Capítulo 09

675 83 1
                                    

Narrador omnisciente. 

—¡Jeon Jungkook! —el grito resonó por toda la gran casa. 

El alfa se estremeció temiendo por su salud. Joder, ahora no sabía que había hecho para hacer enojar a bello y dulce Omega. Con temor el alfa pelinegro se levantó del sofá y subió las escaleras a pasos temblorosos y dudosos. Su esposo era alguien de temer y eso era algo más claro. 

Intentó hacer en el camino un recorderis de lo que sea que haya hecho para que su esposito este en ese estado; sin embargo, no encontró nada. Se había portado bien, y mucho. Había sido muy juicioso esta semana, no había hecho nada malo. O bueno, si lo hizo, no lo recordaba. 

Sin tocar, abrió la puerta y se sorprendió al oler la oleada de feromonas de Vainilla con mermelada y duraznos, su lobo aulló y gruñó felizmente, pero Jungkook seguía sin entender. 

—¿Tae? —llamó al menor con temor— Mi amor, corazón, bebé, mi vida, terroncito de azúcar. 

La voz le tembló, pero su omega no apareció. De la nada, sintió una —o varias mejor dicho— presencia detrás de él. Por lo que, se giró y encontró a Beomgyu, Jennie y Suho. El menor tenía su naricita arrugada olfateando el aire, y los dos mayores tenían el ceño fruncido. 

—¿Qué hacen aquí, mocosos? —gruñó el alfa dándose vuelta, enfrentando a sus hijos. 

—¿No te has dado cuenta? —gruñó de igual manera Jennie. 

—No me gruñas, jovencita —reprendió Jungkook. 

—Realmente eres torpe —bufó la chica negando. 

—¿Por qué mejor no te largas con Lalisa? —inquirió Jungkook. 

—Papi, ¿Por qué huele a leche? —preguntó Beomgyu. 

Jungkook miró a su hijo y frunció su entrecejo. ¿Qué? 

—Papá, hasta abajo huele a leche —comentó Suho frunciendo sus labios. 

—¿Cómo? —sus ojos se abrieron en demasía y boqueó—. Vayan con sus abuelos... 

Fue lo último que dijo antes de entrar y cerrar de golpe al puerta de la habitación que compartía con su omega. Suho suspiró y miró a su hermana, tomó a Beomgyu en brazos y fueron al primer piso. Sacaron a todos a dar una vuelta y a visitar a los abuelos. 

—Esta en cinta, ¿cierto? —cuestionó Suho. 

—Parece que sí —suspiró Jennie. 

—¿No es muy pronto? Es decir, Moonbyul a penas va a cumplir un año en un mes —opinó Jun-myeon. 

—Hum... Realmente no sé, pero bueno, tengamos en mente que posiblemente un nuevo miembro vaya a llegar. 

Los dos alfas hablaban en susurros, sin embargo... Debieron ser más discretos...

—¡¿TENDREMOS UN HERMANO?! —el grito a unísono resonó en sus espaldas. 

Ambos alfas cerraron sus ojos y apretaron sus labios. Mierda. 

Los Jeon || [KOOKTAE]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora