Capitulo 1

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Eran vacaciones y teníamos una fiesta en la playa, así que me puse un traje de baño con una falda y una franela medio trasparente que dejaba ver la parte de arriba de mi traje de baño, no estaba en mi momento más delgado y eso me hacía sentir un poco incómoda, no fea claro que no, me amo como soy pero eso no evita que este cambio de peso me de un poco de incomodidad, no estoy gorda que ruedo pero siempre fui muy delgada entonces es raro estar tan cachetona pero estoy bien con eso, o por lo menos hasta qué debo vestirme. Recogí mí cabello platinado en una trenza y me aplique unas sombras que jugaban con mi ojos azul oscuros y estaba lista.

Cuando llegue a la fiesta era una locura me divertí un poco pero ya me sentía agobiada así que camine un poco por la playa hasta que llegue a unas piedras que hacían como una especie de pequeña pared qué apartaba el lugar y allí me senté.

Decir que pensaba en algo específico sería mentir a veces piensas en tanto que no piensas en nada, y ese era mi caso, así que solo estaba perdida mirando el horizonte.

— hey.

Cuando oí su voz me asuste pues estaba tan perdida que ni lo vi llegar — ho-hola-

— No quería interrumpir sólo que la fiesta está un poco intensa y empecé a huir y este era el camino más seguro, no sabía que ya estaba ocupado.

— Tranquilo no es un problema también solo quería escapar de la fiesta un rato — no tenía idea de quién era este chico de cabello castaño y ojos color avellana oscuros, llevaba una camiseta y unos shorts que no le quedaban nada mal, realmente el estaba bien proporcionado no era musculoso deportista. El era alto, delgado pero definido, blanco como talco y con una barba encantadora. — No te había visto antes por aquí.

— me mudé esta semana a casa de mi tía así que soy el nuevo — encogió sus hombros mientras decía esto como si no fuera algo que le hiciera muy feliz.

Y mi curiosidad despertó pero apenas nos conocimos ni sabía su nombre no podía meterme en su vida.

— Pues bienvenido — le brinde una media sonrisa.

— gracias. —

Luego de eso nos quedamos en silencio los dos. No era incomodo no para mi al menos. y en eso llego Pato

—hola hola te estaba buscando pequeña escurridiza— Pato es mi mejor amiga desde no se hace cuánto se llama Patricia pero yo le digo pato por cariño.

Somos dos polos opuestos ella es amor, ternura y locura y yo soy pues ella dice que no hay una categoría para mi que solo soy yo pero se que piensa que que soy seca y amargada a veces.

— Hanm qué tal va la fiesta?? Solo vine a descansar un poco del ruido.

—oh ya veo — dijo ella mirando el chico sentado a unos metros de mi.

— hanmm pato el esss... —dije señalándolo— disculpa no sé tu nombre ni siquiera— que torpe ni me presente con él en este rato.

— Soy Kay un gusto.. pato? — Pregunto dudando un poco el nombre.

— jaja no, Patricia o Patty. Pato me dice esta niña ocurrente. Un gusto también kay.

Bueno cariño es hora de irnos— me dijo pato y es que mis padres no me dan permiso hasta muy tarde y si no llego puntual pues tendré un severo castigo.

— Cierto... Adiós kay y bienvenido de nuevo. Me despedí para irme con pato.

****

—Hoy tendremos una cena con la familia Moreno  así que no llegues tarde a casa para que te puedas alistar con tiempo.

—Si mamá.

Mis padres quieren casi que casarme con Mateo el hijo del Sr. Moreno el socio de papá.
No soporto cuando organizan momentos para encontrarnos, No es feo y me cae muy bien pero no hay chispa, por lo menos no de mi lado.

Salí de casa rápido para que no me dieran el sermón, voy de compras con Pato pues si no se pondrá histérica por qué no e ido a verla mas desde el día de la playa.

—Tus padres te presionan de nuevo??.
—Cómo sabes?
—Chica te conozco muy bien, cuéntame qué pasó ahora con ellos?
—Mmm lo de siempre quieren juntarme con Mateo, papá quiere que sea perfecta, Marta vive en su mundo de verse bien y no se si me entiende.

Pato me conoce bien no hace falta explicarle mucho por eso es mi mejor amiga, solo con verme ya sabe que puede estar pasando en mi cabeza.

—Querida sé que no es fácil pero si no te gusta Mateo debes plantarte con eso, no es cualquier cosa es parte de tu futuro.
—lo sé.
—Bueno espero me cuentes con detalles lo que pasará hoy.
—Claro que si... chismosa.
—Aaahhh como me dices, sabes quien atenderá tus crisis futuras.
— jajajajaja tu, sabes que tú. Bueno me voy chaituuu
—Chao, suerte.

La cena:

Mateo está bien vestido cómo siempre con su pelo castaño claro y ojos amarillos, es alto y delgado, cómo dije no está mal pero falta la chispa.
La comida transcurrió sin incidentes pero luego nuestros padres arreglaron un encuentro diciendo que nos tocaban a los dos los platos.

—Yo lavo tú secas.
—ok. Que me cuentas cómo va todo?
—Bien.
—Por que conmigo eres tan cortante siempre?
—Soy así todo el tiempo, no es contigo.
—mmm si tú lo dices

Tenía la esperanza de que si lo mantenía alejado él podría resistencia a la unión.

—Oye te gustaría ir al cine el domingo?

Ya veo que no funciona.

—hanm bueno debo pedir permiso ya sabes.
—Si entiendo, pero a ti te gustaría? De ser así yo puedo pedir permiso o mis padres hablar con los tuyos.

Está es la parte que más odio de esto, que meta a nuestros padres como si eso ya estuviera resuelto.

—Mmm si está bien.—
—ok hablaré con ellos y te confirmo la hora el domingo bien?
—Si está bien.

No tuve otra opción más que asentir con media sonrisa, si el niño le dice a sus papis que lo rechace y ellos le dicen a los míos quien aguanta esto, lo peor tengo la edad suficiente para decidir pero aquí no hay democracia.

*****

—Como estuvo tu encuentro con Mateo hija.
—Normal papá, cómo cualquier encuentro donde lavas platos.
—No sea así...
—Como? solo digo la verdad, tranquilo lo traté bien, iremos al cine el domingo sus padres hablarán contigo.

Le dije eso y se notó su emoción que no era obviamente la mía.

—Que buena noticia, que bueno que estén avanzando.
—Ujunm, iré a dormir.
—Descansa.

Subí los escalones rápido para terminar ya el tema.
Se que debía plantarme con el tema pero también se que no me oirán.
Si, soy patética lo sé pero no es tan fácil como creen.

Esa noche me tumbe en la cama y no paraba de pensar en todo. Y entonces pensé en él por primera vez, ¿por que se abra venido a vivir acá? Había algo, lo sé, no estaba feliz de estar aquí ¿Lo veré de nuevo? ¿Donde vivirá?...
—A mi que me importa ya tengo suficiente para pensar en eso, que me pasa.
Hace un año no quería fijarme en nadie había descubierto que era mejor no hacerlo.

Yo solo era una chica simple, o eso siempre creí, no sabía todo lo que vendría.

Jugando al amor!Donde viven las historias. Descúbrelo ahora