04... El primer paso.

2.9K 268 13
                                    

La cena había terminado, pero todos se encontraban aún sentados, compartiendo alguna que otra anécdota y continuando con el interrogatorio que poco a poco se volvía menos denso. Era denso para Heeseung, el que se sentía un tanto fastidiado ante tantas preguntas entrometidas sobre su relación y su lindo novio. Pero Sunoo respondía a todas amablemente y con una sonrisa, obviando los detalles que creía innecesarios de mencionar. De lo que Heeseung se encontraba agradecido.

-¿Quién fue el que propuso ser novios? -preguntó curiosa YeJi, aunque la respuesta fuera obvia, quizás pudiera llevarse una grata sorpresa.

Una ligera sonrisa apareció en los labios del peliazul, la que no fue desapercibida por nadie. Tampoco la suave risa de Sunoo, quién se calló por primera vez para dejar que el más alto hablara.

—Puede que no se lo esperen, pero lo hice yo-respondió Heeseung, con cierto tono de orgullo, el que hizo que su novio riera con ternura. Un "oh~" se escapó de los labios de todos, que resultaron sorprendidos.

El mayor no solía dar el primer paso, no estaba en su naturaleza. Él esperaba a que las cosas llegaran, nunca las buscaba, no se encontraba en la necesidad de hacerlo. Si algo no llegaba, una razón había y quizás no era lo que él precisaba. Querían creer que era porque Heeseung creía en el destino y no porque era demasiado inseguro para dar el primer paso, o quizás era perezoso.

-Normalmente...continuó hablando Heeseung luego de notar como su grupo de amigos buscaban saber más, pero sin animarse a preguntar. Vaya chismosos -, no soy de dar el primer paso. Uhm, me da ¿inseguridad? -balbuceó con incomodidad.

Todos en la mesa hicieron silencio, esperando pacientemente a que el alto hablara, dejando que lo hiciera a su tiempo. Conocían perfectamente a su amigo, sabían lo complicado que era para él poder expresarse y ahora lo estaba haciendo por su cuenta propia, no debían hacer nada más que esperarlo.

-No lo sé, simplemente no puedo hacerlo-expresó; su mirada vacilando, esta se perdió debajo de la mesa donde la cálida mano de Sunoo tomó la suya, sonrió en pequeño ante esto-. Pero con Sunoo fue diferente ¿saben? Con él me siento con la suficiente confianza para poder expresarme, supongo que es su personalidad y el hecho de que siempre se mostró totalmente interesado en mí lo que ayudó en eso. Yo sabía que Sunnie me gustaba, y que era correspondido, pero nunca hice algo para mostrarlo realmente,entonces pensé ¿por qué no ser yo quién lo proponga? El siempre hizo todo lo lindo, si no fuera por él, nunca hubiéramos avanzado y creí que era mi turno hacer algo por nosotros. Hyung hizo mucho... Entonces, bueno, le pedí ser mi novio.

El grupo de amigos miraba enternecido a la pareja que repentinamente había creado su propia burbuja. La mano de Sunoo acariciaba tiernamente el rostro del más alto, quién aún lo tenía bajo, pareciendo jugar con sus manos unidas en la mesa. Los dejaron ser, porque podían notar el ligero temblor en el cuerpo de Heeseung. Quizás ellos no entendían del todo qué sucedía, pero el pelirosa lo hacía perfectamente.

Si bien Heeseung no solía expresarse, en su relación no había ningún secreto y con el tiempo aprendieron a conocerse, el menor debía admitir que aquello era gracias a Sunoo, quien por el bien de ambos casi rogo por tener una comunicación sana. Sucedió un invierno, no sólo era inverno por la estación; en aquellas fechas su noviazgo estaba en sus peores momentos, casi pendiendo de un hilo. Fue difícil, el hecho de que Heeseung fuera tan cerrado generaba de vez en cuando algunos problemas, Sunoo no sabía comprenderlo y él no sabía expresarse. Pero a pesar de costarle, Sunoo conocía a su novio y por más que quisiera que lo hiciera, no iba a dar el primer paso para solucionar lo que sea que estuviera pasando entre ellos. Entonces, volvió a ser él quién tomó la iniciativa, ama mucho a su novio y no quería perderlo por aquello.

Esa tarde, Sunoo se sentó frente a Heeseung, con una taza de café con leche para el menor, quién lo aceptó gustoso. Segundos después comenzó aquella extensa charla que logró que su relación avanzara. Para poder comprenderlo, necesitaba saber qué sucedía por la cabeza de Heeseung, debía conocer sus inseguridades y temores, conocer porqué actuaba de aquella manera para ser él quien pudiera adaptarse y ayudarlo a abrirse. Debía conocer su pasado correctamente para entender a su lindo novio, y así no perderlo.

Fue costoso para Heeseung hacerlo, pero habló, le contó todo lo que sentía que le pesaba, desde las pequeñas a las más grandes de sus inseguridades. El pelinegro en aquél entonces, estaba lleno de inseguridades que su primera y última relación había provocado. En el pasado, Heeseung amó locamente, entregó todo de él, sus mejores sentimientos fueron entregados en bandeja de oro, eran puros. Su amor fue tan puro que terminó siendo ingenuo. Se aprovecharon de él y rompieron su blandito corazón; su primer amor fue doloroso, dejándolo con miles de inseguridades que hasta el día de hoy lo atormentaban.

Sunoo escuchó a su menor con atención, abrazándolo fuertemente cuando los sollozos de temor hacían temblar su cuerpo, apoyándolo y dejando que se tomara su tiempo para hablar. Le dolía, ardía y enfurecia saber que su gran bambi había sido lastimado cruelmente. ¿Cómo podían lastimar a alguien tan puro? No lo comprendía, pero ahora estaba él. Sunoo había llegado a su vida para regresarle todo el amor que alguna vez Heeseung había entregado, para sanar su corazoncito y demostrarle que se merecía todo el amor del mundo. Sunoo llegó a su vida para amarlo de verdad.

Luego de aquél día, su relación fue creciendo aún más. Ahora que Sunoo sabía acerca de sus temores y la causa de estos, buscaba la manera de ayudar a su novio para que se sintiera en confianza, para que pudiera expresarse y así ambos solucionaran cualquier problema que enfrentasen, como la pareja que era. Le llevó tiempo, pero logró que Heeseung confiara en él y el día de hoy, podía expresarse un poco más abiertamente, ya sin él tener que insistirle a hablar.

Volviendo al presente, los amigos de Heeseung dieron por terminada la sección de preguntas sobre la pareja y Sunoo. Creyeron suficiente todo al oír las palabras de su mejor amigo, dejandolos casi con la boca abierta. Heeseung habló sobre sus sentimientos, admitió sentirse inseguro y a su vez, logró demostrar lo tan enamorado y seguro que se sentía junto al pelirosa de labios bonitos. Sus palabras fueron suficientes para que todos supieran que, efectivamente y sin errores, Sunoo era todo lo que Heeseung necesitaba. Y estaban realmente felices por él.

Aunque otro problema, o quizás persona, llegó a la mente de todos. Pero habría tiempo para encargarse de ello.

el novio de heeseungDonde viven las historias. Descúbrelo ahora