Ultraviolence | Izana x Lectora

1

- ¿Enserio me quieres?

Dijo ______ bastante ilusionada al saber que un chico la quería, no lo conocía pero le emocionaba.

X: Si, entonces, ¿Me acompañas a casa? Solo iré por algo a mi habitación.

_____ asintió segura.

Caminaron ambos a casa de el, tu ibas pensando en lo bien que la pasarías con un chico que te ame, algo que siempre quisiste.

X: Ya casi llegamos. - te tomó de la mano, sentías como poco a poco la apretaba.

- ¿Que pasa?

X: Camina. - te dió un pequeño jalón, su semblante era serio.

Asustada, te detuviste e intentaste safarte de su agarre, pero era demasiado tarde, era muy fuerte.

- ¡Quítate! - gritaste asustada.

X: ¡Quédate quieta! - quiso jalarte hacia el, hasta que apareció un tipo con una cicatriz que atravesaba su cara.

?: Oye, suéltala. - se acercó con un semblante serio, a su lado venía otro tipo con ojos lila y albino.

X: Jefes... Ella solo está molesta por algo que hice, es bastante berrinchuda. Amor, vamos a casa. - te dijo mirándote fijamente a los ojos.

Tu solo lo miraste y después miraste a los otros tipos con miedo.

?: No se ve que sea tu pareja.

X: S-señor Kakucho, señor Izana, de verdad, ella solo está haciendo un berrinche, ya saben cómo son las mujeres. - rió nervioso.

"Kakucho": No, no lo sé.

"Izana": Yo la veo asustada. - se acercó a ti, te tomó del mentón e hizo que lo vieras.

Tu solo alejaste un poco tu rostro.

Izana: ¿Cómo te llamas?

- __-_____...

Izana: Ya veo, ¿El es tu pareja?

- No...

Izana chasqueó los dedos a Kakucho, enseguida Kakucho comenzó a golpear al tipo que te intentó llevar a la fuerza.

Izana: Ve a casa.

Tu asentiste y te fuiste a casa, caminabas lento, pues tu casa no era tu lugar seguro...

Cuando llegaste te encontraste con la escena de siempre.

Tu padre estaba en el sillón mientras bebía cerveza y miraba la televisión, tu madre estaba a lado de él, ambos reían por su programa de televisión.

M: Hasta que llegas.

Los ignoraste y te fuiste a tu cuarto, dejaste tu mochila en el suelo para después sacar tu teléfono y audífonos, después, pusiste tu música favorita a volumen bajo.

No sabías que hacer por las tardes, normalmente solo te la pasabas mirando tu teléfono, revisando tus redes sociales mientras comías frituras.

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En la tarde, saliste a escondidas de tus padres.

Pasaste por el centro, mientras caminabas veías a unas cuantas parejas dándose afecto y cumplidos, mientras entrelazaban sus manos y se llenaban de abrazos y unos que otros besos en la mejilla.  "¿Que se sentirá ser amada por un hombre?" Pensaste.