III

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Las manos callosas le recorrieron la cintura por debajo de su camiseta, mientras los gruesos labios le besaron el cuello, Minhyuk gimió excitado por ese simple contacto y aunque intentó callarse, su boca siguió haciendo ruidos dejándose tocar y besar. Demonios, Se supone que no quería, pero ahí estaba otra vez. Una de esas manos que lo tocaban se dirigió hacia su pantalón y él intentó detenerla sin mucho éxito. —Dijimos que no volvería a suceder.— alcanzó a decir, pero sus labios fueron silenciados por la boca húmeda y caliente, otra vez.

—Solo una vez más.— Minhyuk negó con la cabeza, pero sin poder apartar su cuerpo ni un centímetro del pecho desnudo del chico frente a él.

— Hyungwon no...— pero fue en vano porque su cuerpo se estaba moviendo involuntariamente contra la erección que se apretaba contra su abdomen.—Mierda, no...

—¿No, qué?— una tercera voz lo hizo abrir los ojos de golpe, encontrándose justo frente a él los ojos negros y filosos de Changkyun mirándolo con curiosidad. —¿Qué te estaba haciendo Hyungwon?— Su primer reflejo fue empujar ese rostro frente a él, lo más rápido y fuerte que pudo, sintiéndose mareado por despertar de su sueño con tal interrupción. —¡Oye, eso dolió!— se quejó el menor cubriendo su nariz, el lugar, donde Minhyuk creía, lo había golpeado.

Ignorándolo y levantándose de su cama con pesadez, Minhyuk buscó al rededor de toda la cama su celular, con desesperación para poder comprobarse que lo otro solo había sido un sueño -no, mejor dicho una pesadilla- y que al fin estaba en la realidad.

—¿Estas bien? Estas muy sudado.—Shownu apareció detrás de Changkyun, sentado en la silla de juegos, enfocándose más en su celular que en él.

—Si... — les respondió parpadeando lento. —Lo siento Changkyun, me asustaste...—Changkyun se alzó de hombros ante su disculpa y se soltó la nariz.

—Está bien, no dañaste mi perfil perfecto.— Tanto él como Shownu soltaron una risita restándole importancia a las tonterías del menor de la casa y Shownu se levantó para acercarse a mirarlo mejor.

—No queríamos despertarte, pero te veías muy acelerado. ¿Tuviste una pesadilla?

—Parecía un buen sueño, no una pesadilla.— Changkyun levantó las cejas de forma coqueta y Minhyuk lo empujó de nuevo.

—Fue una pesadilla.— Afirmó levantándose.

—¿Quieres hablar de ello? Dicen que es bueno contar "las pesadillas"—Minhyuk miró mal una vez más a Changkyun por haber hecho comillas en lo de pesadilla y mejor decidió irse a bañar envolviéndose todo el cuerpo con la manta con la que había estado durmiendo. No sabía que tanto había dicho en el sueño, pero estaba avergonzado y prefería huir antes de enfrentarse a escuchar más preguntas y bromas del menor. Aparte, odiaba sudar y le urgía meterse bajo una regadera por otro problema dentro de sus pantalones. —¡También dicen que se hacen realidad si no los cuentas!— decidió no prestarle atención a eso último sin querer pensar en los muchos sueños parecidos que había tenido en estos últimos días y como no había contado ni un solo. Oh no, jamás se harían realidad. Y jamás los contaría.

Caminó por el pasillo en dirección hacia el baño, pero la única persona que no quería ver salió de ahí antes de que abriera la puerta.

Mojado y con solo una toalla cubriéndole la parte inferior de su cuerpo, Hyungwon se quedó quieto frente a él recibiendo toda un "body check" por parte de Minhyuk. —Buenos días.— lo escuchó decir y esa fue la señal para apartar la mirada de él, avergonzado aún por su sueño fatal. —¿Estas bien?

Minhyuk asintió sin poder sacar palabra de su boca y rodeó al menor para pasar al baño sin hacer contacto visual. Nada más cerró la puerta la humedad del lugar lo golpeó con fuerza haciéndolo sonrojar aún más.

Jugando a experimentar - HyungHyuk (Cancelada) Donde viven las historias. Descúbrelo ahora