Corrupto Cristal

Dia 1: Pesadilla Sin Fin.

Solo sobreviviamos y aun asi, terminaron asi, todos ellos, uno por uno, por estas bestias los cuales tenian numero sin fin, y asi, senti lentamente la fria mano de alguien tocarme mi hombro mientras yo solamente miraba a los cadaveres enfrente mio.

¿Qué es aquello que más deseas pequeño?

Cuando levante mi vista para responder, lo único que podía ver era el rostro de un Ghoul con su unico restante ojo mirandome, pero antes de que pudiera responder, este se me tiro arriba y lentamente abrió su boca acercándose a mi cuello.

Esta no era mi primera vez visitando este lugar, y ellos contaban con que el pasar de tiempo, mis pesadillas me devorarian, pero no seria el caso, yo sabía que estaba ocurriendo.

Tomando control de la situación, moví mi mano derecha hacia mi cintura, donde desenvaine mi espada hacia la criatura y le corte la cabeza, dejando que su sangre rápidamente saliera de la herida y cayera sobre mí, bañandome en ella.

Me levanté y empecé a correr hacia afuera de la casa, aun asi, cuando intente, las manos de mis hermanos y hermanas se aferraban a mi y me hacían la misma pregunta que el Ghoul me habia hecho:

¿Qué es aquello que más deseas pequeño?

Nunca respondí, así que incluso contra mis mas grandes temores que tenia, empeze a cortar las manos de aquellos los cuales me aferraban apenas vine a este mundo, apenas me pude liberar, continue corriendo hasta finalmente llegar a la salida.

Observe mis alrededores, me era dificil ver que era este lugar, todo estaba desenfocado, pero parecia ser una ciudad.

Esto no me era nada nuevo, aun asi lo que no me esperaba era un Vampiro mirándome desde el cielo mismo, flotaba pero carecía de alas, sus ojos brillaban con el mismo color que el del Ghoul, vestia la misma ropa que solian usar los nobles cuando nuestra tierras no eran plagadas por sus presencias.

¿Qué es aquello que más deseas pequeño?

Como muchas veces antes, me mantuve callado mientras dirigia el filo de mi espada hacia el Vampiro, este soltó una sonrisa macabra y chasqueo, apenas hizo esto, vi una horda de Ghouls salir debajo de la tierra, con sus gritos de pesadilla, todos ellos empezaron a correr hacia mi, yo aun asi ya había tenido este momento antes, así que prepare mi espada a mi lado mientras las bestias se acercaban, lentamente cerré mis ojos mientras cada uno de ellos se acercaban, no por miedo, pero para encontrarlo al vampiro entre los otros Ghouls, y eso era gracias al poder del Cristal.

Creo que es momento de que explique: Hace un tiempo me encargaron en una mision para retirar este cristal, no se que hace si mucho menos su utilidad, pero aprendi una sola cosa: Le otorga aquellos que no pueden, magia. Cada vez que una pesadilla termina, tengo un nuevo hechizo para utilizar, aunque no vengo de una familia de magos.

Uno de mis primeros hechizos es localizacion, relativamente sencillo de explicar, concentro mi mente en localizar la energia oscura de un ser, permitiendome acercarme con mayor facilidad al objetivo sin importar cuantos enemigos hayan entre nosotros.

Concentre mi mente, y de ahi, mis ojos se abrieron al ultimo segundo de las bestias acercarse a mi, el tinte de mis ojos ahora eran violeta cristalizado, casi como si fuera una gema.

De ahí sentí como mi cuerpo se movía de por sí solo, mi brazo lanza la espada hacia el Vampiro, el cual esquiva con facilidad, aun así en ese momento, senti como mi cuerpo se comprimia en si mismo, raramente no senti ningun dolor, aunque fue muy incomodo.

En el siguiente momento, me vi sosteniendo la espada en el aire, detras del Vampiro.
Mientras los Ghouls y el Vampiro giran su cabeza para encontrarme, yo atravese mi espada en la espalda del Vampiro y junto con este, empezamos a caer hacia el suelo, de ahí mis piernas reventaron contra el suelo junto con el cuerpo del Vampiro, aunque solo uno de nosotros murio.

Los Ghouls se detuvieron y se quedaron inmoviles por unos segundos, un charco de sangre empezo a formarse bajo mis pies mientras los Ghouls lentamente se alejaban, sus cuerpos se deformaban y sefencobana al igual que el resto de la ciudad.

Mis ojos vuelven al color usual antes de que vea el mundo alrededor mío ahogarse en completa oscuridad, incluyendo el cuerpo del Vampiro, siento como el suelo desaparece y empiezo a flotar, lo último que logro escuchar es la misma y familiar voz que había tenido en estas recurridas pesadillas, aun asi lo que dijo me inquieto, ya que por primera vez, escuche algo distinto de lo normal.

Protege la mujer a toda costa.

Vakzar:
¡AAAAH!

Con un intenso dolor de pecho y un grito, vuelvo a abrir mis pupilas para ver que aun seguía con vida luego de haber sobrevivido mi última pesadilla, miro a mis alrededores para ver que me encontraba bien, almenos no fui devorado por esas bestias infernales.

Vakzar:
Agh... Mi cabeza arde como las llamas del sol...

Inmediatamente me puse a revisar si aún estaban mis otras pertenencias conmigo, confirme que todo seguía en el mismo lugar de antes, en especial el cristal, no lo saque de la tela que lo cubría debido a los efectos secundarios que ocasionan las pesadillas, aun asi logre encontrar lo que estaba buscando, un pequeña hoja de color celeste como el cielo, empeze a morderlo mientras me pensaba a mi mismo.

Vakzar: (¿Qué fue lo que escuche? Protege la mujer a toda costa...)

Aun así, no tuve tiempo de pensar en una respuesta, ya que cuando fui a voltearme para ver a la mujer, vi que ella ya no estaba donde la había dejado, me preocupe por la desaparición de esta, así que me levante mientras examinaba los alrededores, tratando ver ver si ella estaba cerca, mire al suelo cercano para ver si había algún tipo de rastro, fue solamente ahí que cuando meti mi mano a la tierra note la diferencia en este, el color de este era distinto, en vez de ser del mismo color marrón al cual me acostumbro a ver, era de un azulejo de algún tipo.

Vakzar:
(Que demonios..?)

???:
Veo que te has despertado.

Casi se me sale el corazón e instintivamente me volteo en direccion de la voz para ver a la mujer mirandome en la distancia, podia ver que ella llevaba algo en sus manos, parecian ser diferentes tipos de hierbas.