el cual con puro terror apenas y podía retroceder lentamente, se había lastimado su pié derecho y solo podía arrastrar esté en un vano intento de querer escapar.

- Feliz cumpleaños, Bell-kyun~. - Y con esas últimas palabras dicha por aquella persona encapuchada y con los gritos de un niño, fue cuando se dió fin a la terrible pesadilla del niño...

¿O no?

A poco centímetros de ser empalado vivo, el tiempo se detuvo para el pequeño y luego todo se volvió oscuro.

Pero... A poco metros delante suyo, se formaba un camino que al final parecía ver alguien.

Sin entender nada, el cuerpo del chico comenzó a moverse siguiendo el camino.

Su mente era un caos ¿No qué hace unos instantes atrás estaba apunto de morir? ¿Qué estaba sucediendo?

- Fácil, niño... Parece alguien interesantes con un futuro sin igual... Así que Bell Cranel... - Se pudo oír la voz de una mujer que se hacía más fuerte con cada segundo.

Y frente suyo, cuando finalmente abrió los ojos y observó lo que tenía adelante, se congeló en su lugar.

- Yo, Histeria, he decidido darte la oportunidad de vengarte de las personas que te arrebataron a lo que más amaba, te daré el poder de seguir adelante, pero a cambio, me darás tu cordura y me alimentaras con tu furia y rabia, con tus deseos de venganza y sed de sangre. - Habló a la que ahora había salido completamente de la oscuridad del lugar.

No era más que una mujer alta, demasiado alta y de una piel blanca, cabello corto negro y al igual que este, el iris de sus ojos eran similares, tenía un vestido que fácilmente podrías decir que era del estilo gótico y parecía tener un tatuaje en la parte alta de su antebrazo izquierdo.

Pero lo que más daba miedo era su sonrisa y aquellos dos puntos rojos que parecían ser sus pupilas.

- Y-Yo... - Bell no podía salir de su shock, aunque su cuerpo temblará por el miedo, la mente del niño no estaba a la par que su cuerpo.