Parte 1

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Heart of hice

Esa mañana cuando se despertó tuvo el presentimiento de que algo no iría bien, y no se equivocaba. Allí solo en la penumbra de su habitación, acostado en su cama mirando el techo, no hacía más que rememorar una y otra vez las frases que su, ahora, ex novia le había dicho minutos antes. "Eres tan frío como Shiva", "no tienes sentimientos por nadie más que por ti", "necesito más pasión en mi vida, no puedo con tanta frialdad", entre otras.

¿Qué había hecho mal? ¿Realmente era tan malo estar con él? Si era cierto que le costaba mucho comunicarse con los demás y expresar sus emociones, pero desde que el lío con las brujas había terminado era más abierto con sus allegados y en especial con Rinoa, a la cual le contaba cada pequeña cosa que podía. Entendía que estuviera enfadada por haberla plantado en algunas ocasiones, pero ella debía comprender que ahora era comandante del jardín y tenía muchas responsabilidades con las que debía cumplir.

Suspiró pesadamente y sin quererlo comenzó a llorar en silencio. Realmente amaba a Rinoa, pero no podía hacer nada, el puesto que tenía era uno por el cual se había esforzado mucho. Le había dado todo de él y ella le pagó de la manera más horrible posible, abandonándolo y dejándolo solo con toda esa maraña de sentimientos que lo desbordaban y le lastimaban. Solo esperaba que todo el dolor pasara pronto y pudiese continuar con su vida de manera normal.

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Cuando el prefecto mencionó su nombre no pudo evitar gritar y saltar de alegría. Siguió al hombre por el pasillo y subió en el elevador a la 3ra planta, donde Cid Kramer y el comandante Leonhart esperaban a que ellos se formaran. Se colocó en fila, era la primera desde la izquierda, luego seguía otra chica de su clase y otros dos chicos más. Se colocó en pose de saludo y cuando se le dio la orden rompió con la posición.

Escuchaba atenta el sermón del director, hasta que sus ojos se posaron en el comandante y de repente sintió que todo alrededor sobraba. ¿Cómo un hombre de 25 años podía ser tan condenadamente sexy? Leonhart emanaba un aire de sensualidad y misterio que le fue difícil ignorar. De repente la mirada de su superior se posó en ella y sintió el calor recorrerle el cuerpo y depositarse en sus mejillas, se sentía sofocada a pesar de que la mirada del otro había sido tan fría e indiferente que podría haberla congelado.

El sermón no duró mucho más, entonces Cid mencionó que el comandante haría entrega de los diplomas y sintió de repente que todo su cuerpo pugnaba por volverse de gelatina. El hombre le entregó el diploma y cuando pensó que ya podría respirar tranquila, tuvo que contener el aliento, ya que aprovechando la cercanía el hombre le susurró al oído "espero que tu rendimiento en el campo sea tan bueno como en las prácticas y las aulas". El aire gélido que emanó de sus labios le rozó el cuello y sintió un placentero escalofrío recorrerla por completo, casi logrando que cayera rendida al suelo ahí mismo, pero supo contenerse y hacer como si nada.

Cuando la charla terminó sus superiores dieron la orden de romper filas, y se dispuso a voltear y marcharse, pero justo en ese momento el director la llamó y le pidió que se acercara.

- Señorita Rose, supongo que ya lo conoce, él es comandante Leonhart- le dirigió un saludo corto, el hombre prosiguió- Él está interesado en tu manejo de las armas.

- Es un halago que mi comandante me reconozca- dijo con respeto. Por fuera todo lucía normal, pero por dentro se estaba muriendo ¿Qué le pasaba? Nunca había sido tan insegura frente a un hombre.

- Tengo entendido que sabes manejar todo tipo de armas- la voz de su comandante era tranquila y suave, en su rostro no había rastro de emoción. Con razón solían decirle comandante Shiva, podría jurar que lo rodeaba un aura fría.

Heart of iceDonde viven las historias. Descúbrelo ahora